El Racó de la Vinya — Restaurant in Vila-rodona

Llegue a las 12 para poder almorzar algo ya que íbamos pasando y íbamos de viaje y entramos no había nadie, te saludan entre los dientes y la camarera que había en la barra ni siquiera nos volteó a ver por hacer 2 cafés o tuviera el restaurante a reventar, Le preguntamos que si podíamos almorzar algo y nos dijo que a las 12 no. Madre mía y después dicen que no hay trabajo. Es que no les gustan trabajar, como en un restaurante a las 12 del medio día no se puede almorzar algo, estando vacío. Si es un restaurante que en verdad no hacen desayunos después de las 12 pues ya lo saben para que no vayan y si es por la camarera que les dicen a los clientes que no venden por no trabajar más, no teniendo ni un alma, pues deberían de cambiarla y que pongan a alguien que sepa tratar a un cliente y que por lo menos sepa vender un bocadillo a las 12. Que le den un cursillo de atención al cliente a la señora. Y si es la dueña pues que lo cierre. He sido camarera y nunca se debe dejar ir a unos clientes ha no ser que pidan algo que no tengan, pero no vender un bocadillo al menos por ser las 12 y encima restaurante en plena carretera donde puede ser normal que la gente llegue...

Desde el momento en que crucé la puerta del Racó de la vinya ,supe que estaba a punto de vivir una experiencia culinaria inolvidable. La atmósfera del lugar es acogedora y elegante, con una decoración que combina elementos rústicos y modernos, creando un ambiente perfecto para disfrutar de una buena comida. El menú es una verdadera celebración de la gastronomía local, con platos que destacan por su frescura y creatividad. Desde las entradas hasta los postres, cada bocado es un deleite para los sentidos. Sin embargo, lo que realmente distingue el raco de la vinya es el trato excepcional de su personal. Cada miembro del equipo es amable, atento y profesional, haciendo que te sientas como en casa. Desde la bienvenida cálida hasta las recomendaciones personalizadas, el servicio es simplemente ejemplar. Sin duda, el raco de la vinya no solo es un lugar para comer; es un destino que ofrece una experiencia memorable, donde la comida y la hospitalidad se combinan para dejar una huella imborrable en el corazón de sus comensales. ¡Altamente...

99'99% carne y pescado en carta y 100% en el menú. Estaba de paso, hambrienta y, sin problemas, me pedí del menú una ensalada con nueces, queso, escalora, tomates cherry y aliño. Por 7'50€ de ensalada me esperaba proporción y calidad. Lo que me he encontrado en otros lugares y en los que tenía rato largo para comer. Tenía mucha escalora, poco aliño, pocas nueces, queso azul normalillo y cherry de supermercado. No me lo esperaba viendo la localización del local y la vistosa brasa que encuentras al entrar. Calidad-precio decepcionante. Me sorprendió que no tuvieran parrillada de verduras pero si la verdura es comprada de invernaderos (supermercados) o peor (imagino que podrían congelarlas)... aún podría dar las gracias de que no la sirvan. Mi acompañante comió de...