Bar-restaurante La Tejera — Restaurant in Vega del Codorno

Hemos estado comiendo hoy y bastante mal la experiencia. Para empezar el trato deja bastante que desear, se nota que es un restaurante que pasa mucho turista a ver el nacimiento del rio cuervo, parece que están cansados de ver gente y parece que te están haciendo un favor dándote de comer. Pedimos unas cervezas antes de comer porque había que esperar para entrar al comedor una hora, con las cervezas pedí algo para picar mientras, le dije al camarero que si lo tenía que pagar no había problema pero contestó que no tenían mas que aceitunas, le contesté, vale está bien y el contestó, ahora te las llevo.... nunca llegaron.... Después de una hora esperando pasamos a comer. Nos sacaron una hoja plastificada un poco princesa donde ponía el menú, no nos dieron opción a comer a la carta. El menú relación calidad precio no es razonable. He comido mejor por 15€ y con más opciones de platos. El comedor necesita urgentemente una reforma. Los manteles de hule ya va siendo hora de cambiarlos. He pasado frío comiendo. La calefacción floja y la chimenea apagada. La camarera que nos sirvió con pocos modales, regañando por la cocina y es que es normal. Parece que falta personal para atender todas las mesas porque estaba dando las comidas sola. Al final del servicio el camarero que nos sirvió en barra le ha echado una mano. Por último cuando nos íbamos nos hemos asomado por la ventana y bastante seco nos ha dicho que nos quitaramos de ahí porque estaba recogiendo una mesa... en fin.... Afuera en la terraza de verano aún están las mesas puestas con un palmo de nieve y con los palillos y los manteles puestos, atroz y colgando de unos arbustos unas botellas con un líquido llenas de insectos.... del verano... un líquido negro.... vomitivo... no creo que volvamos. No le puedo poner menos puntuación de estrellas pero por aquí digo que un cero, es una patata de restaurante, un mojón. No sé de quién serán las reseñas que he leído tan buenas, serán familiares y amigos porque vamos nada...

Buena comida a buen precio. Camareros atentos pero mal organizado todo. No volvería, de hecho debería haberme ido cuando a la hora y media de estar sentado nos trajeron el primer plato, el segundo tardó otros 45 minutos, al resto de mesas igual, un desastre. Todo esto al menos en la terraza, dentro parece que la comida fluía con normalidad o eso me pareció. Además con un solazo impresionante, estando debajo de un toldo cerrado, les pedí que por favor lo abriesen y se negaron a ello, por supuesto al día siguiente brazos y cara quemados. En fin, no volveré. Yo puedo entender que estén desbordados en estos días festivos, pero no entiendo lo del toldo, si al menos me hubiesen dicho que estaba roto, pues ya está, pero me contaron una historia de que iba a motor y aún no funcionaba el motor, cuando tenía la manivela de abrir los toldos colgando del mismo. Tampoco entiendo que tomasen nota a una mesa y hasta que no le servían el primero y el segundo a esa mesa, con lo que tardaban en ello, no tomasen nota a ninguna otra mesa y a continuación lo mismo, le servían primero y segundo, después tomaban nota a otra. En fin, mala experiencia, buena disponibilidad de los trabajadores pero una gran desorganización bien organizada, ya que por lo que oí, el cocinero les pedía que no les llevasen comandas seguidas,...

Hemos estado hoy comiendo, la comida bastante buena. Lo que tendrían que mejorar era la educación y el saber estar de todos lo camareros ( menos una camarera que fue muy amable). ya que al llegar nos querían poner en el comedor de dentro y al tener la chimenea enchufada hacía bastante calor y éramos cuatro personas , le dijimos de ponernos en el comedor de al lado de la barra que hacía mejor temperatura, A lo que se negaban, porque decían que teníamos que ser más personas para sentarnos en esas mesas, cuando habian mesas ocupadas por 2 y 3 personas y nosotros éramos cuatro. Al decirle que queríamos comer allí, ya que había mesas suficiente, empezaron a discutir delante de nosotros los camareros diciendo uno chillando que no nos sentaramos allí que o dentro o nos fueramos, a grito pelado unos con otros discutiendolo delante de todo el mundo, un una imagen pésima, al final gracias a la unica camarera profesional, nos dejaron sentarnos, pero imaginaros las ganas de comer que teníamos después de ver que no querían que estuviéramos allí. Nos quedamos porque era ya bastante tarde, y no encontraríamos otro lugar para comer, porque si no nos hubiéramos ido. Lo he dicho comida muy buena y servicio pésimo. Tendrían que cambiar...