Restaurante Lourido — Restaurant in Poio

El servicio malísimo en el bar. La atención al cliente es nula por parte de los camareros. Hemos ido dos días seguidos, porque tienen buenas vistas a la ría. No volvemos, tratan a los clientes fatal. La cerveza muy buena, estrella, aunque también la hay en los bares de al lado, que sí son educados.

RESPUESTA AL PROPIETARIO Vamos a ir por partes:

Como propietario de un local, la forma de responder y gestionar los comentarios de nosotros, los clientes/consumidores, que comentamos el servicio recibido, debería darte una idea de que quizás el problema está dentro y no en los clientes.

Pero bueno, ahí la profesionalidad de cada uno.

Que sea del lugar, no me hace "tu vecina" ni te da derecho a responderme así, como si me conocieras. Es más no sé ni tu nombre.

Lo de las patatillas de ayer fue la gota que colmó el vaso. No me quejo porque nos sirvieran patatillas, sino porque el camarero dijo que la cocina estaba cerrada (cuando le preguntamos si tenían aceitunas).

En fin...

¿Que sigues sin querer ver que la atención al cliente es CLAVE para que un negocio marque la diferencia y sea bien percibido? Pues sigue sin verlo. Igual que a mí, que seguirás sin verme por allí.

Ahora responde lo que quieras. Que lo que escribes por aquí dice mucho de tu profesionalidad y gestión del negocio

pd. que quede constancia de que yo NO HE INSULTADO A NADIE. Esto son cosas del propietario que BORRA Y CAMBIA las respuestas...

Muy grata propuesta la del Restaurante Lourido para el eje de Poio-Pontevedra-Sanxenxo con destacable relación calidad/precio/preparación... Bien ajustado el conjunto...

Local remozado en una decoración y un ambiente acogedores... Servicio amable y diligente... Buena carta de vinos en la que únicamente se echa en falta una pequeña selección de espumosos. A falta de un champagne, la camarera (Ana le decían los compañeros) hizo “magia" sacándose de la manga, un extraordinario Torelló rosado... A partir de aquí desfilaron unas muy aceptables nécoras (estamos en julio), muy buenas navajas, unos chipirones encebollados, unas buenas croquetas de mejillón “gourmet"... (Observamos pasar para otras mesas unas muy notables cigalas, solo eso, las vimos volar en la bandeja de pasada...) Pero llegó el protagonista, esperado plato principal que desbordó las posibles expectativas... San Martiño al horno con sus patatas panaderas; pero eso sí con las llaves de San Pedro. Nos abrió las puertas del paladar... Realmente delicioso... El colofón fue un muy buen café, lamentablemente algo muy poco frecuente, incluso en sitios donde se come muy bien. Aquí recibe la atención debida. Dos “ristrettos" muy logrados en su presentación, repetimos... Hay producto, y detrás trasluce un gran trabajo en los fogones... La batuta regente del local va a cargo de Fran, y logra una muy notable orquestación Gustativa... Armonioso conjunto......

Pagamos por um peixe o valor de dois porque era para dividir. Muita atenção quando fizerem o vosso pedido, verifiquem ou perguntem se os valores são os que estão mencionados para não serem surpreendidos. Quando chegamos e vimos a carta dizia que o peixe e marisco era sobre consulta de disponibilidade e os preços referentes ao valor de mercado. Quando nos mostraram essa lista escolhemos a Solha (Curuxo) porque era supostamente mais pequeno e mais barato (30 euros) existiam também solhas mais caras deduzi que fossem mais pesadas. Era um prato para dividir ainda comemos bife milanesa de entrada e íamos comer sobremesa, o peixe de 30 euros era suficiente. Quando chegou a conta fomos suprendidos com um valor de 60 euros só do peixe. O valor vinha duplicado, quando questionei o empregado ele disse que era o valor por pessoa. Ora o valor do bife era 13€ euros quando dividimos o bife não pagamos 13€ por pessoa mas sim 6.5€ no caso do peixe houve um milagre da multiplicação porque um só peixe para duas pessoas que antes custava 30€ passou a 60€. Ainda por cima solha que nem é um peixe caro. Não era lagosta, não bebemos vinho, Fomos roubados. Não fomos mal servidos nem mal atendidos. Estava tudo bom mas não ao ponto de pagar 80 euros por um almoço para duas...