Una experiencia para el olvido.
Si alguna vez te preguntaste cómo sería comer en un lugar donde la comida es insípida, el ambiente incómodo y el personal ofensivo, no busques más: Puerto Madera es el sitio perfecto para una pesadilla culinaria. Ubicado en una zona donde uno esperaría encontrar al menos un mínimo de decencia gastronómica, este restaurante logra decepcionar desde el momento en que cruzas la puerta.
Empecemos con el menú. Pese a prometer una experiencia de mar y tierra, los calamares que nos sirvieron parecían haber sido descongelados en el microondas minutos antes de llegar a la mesa. Chiclosos, fríos por dentro y sin una pizca de sabor. Cuando preguntamos si eran frescos, el camarero simplemente se encogió de hombros. Eso ya fue un mal presagio.
Decidimos darle otra oportunidad al lugar pidiendo unas croquetas, con la esperanza de que al menos acertaran en algo tan básico. Grave error. Las croquetas llegaron quemadas por fuera y frías por dentro, como si hubieran sido recalentadas mil veces. El relleno, si es que se le puede llamar así, tenía una textura pastosa y un sabor que oscilaba entre cartón húmedo y engrudo escolar. Intragables.
Por insistencia de uno de mis acompañantes (que aún conservaba algo de optimismo), pedimos los famosos huevos rotos de la casa. El resultado fue un plato aceitoso, con papas blandas y huevo recocido, bañado en una supuesta salsa secreta que, honestamente, sabía a salsa de bote mezclada con desesperanza. Ni con hambre se lo termina uno.
Pero lo más escandaloso de la noche fue el comportamiento del camarero que nos atendió. No solo fue descortés desde el inicio, sino que insultó directamente a un menor de nuestra mesa. Todo porque el niño, de no más de 10 años, se quejó del sabor de su comida. En lugar de disculparse o intentar resolver la situación, el camarero le soltó un comentario sarcástico totalmente fuera de lugar, tachándolo de “crío malcriado que no sabe lo que es comer bien”. Todos nos quedamos boquiabiertos.
Lo peor es que, al poner la queja, el encargado apenas reaccionó, como si no fuera la primera vez que esto ocurría. ¿Es ese el estándar del restaurante? ¿Tratar mal a los clientes y servir basura en platos decorados con perejil seco?
En resumen: Puerto Madera es un desastre disfrazado de restaurante. Mala comida, trato lamentable y un ambiente que lo único que inspira es salir corriendo. Si quieres perder dinero, pasar un mal rato y arriesgarte a que insulten a tu familia, este es el sitio perfecto.
Evítalo....
Read moreHoy hemos ido a almorzar sin reserva y sin probar la comida porque nos tuvimos que dar la vuelta nada más entrar por la mala educación y mal carácter de la camarera. Comparto lo sucedido porque parece ser que este medio es el único que funciona para que llegue a oídos de quien corresponda y sepa cómo en su restaurante tratan a las personas que lo único que quieren es pasar un rato agradable, saborear buena comida y dejarse su dinero en este servicio… Vamos a la planta alta y al estar todo reservado nos dicen que podemos comer fuera o en la parte de abajo. Hacia mucho calor y la terraza bien llena. Le decimos que vamos a mirar abajo… Bajamos la escalera y había un chico que nos saludó y nos dijo que podíamos sentarnos en algunas de las dos meses más pequeñas (éramos dos). Al dirigirnos a una de las mesas indicadas vemos una mesa de 8 personas preparada. La verdad que queríamos estar tranquilos y sin escándalo… Antes de decir nada la camarera desde la parte de arriba (quien conoce este sitio entenderá perfectamente desde donde nos habló) Nos dice: “ Se pueden sentar en una de esas dos mesas” le digo: “Pero una duda, está mesa grande se va a ocupar ahora?” Me responde: “ Está reservada” Y le digo: “para esta misma hora?” Su respuesta fue: “Qué quieres una mesa de 8 para dos?” Respuesta Mía: no quiero tranquilidad y poder hablar. Mi intención era que si esa mesa se iba a ocupar pues nos pondríamos en la terraza y listo pero con esta forma de tratar al Cliente como si te hiciera un favor me parece denigrante. Así que ellos se lo perdieron porque nos fuimos directamente a otro lugar. Qué lástima que haya gente con tan mala educación y tan poca empatía. Tal vez no el gusta su profesión o tal vez tenga un mal día pero desde luego demuestra que no da la talla. Gracias a esta camarera tan simpática y agradable. Repito que lo pongo por aquí para que lo lea quien debe leerlo y si de verdad le preocupa sus clientes que se entere de qué cosas como esta hace que poco a poco lo que un día tuvo mucho éxito y muchos clientes al otro puede estar suplicando que alguien se acerque a probar su comida. Por cierto por si hay varias camareras esta es la que más cara de mala leche tiene. Así podrán...
Read moreHemos ido a almorzar hoy.. un lugar bonito a la orilla del mar.. para empezar nos atendió una chica morena muy amable que nos sentó en la parte alta a petición nuestra.. nos toma comanda de la bebida y nos la trae de inmediato junto a pan con alioli, al contrario que para coger comanda de la comida.. unos 15 minutos o más para coger la comida. Otros tantos para llegar la comida, se nos acaba el pan y pedimos más con otra tarrina de alioli ( van 2 ) en lo que llega la comida.. Nos pedimos unos champiñones y unas sardinillas que estaban bastante buenos.. pero cuando nos traen las gambas.. bastante pasadas e insípidas, unos calamares que más bien parecía chicle.. he comido calamares congelados mejores que esos. Hasta ahí bueno.. nos arriesgamos a comer en sitios que no conocemos y puede salir bien o mal. El postre insípido, solo pudimos pedir uno porque el camarero tenía prisa y no me dio tiempo ni a pedir el mío.. a todo esto.. se oía bastante mal rollo entre compañeros, intercambiando pareceres delante de la clientela (feisimo), si no te llevas bien no tiene por qué saberlo el cliente.. desorganización total.. creo que quieren abarcar mucho y no pueden (terraza, parte inferior, parte superior..) sino pueden con tanto .. mejor dar menos servicio y mejor. A la hora de la cuenta viene lo mejor.. tenemos que pedirla dos o tres veces antes de que la traigan.. cuando reviso la cuenta .. me han cobrado 4 panes con alioli.. no soy de quejarme, pero tampoco me gust que me engañen, le digo a la camarera que está mal, que en la carta pone que el pan con alioli sale “1,60e” y a mi por dos de pan con alioli me cobran “6,40e”.. se lo comento a la chica y me suelta que el servicio lo cobran así, que está bien.. y nisiquiera revisa la cuenta para ver que realmente está mal. En fin, que la propina se la cobro en pan y alioli.. una pena porque el lugar tiene potencial..pero el servicio es nefasto.. para ser camamero hay que gustarles el oficio.. no para poner la manita a final de mes! Un...
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