Tapasanta — Restaurant in la Ràpita

Servicio pésimo. Tardaron 1 hora a traernos el primer plato, 10 minutos después trajeron el segundo y en ese instante, le pregunté a la persona que recibe las comandas si sabía más o menos cuando saldrían los siguientes (ya que llevábamos 80 minutos y nos faltaba la mitad de la comanda) y con voz despectiva y actitud prepotente "un momento, ahora lo pregunto". Después de unos minutos y no recibir respuesta, le comentamos a otra camarera que no hace falta, que lo saquen, que ya no lo queremos y vuelve a entrar a la cocina a ver en que situación estaba la comida. Al salir, pasa por el lado de la mesa sin decir nada y la volvemos a llamar para saber algo y nos dice que está a punto de salir, pero nosotros confirmamos que no queremos el plato.

Aquí viene el quid de la cuestión y el malestar que me lleve de este sitio. Me dirijo a la caja para pagar y muestro mi descontento expresando que fueran más honestos en coger reservas, que si no están preparados, que no las acepten y al menos no me voy con este mal gusto y decepción profunda. La respuesta del hombre, bastante ruin, me dice que si hubiera respondido él a la llamada hubiera dicho que no y yo le contesto que es su responsabilidad tener los empleados que tiene y la forma que tienen de organizarse.. Donde me vuelve a responder que "yo no soy el responsable, yo soy un empleado". Pagué, me quede muy indignado y con la sensación de que me había tomado el pelo engañándome sobre la condición de su persona en el restaurante. Pregunto por el responsable y me dice que no está, le pregunto el teléfono y me enseña el que está en el tiquet. Una vez fuera, sin creerme nada, llamo y me responde una chica excusándose que es la pareja, vuelvo a entrar muy enfadado, después de descubrir el engaño y pido que me devuelvan el dinero.

Me lo devolvieron y fue la única cosa positiva de la cena, porque el mal gusto de sentirte estafado y la ansiedad que me dio, esto no me lo quita nadie

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Hicimos reserva para una comida familiar. Cuando he llegado he avisado de que tenía ciertas alergias. No les he visto muy por la labor al decir lo de las alergias. Por seguridad me he levantado de la mesa y he hablado con cocina. Hemos pedido 4 entrantes de los cuales hemos tenido que cambiar 2 porque yo no los podía comer. Lo hemos hecho y cuando ya nos sacaban uno de los entrantes que era carpaccio de ternera con queso parmesano ( lo pone en la carta) no era solo queso parmesano sino también queso con pesto. Yo les he dicho que no podía comer frutos secos y que ellos tienen que poner en la carta que es lo que llevan los platos. Y aquí es cuando ha venido el problema que uno de los camareros me ha dicho: sabiendo las alergias que tienes no tendrías ni que haber entrado por la puerta 😨. Y que si tenía alergias haberlo dicho en la reserva y les digo para que si os lo estoy diciendo ahora, es carta, que no menú, y no me estás dando opciones ni tampoco me lo queréis hacer a parte. A demás yo tengo alegrías alimentaria y una persona celíaca, con intolerancia a la lactosa, etc, que hacéis? Que no entre ya directamente. Han sido unos mal educados. A salido el jefe disculpandose que no nos fuéramos y el camarero ha emplazado a decir que esto el no lo había dicho... Lo hemos oído 8 personas! Y al jefe como no le ha interesado se ha metido en la cocina, así sin más. Nunca me había sentido tan mal en un sitio. Yo sé el problema que tengo con los alimentos pero en la restauración están obligados a darte toda la información y hacerte la comida a parte si hace falta. Sino cuando lo he dicho al entrar lo de las alergias haberme dicho que no me sentará. No vuelvo jamás y no lo recomiendo. Y por el precio de los platos muy...

Nunca más volveré!!! Servicio nefasto y poco profesional!!

El camarero muy borde y con falta de profesionalidad (que se lo mire bien el dueño porque un trabajor así crea mala reputación).

Al entrar avisamos que una persona era alérgica a diferentes alimentos . Pedimos las tapas que podíamos comer todos pero la sorpresa fue que al traer el carpaccio con queso parmesano , nos lo trajeron con queso al pesto y avisamos al camarero que no lo podía comer la persona alérgica y la respuesta del camarero fue ( tu como alérgica no tendrías que haber entrado en el restaurante ) me parece una falta de respeto cara a los clientes , nos levantamos todos de la mesa y fuimos a pagar (Pagamos lo que habíamos comido y tapas que todavía no habíamos consumido) hablando con el dueño de lo sucedido con el camarero y explicándole la situación el camarero nos negaba que el hubiera dicho tal cosa. Lo oímos 8 personas. En fin nunca más volveré a este restaurante!!!!

Un consejo al dueño cambia de personal y sobretodo con más empatía y más profesionalidad. La atención al cliente es una profesión dura. Te encuentras con personas de todo tipo. Lo sé por experiencia. Pero estamos hablando de alergias y/o intolerancias. Y teniendo un restaurante tienes que estar al día en referente a estos temas ya que puedes dañar y/o incluso puede morir alguien!

Haber si contesta el dueño y pide disculpas ya que he visto que solo responde a las reseñas positivas y de las negativas aprendes a que no pase...