Pata Negra — Restaurant in Níjar

Quizás esta sea la reseña mas baja que he dado a un restaurante de ahí que entre en detalles. Agradezco la amabilidad de algunos camareros. Entiendo que es un restaurante de pueblo que se puede desbordar por las comandas del finde semana. Aunque nada de eso excusa el caos reinante. Empezamos ya mal cuando llegamos con reserva y resulta que la reserva estaba en otra fecha. Pero nos pudieron colocar una hora después de la hora que habíamos reservado. El caso es que observaba que aunque se vaciaban las mesas no había un encargado que las recogiera, ni se gestionaba la terraza. Lo cual ya me dio mala espina. Éramos un grupo numeroso con niños pequeños. Por fin nos sentamos y procedíamos a pedir las bebidas y las tapas y al rato unas raciones. Lo lógico era que las tapas llegaran antes que las raciones (hicimos el esfuerzo de pedir sólo dos tipos de tapa diferentes para que pudieran organizarlo mejor en la cocina). Pero la comida llegaba sin orden alguno. Ciertas tapas, algunas raciones, no ponían pan, solo teníamos un tenedor de cubierto. (En ningún momento pusieron cuchillos). Pedíamos algo y tardaban más de veinte minutos en traerte una bebida o el pan. Solo decir que después de haber comido todas las raciones y tapas que correspondían a bebidas posteriores, salieron al final, cuando ya nos íbamos a ir, las primeras tapas que habíamos pedido. Entré a ver cómo gestionaban las comandas y la estampa era la de uno trabaja y tres miran, con toda la barra repleta de platos sin recoger al igual que muchas mesas. Y pasmosamente todo el personal estaba en calma pasmosa como si no hubiera gente esperando por su comida. Pero lo peor es que pedimos unas raciones de carne en salsa y la carne no estaba ni caliente. Sinceramente no puedo entenderlo. Todo fue un despropósito en un restaurante de comida casera sin grandes pretensiones, nada profesionales en hostelería. Y ni siquiera sabían hacer bien la cuenta. No recomiendo ni que te acerques a tomar...

Durante el día de hoy hemos tenido el placer de acudir a este restaurante para comer y, en un principio, la experiencia prometía ser agradable. Optamos por sentarnos en la terraza, que resultaba bastante acogedora, y pedimos el menú especial correspondiente al festivo de hoy. Al inicio, el servicio fue rápido y eficiente: nos sirvieron la bebida y la ensalada mixta en muy poco tiempo, lo cual nos hizo pensar que el resto de la comida seguiría el mismo ritmo.

Sin embargo, a partir de ese momento, la experiencia comenzó a deteriorarse. Se produjo un error al traernos los primeros platos, y tras esperar aproximadamente 50 minutos, los camareros nos sirvieron directamente los segundos platos, sin haber recibido antes los primeros. Esta situación nos resultó bastante desconcertante, ya que ni siquiera se nos ofreció una explicación ni una disculpa por el retraso o la confusión.

Finalmente, fue la propia cocinera quien salió a servirnos tanto los primeros como los segundos platos, ante la evidente falta de atención por parte del camarero asignado a nuestra mesa. A partir de ese momento, este camarero no volvió a acercarse a nosotros en ningún momento, a pesar de que otros dos camareros fueron informados de que estábamos esperando a que alguien viniera a tomarnos nota para los postres.

La situación fue tan insólita que mi amiga tuvo que levantarse e ir personalmente hasta la barra del restaurante para pedir los postres y, además, pagar la cuenta allí mismo, ya que el camarero en cuestión no se dignó a volver a nuestra mesa.

En resumen, la calidad del servicio ha dejado mucho que desear, y lamentablemente, tampoco podemos destacar la comida como algo memorable. La combinación de errores, desorganización y falta total de atención al cliente hacen que no podamos recomendar este restaurante en absoluto, ni por su cocina ni por su...

Vimos el bar y nos llamo la atención por el bonito ambiente y lo acogedor q parecía, pero lamentablemente nos decepcionó el dueño nos atendió y nos preguntó q queríamos, nos sirvieron las bebidas rápido pero pasados 30 min no nos servían tapas y al resto de mesas si. Cuando pedimos la cuenta nos dijeron q había tapas y que si queríamos, nos dijo una pequeña variedad de tapas y ya nos habíamos consumido las bebidas, si no decimos nada no nos dicen de q hay de tapas, para q asi pidamos cosas de la carta. Pésima atención e información, todo por parte del dueño ya que el fue quien nos atendió sin decirnos nada del las tapas. A unque cabe destacar que los camareros fueron agradables. Cuando nos dieron la cuenta vimos que venía la tapa solo en las cervezas pero en la coca-cola no y costaba 2 euros lo que seguimos sin entender ya que son bebidas por igual y la cerveza sin alcohol venía incluida la tapa y el total de la coca-cola y la tapa ha sido 4,6 y la cerveza 3 ,5 con la tapa incluida , lo que me parece desorbitado el precio de la coca-cola con tapa aparte pésima atención por parte del dueño no repetiríamos la experiencia y si estás pensando en ir preguntar y pedir sobre las tapas aunque no...