Merece la pena visitar este lugar por varios motivos. Por un lado ofrece unas buenas vistas de la ciudad desde el sur y, en días despejados, de las sierras extdriores del Pirineo. Por otro lado tiene mucho interés para los interesados en la Historia. Está sobre la llanura de Alcoraz, donde se produjo la batalla homónima que permitió a Pedro I tomar la ciudad y en la que la leyenda afirma se apereció San Jorge. Por otro lado es el punto de comienzo (o final) del tramo del sendero GR 234 que une Huesca con Zaragoza, que se recorre en la llamada Jorgeada y que, entero o por partes, es de mucho interés para senderistas.