Bámbola Restauración — Restaurant in Zaragoza

Buen lugar para hacer una parada tras un paseo por los alrededores de la expo. He ido a comer alguna vez y tiene una ubicación privilegiada además de un ambiente que invita a volver. Debo añadir que lo frecuento algunos domingos con mi equipo de running y solemos ser de entre 8 en el menor de los casos o 30 personas y hoy precisamente nos han atendido con cierto tono tosco y la sensación ha sido incomoda ya que el hecho de que un grupo de corredores, aunque hoy insisto hemos sido 8, solemos ir cuando realizamos el entrenamiento un domingo en la Expo... y creo que es comprensible que llevemos entre nuestras escasas pertenencias alguna moneda, billete o targeta...muchos nada y les invite o prepague un compañero... y nos ha "advertido" de que la próxima vez nos organicemos el pago de toda la mesa porque no pueden cobrar uno por uno...en pleno s.XXI con 2 o 3 datáfonos que he visto en la barra. No pienso que sea la mejor manera de captar clientes y mucho menos de ser empaticos. Por si fuera poco estando todos cerca de la barra nos han instado a apartarnos porque "era la zona de camareros" ya de percibía cierto ambiente incomodo entre las camareras por la situación que había provocado nuestra intención de pagar cada uno lo que había pedido que creo que ya de por si es un derecho pero que lejos de pretender molestar a nadie no nos encontrábamos con cambios encima ni nadie tenia porque pagar con su tarjeta lo de todos. Sin mas, no me gustan las malas reseñas pero google por defecto y por ser activo en estas cosas me pregunta y tenía que compartir, como siempre, lo bueno y también lo malo...y creo que si el responsable del local lee esta modesta y sin ningún acritud, reseña... entenderá que poco cuesta cobrar con datáfono a un grupo de corredores y que "cuando se pierden las formas se pierde la razon" y sienta mal cuando un camarero te increpa cuando solo pretendes pagar tu consumición. Por todo lo demás volveré para comer y para estos ratos con mis compañeros pero de volver a encontrarme en una situación igual de incomoda evidente no volveré y ruego tomen nota de que cuando va un grupo grande de gente no es un "bautizo" y paga uno. Un...

Mi puntuación podría haber sido 3 estrellas, pero después de alucinar por las quejas de gente respecto a que si el negocio tiene horario...que si es un bar y deberían ser más flexibles con el horario pues me da la p.gana de "regalaros"una estrella, aunque sea solo por fastidiar a esos que supongo que cuando estén en su casa durmiendo si el jefe les llama saltan de la misma y van corriendo a verlo. Respecto a mi experiencia he de decir que si "sufri" algo de descontrol y desbordamiento por parte del equipo, pedimos a una camarera jovencita que tardo un poco en venir a atendernos y luego además nuestra comanda se quedo en la barra en espera de que alguien nos la trajese a la mesa ( estábamos en la terraza). Cuando nos trajeron la bebida pedimos papas y puntillas para picar.... y no salieron las dos raciones a la vez...además de que vimos las papas pasear hasta otra mesa y luego de volver a dentro volver a la nuestra. Servicio aparte la comida no estaba mal sin ser superior, pero eso es solo mi opinión que es relativa. Lo que también nos sucedió y he leído en otros comentarios, es que en nuestra mesa se quedaron 2 vasos que estaban ahí de antes, ese fallo es muy sencillo de solucionar ya no digo estar al loro de limpiarla en cuanto se va el comensal, ni siquiera ir previsto de bandeja al ir a tomar la comanda...pero por lo menos al servir las bebidas revisar lo que hay en la mesa cuesta muy poco. Como el sitio está muy bien ubicado, sobre todo para ir con niños, y el trato del personal no fue nada incorrecto repetiremos para ver si podemos disfrutar más todavía el...

Simplemente espectacular!!! Fuimos un grupo de 8 personas, incluidos 2 niñ@s y sabíamos que queríamos comer paella y chuleta, pero con los entrantes para compartir nos dejamos guiar, ya que no sabíamos los tamaños de los platos. Comimos unos entrantes de setas con una salsa brutal, huevos rotos trufados y una tabla de picaña que nos sorprendió por la brutalidad del sabor que tenía. Después pasamos a la paella de borraja que estaba muy muy buena, y el camarero nos aconsejo que la iba a sacar para 4 personas (para comer los 6 adultos) para que pudieramos llegar a la chuleta y no llenarnos con la paella. Y finalmente comimos una chuleta para compartir de kilo y medio aprox para los 6 que tenía un sabor increíble y parecía mantequilla en la boca. Los peques se comieron 2 menús de niños de pechuga y ternasco que estaban espectacular también. Y de postre, sacamos tan sólo 2 tartas de queso para compartir ya que estábamos bastante llenos. Nos aviso el camarero que no era casera, que era de obrador y que estaba muy muy rica, y no se confundía, realmente muy jugosa y con gran sabor El ambiente del local muy tranquilo, con la cocina visible desde el comedor, lo cual demuestra que no tienen nada que "esconder" y con columpios en el exterior, para que jugasen los peques sin ningún tipo de peligro. Un descubrimiento de local, al cual repetiremos visita dado su calidad precio y su...