En la secretaría te dan información falsa, te mienten. Me dijeron que el siguiente día abrían, así que fui, pero estaban cerrados. También me dijeron que solo necesitaba 2 documentos para realizar un procedimiento, así que pedí cita para entregarlos, y cuando llegué me dijeron que me faltaba otro. Además, nunca contestan al teléfono, pues llamé 7 veces en dos días y con suficiente tiempo de diferencia entre cada llamada y siempre dice que no está disponible, por lo que sería de gran utilidad que quitasen el número de teléfono ya que está ahí de decoración, no sirve para nada. La secretaría da mucho que desear. Está llena de personas incompetentes que no saben hacer bien su trabajo.
En la universidad en la mayoría de los casos los profesores parecen no estar preparados para impartir las asignaturas, pues se limitan a leer una exposición, además de que cuando explican el temario y algún alumno les hace una pregunta no la responden con claridad debido a su carencia formativa y a menudo no piensan en el bienestar de sus alumnos porque mandan, en periodos y condiciones a veces abusivas, demasiadas actividades que ni se molestan en corregir. Estoy muy decepcionada con la falta de profesionalidad de la universidad, un ámbito que se supone que prepara a sus alumnos para el mercado laboral del cual, al terminar la carrera, a penas sabemos información.
En cuanto al temario, es casi en su totalidad teórico, por lo que no contribuye a la formación práctica esencial de los alumnos, la cual debería ser un reflejo de lo que nos encontraremos en el mercado laboral. Asimismo, el profesorado debería mejorar la calidad de los recursos que utiliza, debido a que suele tratarse de exposiciones pesadas que no destacan la información importante, por lo que no cumplen ni ellos mismos lo que piden a sus alumnos, exposiciones claras y detalladas que resaltan datos relevantes.
Respecto a los métodos de evaluación, sería conveniente respetar los criterios establecidos, ya que los profesores suelen hacer la vista gorda para beneficiar a determinados estudiantes, mediante formas como permitiendo que entreguen actividades cuando ha finalizado el plazo pero no tienen un motivo justificado como es debido. Además, es imperativo que la universidad esté al corriente de la metodología de enseñanza de los profesores, pues algunos piden requisitos excesivos y establecen plazos inhumanos, tales como en el grado de Traducción e Interpretación el profesor de Lingüística quien en primer curso nos pedía hacer numerosos trabajos de forma individual con una extensión de Trabajo de Fin de Grado en el plazo de tan solo una semana. En este caso en concreto, pese a ponernos en contacto con las entidades requeridas, no se tomó ninguna medida, un acto que representa la nula importancia y representación que tienen los estudiantes en esta universidad. Asimismo, no puedo pasar por alto cuando el profesor de RIATI me amenazó con que si no borraba MIS apuntes de la plataforma Wuolah se lo comunicaría a la universidad. Luego está el caso irracional de la profesora de Terminología que se equivocó al corregir una pregunta de los exámenes y, en vez de corregir las notas, nos obligó a todos los estudiantes a preguntarla en una tutoría.
Por supuesto, no hay que olvidar que el respeto hacia los estudiantes es esencial, por lo que no se debería permitir comentarios del profesorado que son pasivos agresivos y que incluyen insinuaciones dañinas. Un ejemplo es un profesor que cuando le mandé un correo con dudas me obligó a asistir a una tutoría en vez de responderlas, y en la reunión se quejó del número elevado cuando es su deber ayudar a los alumnos.
En resumen, el profesorado debe aprender a desempeñar correctamente su trabajo y ofrecer un servicio de calidad, pues, personalmente, si hubiera sabido desde un primer momento que la universidad era así, no habría optado por estudiar aquí. Me llevo una experiencia inmensamente estresante y teórica que me deja con una sensación de no estar ni de lejos preparada para optar a un trabajo. La Universidad de Málaga deja...
Read moreTras mi experiencia en esta facultad, mi recomendación es que no os inscribáis en ella bajo ningún concepto. Su personal de secretaría es de los peores que me he encontrado en entidades públicas, sus respuestas más comunes son: "no lo sabemos", "no lo llevamos nosotros" "eso se mira en la página web". Además de las faltas de respeto cuando les comentas que hay algo que falla o que no han hecho bien. Por otra parte, jamás te cogen el teléfono, y mira que no sólo hay un número... en 7 años creo que sólo me lo han cogido 1 o 2 veces. Las fechas de los exámenes las ponen muy tardía respecto a otras facultades que desde el primer día de clase puedes consultar cuándo son. En definitiva, mi sugerencia es que se haga un cambio en el personal administrativo lo antes posible. En cuanto al profesorado, sólo puedo hablar del de Filología Hispánica. La mayoría de los profesores no son muy buenos, se salvan unos 4 o así que verdaderamente saben dar clase. Al resto deberían darle un toque de atención o renovarlos, pero claro, son funcionarios y el puesto es para toda la vida como bien sabemos. La única esperanza que tengo con este mensaje es que cale de una vez por todas a alguien que tenga poder en la UMA y que realmente...
Read moreDesconozco cómo será el servicio de secretaría en otras facultades, pero el de esta deja mucho que desear. A lo largo de mis cinco años de estudio, he experimentado numerosos problemas. Ante situaciones como cambios de turno por motivos laborales o problemas de salud, la respuesta es invariablemente la misma: desentendimiento total y falta de soluciones. Intentar contactar por teléfono es una tarea frustrante, ya que rara vez contestan. Incluso en trámites sencillos como la gestión de un pretítulo, demuestran una falta de conocimiento alarmante.
El trato recibido es, en general, deplorable: actitud altiva y falta de empatía, incluso cuando se plantean dudas de forma educada. La digitalización de muchos procesos, si bien evita el contacto directo con el personal, no ha mejorado la situación. Las dudas que surgen con los trámites online siguen sin resolverse.
El único miembro del personal que merece reconocimiento es el señor que atiende por las tardes. Su profesionalidad y disposición para ayudar contrastan enormemente con el resto del equipo. En resumen, mi experiencia a lo largo de estos cinco años ha sido mayoritariamente negativa, caracterizada por la falta de profesionalidad y la...
Read more