Hermoso complejo Histórico Santa Felicitas (1893) construido por la congregación de los padres Lourdistas surge de las donaciones de los padres Felicitas Guerrero. A partir de 1904 el colegio es dirigido por las señoras de San Vicente de Paul, perteneciendo desde entonces a la Conferencia de San Vicente de Paul. Lo forman: la Iglesia Santa Felicitas, la Quinta Álzaga hoy Plaza Colombia, el antiguo Oratorio de Álzaga, el Templo Escondido y los túneles que conectan las salas que sirvieron como comedor obrero entre 1905 y 1945 donde se podía comer sopa, guiso y pan por veinte centavos y los Túneles con las salas de exhibición. En este espacio de dos niveles encontramos en el subsuelo los Túneles (1000m2) con once salas de exhibición vinculadas a las actividades tradicionales de la zona, a la historia del lugar, a las industrias, los oficios, los inmigrantes, objetos diarios, herramientas, ropas y fotos con temáticas dedicadas a las Industrias y Oficios, los Inmigrantes, el Puerto, la Ciudad y la arqueología barrial con salas permanentes de: arqueología de Barracas, cinema, cocina lavandería, comedor obrero, de Inmigrantes, de oficios e industria, imaginería religiosa, puerto y ciudad. En el primer piso del actual Instituto Santa Felicitas de San Vicente de Paul sorprende el Templo Escondido (500m2) , utilizado para encuentros corales, exhibiciones y eventos. Construido en 1893 en estilo neogótico, es un templo que nunca fue consagrado como espacio sacro. Posee veintiocho vitrales franceses de gran valor patrimonial realizados por G.P. Dagrant. Nota: No faltan quienes dicen haber observado a Felicitas deambular vestida de novia...
Read moreUn domingo luminoso el de hoy, ideal para visitar el Museo y Complejo Histórico Santa Felicitas en Barracas. El último fin de semana de cada mes se abren las puertas de este lugar tan interesante para ofrecer visitas guiadas a las 15:00, a las 16:00 y a las 17:00 (Bono contribución de $500 y menores de 12 años sin cargo). Un video didáctico y el recorrido guiado por los túneles, el Museo y el Templo Escondido no sólo ponen al visitante en el contexto de época, sino que ofrecen un relato pormenorizado de la trágica historia de Felicitas Guerrero. Para conservar su memoria, sus padres erigieron el templo que lleva su nombre y en cuyo interior hay una bellísima estatua de Felicitas con su hijito, que falleció a los cinco años, víctima de la epidemia de fiebre amarilla. Es una lástima que la iglesia tenga horarios tan restringidos y no esté incluida en el recorrido del Complejo. Las guías, excelentes, aportan la cuota de humor que hacen que la información histórica sea más interesante aún. Y en la hermosa Plaza Colombia sobrevuela el espíritu de lo que fue la mansión...
Read moreWorth the visit. Volunters do a huge effort to preserve the building that is part of Buenos Aires' history. Everyone was so welcoming it made the experience even richer. Go discover it, your visit helps them to raise the money necessary to keep the place. They receive no assistence from any authorities...
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