Celebris — Restaurant in Zaragoza

Sin duda uno de los mejores restaurantes de Zaragoza, sencillamente no tiene todo.. fácil y rápido acceso además de estar situado en pleno parque del agua una zona preciosa, parking privado del hotel el cual es gratuito por ir al restaurante , comida deliciosa toda ella y además de alta y vanguardista cocina que te harán transportarte a los restaurantes con más renombre del mundo por un precio súper competente, tiene 3 menús compuestos de la siguiente manera, 20 euros ( principal y postre), 30 euros ( entrante principal y postre), 40 euros ( entrante carne pescado y postre ), por si fuera poco todos ellos tienen toda la bebida que deseáis incluida desde vinos de su selecta bodega la cual podréis ver mientras comeis o cenais al igual que su majestuosa terraza en la cual existe la opción de poder comer o cenar a petición de los comensales durante el buen tiempo. Además de todo esto los domingos al medio día podreis disfrutar de su " brunch del hiberus" este se celebra en el otro salón del hotel llamado afluentis un gran salón con las mismas vistas que el celebris, este menú que vale 33 euros está compuesto por una gran variedad de entrantes los cuales son tipo buffet, podrás tomar todos y tantos de ellos como desees, después simplemente con avisar al metre, el principal y el postre serán servidos en mesa de la manera habitual. En este salón también se dan a diario los desayunos buffet del propio hotel los cuales son simplemente impresionantes y recomiendo a cualquiera que se valla a alojar en el, es servido y preparado por los mismos trabajadores del celebris y por un precio que va desde los 10 a los 15 euros podréis disfrutar de un sin fin de productos que harán que cojáis más que fuerzas para afrontar el día. Por último destacar sobre todo la amabilidad, profesionalidad y atención de todos y cada uno de los trabajadores del celebris el servicio siempre es más que perfecto te hacen sentir mejor que en tu propia casa. En definitiva un sitio 10 al que no puedes dejar de ir si visitas la capital aragonesa, y si eres vecino de la misma la pregunta es?? A que estas...

Quería darle una sorpresa a mi pareja y siendo que teníamos un evento cerca de este restaurante, me decidí a reservar por cercanía a dicho evento y las valoraciones mayoritariamente positivas de este lugar. Recién entrado accedimos a la zona de recepción donde nos recibió en apenas unos segundos un hombre con una sonrisa que no se desdibujó en toda la velada. Después del trámite inicial de la elección de la mesa, pasamos a la elección del menú. Pocos platos. A mi gusto, algo que habla bien de la cocina. Nada de preparados, fritos ni alimentos precocinados. Todo fresco y con dedicación especial. Fue un punto positivo, sin duda. Aquí me encuentro en un pequeño impass. Pues no me decido por puntuar mejor si la calidad de la comida o la del servicio, pues ambas rozan la matrícula de honor. Cada plato mejor que el anterior, todo jugoso, en su punto perfecto y sin la trampa de la especia potenciadora de sabor. El personal de cocina sabe a lo que juega y lo juega con maestría. Cantidad justa para saciar el hambre y sin la sensación de haber comido como un cochino camino del matadero. El trato del personal, sencillamente impecable. Amables, sonrientes y dedicados. Presentación y cata de vino antes de beber. No sé si tendrán interés real en la aprobación de los clientes, desde luego, hacen bastante esfuerzo en que lo parezca. Eso sí, cuidado si vas y estás débil de corazón cuando pagues la cuenta, es fácil que te falle el marcapasos. Aún así, es de esos sitios donde apetece volver de vez en cuando. Nada duele gastarse un poco más y con más razón cuando te das cuenta que veinte minutos después de abandonar el restaurante, sigues hablando de lo bien que has cenado. Y con más razón aún, cuando esa persona es a la que querías darle una noche especial. Un sitio al que...

Really decent food. We weren't sure about going for the tasting menu (€45) as the restaurant seemed deserted and lacking atmosphere. However, it picked up later on and the presentation and taste of the dishes was fantastic. The portions were quite generous for a tasting menu but had no problem finishing them. One of the waiters, Fran, was particularly friendly and helpful. The only downside is the location really as I can't imagine it reels in many tourists given...