La reserva es preciosa. Hay montones de especies nativas. El lugar está muy bien cuidado por el grupo de Guarda Parques de la Municipalidad de San Isidro. Tiene senderos para caminar entre la vegetación y un pequeño mirador para observar la reserva desde lo alto. Es un lugar que se conserva agreste con obvios motivos de preservación, así que si esperás encontrar un parque para sentarte a tomar mate y hacer barullo, no es el lugar indicado. La tupida vegetación tapa la visual del río, pero está muy cerca, así que en momentos de crecida hay espacios de la reserva que son cerrados al público. En el lugar se hacen montones de actividades de voluntariado y de cuidado del lugar y las especies. Si tenés la oportunidad, sumate a alguna de estas actividades y llevá a tus hijos, porque lo que aprendés de la naturaleza es impagable. Yo participé de una de las jornadas de limpieza, que se hacen el primer sábado de cada mes, y realmente hacerlo te concientiza en cuanto los seres humanos descuidamos nuestro planeta. ¡Si podés, no dejes...
Read moreHabíamos visitado la reserva hacia unos meses y el guarda parque nos contó de ciertas actividades que estaban e iban a implementar para evitar la invasión de ciertas especies entre ellas los lirios amarillos que estaban afectando el equilibrio del ecosistema. Ya no se veían los espejos de agua, ni las tortugas subidas a troncos en ellas, ni la variedad de aves que se podían observar desde el mirador. Entendimos ese ecosistema se estaba modificando. Lamentablemente ayer los lirios han invadido ese espacio, esos vuelos de garcitas son inexistentes, ya no están. El sendero de troncos que permitia hacer todo un circuito a la reserva está cerrado Nos dió pena, tristeza. Invito a preguntarle a la Sra. Gasparri, directora o vice responsable del área, que sucedió. Recursos económicos, personal?. No soy de la zona pero disfruto de la naturaleza y ese era un lugar de paz. Ojalá...
Read moreMuy cuidada, muchísima biodiversidad, el bosque ribereño es una belleza. Entrás a otro mundo. Mucha tranquilidad. Hace 12 años hice un trabajo para la facu sobre esta reserva y recordaba la problemática de invasoras... No la había visitado y me sorprendió el laburazo que hacen para su control. Amé no verla plagada de ligustro como ocurre en muchas otras reservas conurbanenses.
Se recorre en poquito tiempo.
También a diferencia de otras reservas que he visitado, acá prácticamente no se escucha ninguna autopista ni avenida (al menos no cuando fui, no sé si dependiendo el viento otros días si).
Tiene un camino aún no habilitado y si no hay crecida, se llega al río.
Buena onda los guardaparques.
Felicitaciones a todos los que...
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