Los Toneles AsturCántabros — Restaurant in Val de San Vicente

Como toda valoración, ésta sólo puede basarse en la experiencia de cada uno, y la nuestra del domingo 30/01/2022 fue muy mala.

Teníamos reserva para las 15:30 y tardaron 25 minutos en darnos mesa. La verdad es que nunca había esperado tanto con reserva hecha (sí en sitios de atención según llegada lógicamente, pero ahí está en tu mano decidir esperar o no cuando te informan) lo cual hace pensar en una falta de experiencia en la gestión y coordinación del trabajo de sala con el de cocina (o eso o es que prefieren no rechazar ninguna petición de mesa aún sabiendo que no pueden dar a basto). Además en ningún momento se escuchó disculpa alguna (ni a nosotros ni a nadie hasta dónde llegaban mis oídos) en la considerable cola de personas que estábamos esperando, con un "si, su reserva está retrasada, pero todas las demás también" pensaron que era suficiente.

Una vez nos dieron mesa, los tiempos de atención fueron de los mas lentos que recuerdo en un restaurante, ya que nos sentaron a las 15:55, nos dieron la carta a las 16:02, nos tomaron nota a las 16:19 y no nos trajeron lo primero que pudimos echarnos a la boca hasta las 16:32 (unas croquetas). Si a eso se le une que el plato principal de cada uno no vino hasta las 16:57 (si, 25 minutos después de las croquetas) os podéis hacer una idea de lo largo que se hizo la comida. Hay que añadir que el servicio en mesa estuvo un poco al límite, con gestos que a lo mejor pasaron desapercibidos para ellos por la cantidad de trabajo que tuvieron durante el servicio (lo cual es consecuencia de lo mencionado acerca de las reservas), como retirar los platos de entre los brazos del cliente sin hacer ningún comentario o pregunta por si nos molestaba y con la cara girada, o hacer preguntas acerca de cómo estaban los platos sin realmente esperar respuesta, pasando de largo como si fuera una pregunta "programada" de la que realmente no tenían mucho interés en conocer la respuesta. Parece que son tonterías, pero al final es lo que marca la diferencia con un buen/correcto servicio.

En lo relativo a la calidad de la comida: pedimos unas croquetas de cabrales que no se puede decir que no estuvieran buenas, pero tenían el problema de que sabían poco a cabrales por si solas (seguramente por la cantidad de queso) y venían servidas con un puré de manzana encima bastante fuerte que, cuando se mezclaba en la boca, se llevaba todo el sabor. Así que eran mas bien croquetas con sabor a puré de manzana con un toque de cabrales. Eso si, la presentación era bonita, aunque el plato en sí era caro (12,50€ por 12 minicroquetas). Luego pedimos una parrillada de verduras que se supone que venía con puré de boniato, pero según palabras de la chica que nos atendió habían "decidido poner el boniato como parte de la parrillada en lugar de puré", que sonó bastante más a "se nos ha acabado el puré de boniato y para las horas que son no nos vamos a poner a hacer más", así que sin nada reseñable aparte de lo escaso del plato para el precio que tenía (casi 20€ por cinco trozos de verdura con sal y poco más). Y el otro principal fue un cachopo "deluxe" que no se puede decir que estuviera malo, pero comparado con sitios como "La cachopería" de Avilés, o "Casa Chema" en Oviedo, o incluso el recuerdo que tenemos del "Tierra Astur" en cualquiera de sus establecimientos asturianos, éste "deluxe" de Los Toneles no deja de ser un filete empanado grande con sabor agradable. Eso si, no me lo terminé porque tenía hambre a las 15:30, pero a las 17:00 que fue cuando llegó a mi mesa pues ya no me apetecía tanto.

Este es un poco el resumen de nuestra experiencia. ¿Es este establecimiento siempre así? Entiendo que no porque sólo hay que ver otras críticas de otros clientes con mejor opinión al respecto, pero ¿Te puede pasar a ti lo mismo que a nosotros? Viendo la actitud del personal daba la impresión de que estaban bastante acostumbrados a esta situación, así que cuenta con que existe la posibilidad, sobre todo no siendo entre semana creo yo....

