La Casa de Manolo Franco — Restaurant in Valdemorillo

Desde que llegas hasta que sales disfrutas de una experiencia de sabor, aromas, sensaciones e historia. Es muy difícil plasmar la experiencia que tuvimos en La Casa de Manolo Franco en una reseña sin vivirlo en persona. En el corazón de un Valdemorillo, un pueblo madrileño muy cerquita del El Escorial, se encuentra este restaurante. Según entras por la puerta, las chicas del personal te atienden con mucha amabilidad y el mismo Chef, Manuel, te atiende en persona y te presenta el menú (la experiencia mejor dicho) que vas a disfrutar. Se nota que además le gusta y disfruta haciendolo, no es simplemente protocolo. Luego las chicas te acompañan a la mesa, en un local con un toque rústico que casa con lo que esperas encontrar en la sierra madrileña en otoño pero muy moderno y bien decorado, con homenajes por todas partes a la historia de Casa Manolo. Elegimos el menú mas amplio (unos 90€) y el mismo Manuel nos explico con que cariño lo cuidan y lo cambian cada temporada (y eventos especiales) para presentar siempre producto de temporada pero apostando sobretodo por el producto local (carnes, setas, frutos...etc.). Cada plato del menú está minuciosamente presentado, en todo momento ves a Manuel a través de un cristal presentando uno a uno todos sus platos pero sin perder de vista si estamos o no disfrutando (mas de una vez se acercó a ver si todo era de nuestro agrado). Los platos ademas cuentan una historia de principio a fin, donde cada plato es un momento de lo que Manuel quiere contar y las chicas hacen que te sientas parte de ello cada vez que te traen uno. Como veis no hablo en ningún momento de la comida, es impresionante, pero es que hay que probarla, cualquier cosa que diga se queda corta. Venimos de Talavera de la Reina donde tenemos un restaurante como Raíces con Estrella Michelin (¡¡grande Carlos!!) y hemos estado en muchos restaurante con estrella por toda España y La Casa de Manolo Franco no tiene nada que envidiar a ninguno, estamos seguros que mas pronto que tarde a Manu le llegará ese momento por el cariño, la ilusión, el talento y las ganas que desprende. E insisto, porque al fin y al cabo esto es una reseña de un restaurante, comimos muy muy bien . 100% recomendado y 100% seguro que repetiremos en la...

Mi familia y yo tuvimos la fortuna de visitar el restaurante de Manu Franco galardonado por su alta cocina, y la experiencia fue absolutamente mágica, superando todas nuestras expectativas. Desde el momento en que cruzamos la puerta hasta el último bocado, cada detalle fue cuidadosamente curado para asegurar una experiencia inolvidable.

Optamos por el menú largo, una elección que nos embarcó en un viaje culinario diseñado para transportarnos a un día en el campo, tal como prometió el chef. Y vaya si cumplió esa promesa. Uno de los momentos más destacados fue cuando colocaron una mini hoguera en nuestra mesa, liberando los aromas del campo de Valdemorillo, una experiencia sensorial que nos llevó directamente a la naturaleza sin movernos de nuestro asiento.

Cada plato fue una revelación, con sabores equilibrados y presentaciones que eran obras de arte en sí mismas. Los postres, descritos acertadamente como "de ensueño", fueron el broche de oro perfecto para una comida que ya había sido excepcional. No solo nos deleitamos con la comida, sino que también nos sentimos acogidos y atendidos con un nivel de servicio que solo se encuentra en los mejores establecimientos.

Nuestras hijas, a pesar de ser jóvenes, fueron tratadas con el mismo respeto y atención que los adultos, lo que hizo que la experiencia fuera aún más especial para nosotros como familia. Esta consideración hacia los comensales más jóvenes no siempre se encuentra en restaurantes de alta cocina, por lo que fue particularmente apreciada.

En resumen, nuestra visita fue una experiencia culinaria que recordaremos durante años. La combinación de sabores exquisitos, la innovación en la presentación y un servicio impecable nos convencieron sin lugar a dudas de que volveremos. A cualquier amante de la gastronomía que busque una experiencia que deleite todos los sentidos, le recomendaría de todo corazón visitar este extraordinario...

Tomamos un menu ejecutivo. Un aceite con sabor a huevo frito para mojar pan, un salteado de setas, un gazpacho con espuma de queso, un entrecot de ternera y bacalao rebozado. La verdad es que por el precio que pagamos y las reseñas tan buenas que tiene esperábamos un poco más. La carne no estaba muy tierna y un poco fría. No me preguntaron el punto por lo que para mi gusto estaba demasiado hecha, de sabor estaba muy buena y las patatas fritas excelentes muy crujientes. El rebozado de bacalao un poco tosco para mi gusto y el bacalao desecho se mezclaba con el rebozado, no se si esto es el efecto que buscaban igual hubiese preferido que el lomo de bacalao estuviese en su punto de cocción y con la textura correcta. El salteado de setas buenísimo y el gazpacho no estoy seguro que la combinación con la espuma de queso para mi sea las mas adecuada, desde luego es muy original te lo sirven en una taza de capuchino y a la vista sorprende pero la mezcla de los dos sabores en boca me confunde un poco. De postre la única opción era tarta de queso que estaba buena sin más. Nos atendieron con muchísimas amabilidad, éramos los únicos clientes y tuvimos toda las atenciones. Como recomendación un restaurante de su categoría y por lo que he leído cerca de la primera Estrella no puede servir vinos que estén calientes, del tiempo, es verdad que enseguida lo pusieron a enfriar pero ese tipo de errores son muy fáciles de corregir. Otra sugerencia y esto es muy personal, cuando voy a un restaurante de categoría espero encontrarme con manteles de tela, comer directamente encima de la mesa lo asocio a restaurantes de mucha peor calidad que el suyo. Espero volver y probar el menu de 15 platos, parece más elaborado y por lo que leo en las reseñas la gente queda muy contenta.

Muchas gracias por su amabilidad y...