En nuestro paso por o Grove optamos por este restaurante para comer y ya os puedo adelantar que fue un acierto.

Como siempre, habíamos reservado mesa previamente para no tener sorpresas al llegar. Dos, de las cinco personas que íbamos a comer llegamos un poco antes de la hora y ya tenían nuestra mesa preparada, así que fuimos entrando y tomando algo mientras llegaban los demás. Con la bebida que pedimos nos dieron un pincho para acompañar. Para empezar, de entrantes pedimos unas almejas a la marinera (espectaculares) y un pulpo a la gallega. Después, tomamos un arroz con pulpo para dos personas (muy bueno y en una cantidad generosa, tanto de arroz como de pulpo), otros dos comensales tomaron una caldeirada de pescado, que me comentaron que estaba muy buena y el ultimo una merluza rebozada de la que tampoco pudo hablar nada malo. Para terminar, nos atrevimos con un flan de queso y unas filloas rellenas. Por último unos cafés para reposar la comida.

En todo el momento el servicio fue muy rápido y atento. Los platos salieron a buena velocidad de la cocina. Del precio no puedo decir nada, porque fui invitado, pero la persona que se hizo cargo de la factura salía satisfecho de lo pagado y creo que eso es buen indicativo. Una opción muy aconsejable.