Hemos ido a comer a este restaurante y puedo asegurar que está a la cabeza de los restaurantes que ya desde hace tiempo empieza a cargarse la zona, me explico: de los que NO tienen un negocio para vivir dignamente y bien, sino de los que lo tienen para FORRARSE. Me extiendo: Llegamos a comer y nos recibe un esperpento asturiano que se cree gracioso y nos trata de veraneantes forasteros y que nunca nos hemos sentado a comer en nuestro pueblo. Resulta que el camarero se pasó de listo y le salió el tiro por la culata. Primero nos quiso vender a toda costa un pescado de 125 e/kg que, según él, estaba exquisito. No lo dudo, al igual que también dudo que a este señor le parezca normal pedir esa salvajada...podéis pensar que alomejor exagero...bueno le preguntamos por una lubina con pinta de haber sido descongelada dos veces y poco más grande que tamaño ración y estaba a un precio muy asequible...unos 69 e/kg...no entiendo cómo con estos precios la gente no sale más a qué le atraquen...perdón, a comer. El camarero asturiano más nervioso y cada vez más faltoso, porque no nos decidíamos en como queríamos ser atracados pedimos la lubina descongelada, una cecina de vaca tudanca con queso y piñones, un tomate aliñado, un cachopo ganador de varios premios entre ellos el de tamaño y calidad, unas croquetas y entre otras cosas de beber una sangría de sidra... Vamos por partes: La lubina, pues no sé si sería salvaje o no, pero estaba más seca que la mojama y descongelada. 69 e/kg El cachopo...sin comentarios, lamentable. Tamaño ridículo, cuatro patatas y de sabor normalucho del todo. Ojo, 28.5 euros el cachopo. La cecina de vaca Tudanca con chorraditas por encima. Este es el que más me ha dolido. Y me duele porque conozco bien la cecina, además la buena cecina. Siento comunicar al local que se anden con cuidado, ya que no están sirviendo cecina de vaca (ni de asomo tudanca). La cecina que están sirviendo es una cecina equina y de la mala. De esto lo me acuerdo del precio pero vamos que salvaje. El tomate estaba bueno pero escaso, en el plato no ve Ia más de medio tomate en rodajinas tamaño papel de fumar. El precio, pues igual salvaje. Las croquetas. Lo único que se salvó. Caras pero en sintonía. La sangría de sidra. Bueno esto era para caerse de la silla. 19 euros. Una jarrita que apenas daba para tres vasos. 19 euros, creo que no tengo más que explicar sobre esto. Total, ciento y muchos euros, casi 200...de verdad que al restaurante le pongo un 0. MALTRATO hacia el cliente de parte del camarero que nos tocó, desagradable hasta el infinito. Fijate si fuiste desagradable que estuvimos por levantarnos e irnos nada más llegar pero ya que habíamos reservado y viendo la hora pues cometimos el error de quedarnos. Sinceramente espero que toméis acciones para volver al estándar que tenía la zona porque poco a poco, entre todo el gremio de restauración vais a acabar con todo, con la esencia que tenía estás zonas. Como se puede ver en Potes, menús a 20 euros, al unísono en todos lados. Poca cantidad y cada vez peor calidad. Y lo peor, cuando engañáis a la gente. La cosa es que no todos venimos de Madrid como algún...

Cantabrian/Asturian theme restaurant which has somewhat the feel of a US chain restaurant with costumed waiters, bagpipe music etc. The portions are huge so you will not go hungry here! We found the food to be rather bland so were slightly disappointed in the flavour. We had the bean stew and whole roast chicken. Roast chicken was very tender on the thighs/wings but breasts dry and whole thing was a bit lacking in flavour. The stew was served in a nice pot with wooden spoon which was a nice touch, flavour a little bland again and quite pricey. Possibly we missed out by not ordering the beef, which appears to be the speciality.

Even though there were lots of staff who were friendly enough, we found it slightly hard to attract attention, and on paying by card the cashier did not ask if I wanted to pay in GBP or EUR so I ended up overpaying from my Euro bank account due to exchange rate from...