Thai Pinto es una joya escondida en Sant Feliu de Llobregat que ofrece un viaje sensorial directo al corazón de Tailandia. Ubicado en la tranquila calle Carles Buïgas, este restaurante combina una atmósfera íntima con un servicio cercano y apasionado por su cocina. Lo que distingue verdaderamente a Thai Pinto es que su cocina está en manos de chefs tailandeses nativos, formados en la tradición culinaria de su país, y que todos los productos clave —desde las especias hasta las salsas y el arroz jazmín— son importados directamente desde Tailandia, garantizando una autenticidad absoluta y una calidad superior.
Crítica gastronómica: Como especialista en cocina tailandesa, pocas veces he encontrado en Cataluña un restaurante que respete tan profundamente la esencia de esta gastronomía como lo hace Thai Pinto. Desde el primer bocado se nota la maestría en el equilibrio de sabores: dulce, salado, ácido y picante se entrelazan con una elegancia que solo se alcanza cuando se cocina desde el conocimiento profundo y la experiencia vivida.
El Tom Kha Kai es una sinfonía de matices: leche de coco cremosa, galanga fresca, hojas de lima kaffir y un pollo perfectamente cocido que absorbe todo ese perfume de Tailandia. El Pad Thai llega con los fideos al punto perfecto, cacahuetes tostados por encima y ese fondo ligeramente ácido y umami del tamarindo que solo se consigue con el producto auténtico. Pero el clímax llega con el Massaman curry: una obra maestra de complejidad especiada, textura melosa y una profundidad que deja huella.
Se nota que aquí no hay atajos: ni en la técnica, ni en los ingredientes. El uso de productos importados de alta gama —como la pasta de curry artesanal, las salsas fermentadas o el arroz tailandés de primera cosecha— marca una diferencia que los paladares sensibles perciben y agradecen.
Veredicto final: Thai Pinto no es simplemente un restaurante tailandés; es un trozo vivo de Tailandia en el corazón del Baix Llobregat. Es cocina con alma, hecha por quienes la llevan en la sangre, con ingredientes que cruzan medio mundo para llegar a tu mesa. Un lugar imprescindible para los amantes de lo auténtico y los...
Read moreCuidad con el picante! Me da pena tener que poner una mala reseña pero es que creo que es importante. Fuimos a comer y pedimos, entre otros platos, una ensalada de papaya. El plato no estaba marcado como picante pero la camarera nos avisó de que el plato picaba. Pero una vez llego el plato, el nivel de picante era un despropósito. Estamos acostumbrados a comer comida picante, incluida la ensalada de papaya, varias veces en Tailandia (donde el nivel de picante es mucho mas alto que en europa). Pero es que la ensalada que nos pusieron estaba incomestible. Dudo mucho que ningún local sea capaz de comer ese plato. Ante la situación, la camarera se excuso con que habían avisado de que el plato picaba y que habían quitado la guindilla (cosa que lo es verdad). Nos dijeron que no había forma de arreglarlo más allá de acompañarlo con arroz... Así que nos lo llevamos a casa, quitamos toda la salsa lo volvimos a aliñar (sin picante) y aún así seguía picando bastante... No sé si tuvimos mala suerte pero no creo que lo gestionarán de forma profesional. En primer lugar, si ese es el nivel de picante que acostumbran, avisar que es muy muy picante y poner los tres 🌶️🌶️🌶️ que ponían en otros platos, asegurando que el cliente entiende que es un plato picante extremo. Segundo, si el cliente está claro que está sufriendo con el plato, se puede ofrecer cambiar el plato por otro, sobre todo si parece que ha habido un malentendido.
Más allá de esa mala experiencia/malentendido, la comida estaba muy buena, sabor auténticos, personal amable, local amplio y luminoso y tuvieron un detalle con nuestro pequeño.
Repetiremos e intentaremos tener más suerte la próxima vez (y asegurarnos de que el nivel de picante es el que...
Read moreNo nos dejaron reservar para las 15horas, cuando el restaurante cierra a las 16...Razón- están esperando una familia de BARCELONA (remarcando la importancia como si viniesen de Australia), y que no les dara tiempo servir a todos. Muy bien, asi pierden los clientes del barrio..
Al propietario: Gracias por molestarse en contestar, se agradece. Pero ya que estamos, vamos por partes: llamo al restaurante para reservar a las 15, el camarero me dice que tengo que venir a las 14:45,le digo que es imposible pq mi hija sale del colegio a las 14:30 en la otra punta de Sant Feliu y no vamos a venir corriendo y sudando con una mochila a cuestas. La hora real-15-15:05 como mucho. Camarero: pues tendreis que comer "pim pam" (quote), y empieza el rollo de la familia de Barcelona. Y si, me dice que si cambio de opinión y quiero venir a las 14:45 que ningún problema, que vuelva a llamar. Por supuesto y por motivo arriba indicado no tengo nada que pensar y no voy a llamar nunca más a este restaurante, y lo que me queda claro es que el camarero quiere irse a casa a las 16 en punto. A veces,los propietarios y empleados tienen diferentes...
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