Bar Clemente — Restaurant in Llanes

Hace tiempo que no sufría una experiencia gastronómica tan horrible, la verdad. Llovía con ganas, día desapacible donde los haya. Habíamos aparcado cerca y la urgencia de refugiarnos, sumado a la ventaja de no haber agobio de gente como en el centro junto con las opiniones más o menos positivas de TAD, hicieron que nos decantasemos por este Mesón. Eso a pesar de su aspecto más bien cutre y de que la oferta de alrededor era similar en cuanto a precios (11-12€ menú laborable) y en cuanto a afluencia (poca, más bien). Una vez dentro, estuvimos por huir, la verdad pero ya nos habíamos acomodado y no nos parecía de recibo, craso error. Optamos por una fabada (flojita más bien) y una paella, horrible, insípida, con el arroz pasado y pegado, quedó entera en el sitio. El chico que nos atiende, amablemente se ofrece a traernos otra cosa y pedimos una ensalada mixta (normal, quizá lo único que se medio salvó de la quema). Eso tras el "incidente" de ir a echar mano a la vinagrera-aceitera y que el vinagre estuviera lleno de moho (sic). La cara del camarero cuando pedimos que nos la cambiase era ya un poema a esas alturas, junto con la nuestra que era más bien de una novela de terror. Llegan los segundos para acompañar nuestras ganas de salir huyendo de allí, dejar el dinero sobre la mesa y correr sin mirar para atras. El lomo a la plancha (mira que es dificil hacerlo mal) insípido, como todo. Templado, con pinta de recalentado no de haber pasado por ninguna plancha reciente. Las patatas fritas a pesar de parecer naturales y no congeladas, tres cuartos de lo mismo. El pollo asado ("os lo recomiendo" dice el chico a la hora de tomar la comanda), igual que todo lo demás, seco, sin sabor alguno... incomestible. Picoteamos un cuarto de los platos y pedimos café para no arriesgarnos más (ya era bastante).

Pagamos los 11€ de cada menú y salimos huyendo de allí como alma que lleva el Diablo. Nos acompaña (en nuestras ropas) el olor de todos los menús (o sus almas, quien sabe) que por allí tuvieron el gusto (es un decir) de pasar ese día y no se iba, no. Espero que la lavadora sea más eficiente que la brisa y la lluvia de ese día en Llanes. Nos dirigimos al centro a buscar algo donde comer lo que no habíamos podido hacer en el Mesón.

Atrás la muerte, el horror, la pesadilla en forma de menú...

Review de El Mesón Clemente

Lamentablemente, nuestra experiencia en El Mesón Clemente no cumplió con nuestras expectativas. A pesar de la reputación del lugar, nos encontramos con varios problemas que empañaron nuestra visita.

En primer lugar, la relación calidad-precio de la comida deja mucho que desear. Los platos presentaban un costo elevado que no se justificaba por la calidad de la comida ofrecida. En particular, los postres tenían un sabor quemado que evidenciaba una falta de cuidado en la preparación.

La atmósfera del restaurante tampoco contribuyó a mejorar la experiencia. El lugar estaba excesivamente concurrido, lo que generaba incomodidad y un ambiente ruidoso poco propicio para disfrutar de una comida agradable.

El servicio fue otro punto negativo. Tuvimos que solicitar en repetidas ocasiones al mesero que trajera la comida bien cocinada. A pesar de nuestras peticiones, el problema persistió y nos vimos obligados a levantarnos y dirigirnos directamente a la cocina para pedir que corrigieran los errores, algo que consideramos inaceptable en un establecimiento de este tipo.

En conclusión, no recomendamos El Mesón Clemente. Nuestra experiencia gastronómica fue insatisfactoria en varios aspectos, desde la calidad de los alimentos hasta el servicio y el ambiente. Esperamos que el restaurante tome en cuenta estas observaciones para mejorar en el futuro, pero, por ahora, no...

Van buitenaf geeft het restaurant een goede indruk maar het is waardeloos. Ten eerste werden we bovenin het restaurant weggestopt, terwijl er buiten nog genoeg plek was. Slecht voedsel geserveerd (niks was vers), het geserveerde brood was nog van de vorige dag, drie van de vijf maaltijden waren aangebrand, de entrecot was nog wel prima de vraag is de maag erop zal reageren, de vliegen en spinnenwebben hingen aan het plafond, het bestek was slecht afgewassen de vetvlekken en etensresten zaten er nog op en tenslotte had de wc een enorm penetrante vis en kak lucht. De service/personeel was enigszins goed, hoewel zij wel veel langs elkaar heen werkte (bestelling was al afgenomen en toen kwam er nog een serveerder aan die naar een bestelling vroeg). Tevens weet ik niet of de serveerders echt ervaring hadden, ze ruimde de tafel erg amateuristich op en lieten de kreeftresten op onze tafel vallen. Kortom een waardeloze tent dat op het eerste gezicht een goedkope optie lijkt te zijn om te dineren (16 euro p.p. voor een voor en nagerecht incl. dessert), maar het is zeker niet dit geld waard wanneer het voedsel bij een kinderzwembad hygenischiër, verser en...