Mesón el Ciervo — Restaurant in La Iruela

Comida perfecta en la que estómago y estado de ánimo salen encantados. Comida casera, con platos de la zona, con una carta en la que cuesta decidirte porque todo tiene buena pinta. Mientras esperamos, nos sirvieron un aperitivo de hummus con aguacate que estaba muy bueno. Los platos no tardaron en llegar a manos de una agradable y atenta VIcky que hizo que la comida fuera aún más increíble. Sin duda para repetir el Rin-Ran, plato de la zona, la asadura de verduras riquísima y como principales la berenjena de carne por la cual podría haber vuelto al restaurante al día siguiente y la lasaña de ciervo. Para el café nos obsequiaron con unos almendrados caseros que estaban buenísimos, no pedimos postre porque no teníamos hueco aunque no podíamos hacer el feo de dejarnos el almendrado(y menos mal!)Un trato cercano y educado pero a la vez sin agobiar, comida en su punto de temperatura y de alta calidad, creo que ahora se llama comida reconfortante, para mí de pm, sin esperas y siempre con una sonrisa y atentas palabras. Volveremos cuando estemos...

Llamamos para reservar mesa para almorzar un domingo, ya que en días festivos y con perros es más complicado encontrar donde comer. Fueron muy amables.

El local tiene una soleada terraza, una zona de bar con una pintoresca decoración como con estalagmitas, y un comedor cálido y agradable.

Éramos un grupo de 7 personas, lo que fue una suerte porque nos permitió probar mayor variedad de su estupenda comida.

Paté de ciervo (muy cremoso y con un sabor no muy intenso). Revuelto de setas (fue el plato que mayor diversidad de opiniones obtuvo). Croquetas de ciervo y croquetas de setas (cremosas). Lasaña de ciervo (no puedo opinar mal de una buena lasaña). Canelones de jabalí (el relleno de carne no tiene tomate o tiene poco, por lo que el sabor es más intenso). Solomillo de ciervo (lo puedes pedir al punto que quieras). Ciervo en salsa de setas (no parece bonito pero es sabroso).

Es un lugar muy aconsejable para disfrutar de buena comida y, además, con...

No había estado nunca en este restaurante, cuando llegamos no había mucha gente, pero poco a poco se fue llenando todas las mesas, de primero pedimos unos entrantes, todos típicos de la zona, el paté de ciervo nunca lo había probado y me sorprendió su sabor, nos lo pusieron acompañados de una mermelada de tomate, que según me dijo la camarera lo hacen ellos, también nos gustó el rin ran, plato típico de la sierra de Cazorla, lo recomiendo tanto uno como el otro, el siguiente plato estaba muy rico unas croquetas de ciervo, como veis la cosa fue de cervidos, luego fue un cordero muy rico, que también lo recomiendo, así como el solomillo en salsa de pimienta verde, los postres muy ricos, para mí en especial la tarta de chocolate. Sobre el servicio he de decir que algo lento, pero como dije anteriormente el local se llenó y solo había una camarera, creo que lo ideal serían por lo menos dos. si paso por la zona...