Nos fuimos dos noches con nuestras dos hijas en plena temporada alta en agosto, porque querían experimentar una acampada al aire libre, algo que yo recordaba felizmente de mi infancia.
Previamente, miré las reseñas en google y la mayoría de comentarios eran positivos, sobretodo en cuanto a ir con niños. También me fijé en las fotos de la web. La verdad es que pintaba muy bien y como la mayoría de campings en esta época te obligan a reservar varias noches, nos decidimos por este.
Antes de nada, que quede claro que no tengo nada en contra de otras culturas ni soy racista ni nada parecido. En lo que sí soy intransigente es sobre comportamientos incívicos y delictivos... Me explico:
Llegamos, y le pedimos al recepcionista una zona tranquila, porque el camping parecía lleno. El camping es grande, vamos a unos 500m de la recepción y nos ponemos en la parcela mas tranquilita. Las parcelas no son gran cosa, en las fotos parece mas natural, la realidad es que parece un parking de arena con poca sombra y delimitado por vallas (forradas de alguna planta).
El camino a la piscina ya fue indicador de lo que nos vendría, ya que pasamos por la zona donde estan los residentes. Parece una zona de chabolas al mas puro estilo favela brasileña que dan muy mala imagen: rulots con avances y mas avances (algunos unían trozos de plasticos y así hacían paredes), gente de cubateo a las 17h con sus hijos por ahí desperdigados, gritos de parcela a parcela, teles puestas a todo trapo (incluso había teles encendidas sin nadie en la parcela!), etc.
La piscina con el aforo al 150% (estamos en covid), clase de zumba en marcha y como 30 personas pegaditas haciendo la sesion. La instalacion en si no esta mal, pero el aforo y el personal que hay, la hacen poco apetecible. Agua turbia por la masificada afluencia y garrulismo por todas partes (le digo a mi mujer que acerque la bolsa que no me fio). Nos vamos en 20min.
Mentalidad positiva, seguro que ira a mejor... Mientras preparamos la cena, se empiezan a llenar todas las parcelas. Lo que antes era vista "despejada" a las vallas, ahora es una furgoneta a un lado y una autocaravana al otro, separados por solo un par de metros. Por cierto, el tren esta a 20m y cada vez que pasa toca fuertemente el claxon porque imagino que la gente por ahí cruza la via a pie (hasta las 00h lo oirás).
Estamos cansados y la expectativa tampoco es muy prometedora asi que a las 22h nos metemos en la tienda a descansar. El cubateo en las parcelas colindantes va en aumento y lo que os decía antes de los comportamientos incívicos: gritos y mas gritos, como si estuvieran solos, hasta las 02h de la noche. Llegaba tambien olor a marihuana, vete a saber de donde. Niños corriendo, en bici, gritando, tambien hasta la madrugada. Una autentica pesadilla, si tu intencion no es ir a privar hasta la madrugada.
Me despierto a las 8 y lògicamente somos los unicos (el camping esta de resaca), asi que me voy al baño y vuelvo a ver las chabolas con las mesas llenas de vasos y botellas vacías, menuda fiesta.
A las 10h estaba saliendo del camping (16h de estancia). Cuando estaba en recepcion haciendo la salida, aparece una familia que había estado en un bungalow y imaginaos como lo dejaba de sucio que los del camping le dijeron "señora no hay que ser tan guarra y encima ha estado fumando que apesta". Este es el nivel de la clientela.
Me devolvieron la mitad de la estancia, seguramente estaran acostumbrados, no se. A partir de esta, miraré los campings con lupa, hay mucho riesgo.
En resumen, en camping Platja Vilanova encontraras: Favelas de residentes que estan todo el año Garrulismo a tope con cubateo y gritos hasta la madrugada Tren pasando a 20m y pitando cada vez Aforo de la piscina al 150%, agua turbia y ganas de acercar tus pertenencias Hay que admitir que el lavabo que teniamos cerca estaba decentemente limpio. La zona de favelas no se...
Read moreEl camping calidad precio correcto en general, no le vendría mal renovar las instalaciones en lavabos. La piscina, aunque los enanos se lo pasan pipa, se les queda pequeña (en hora punta agobia un poco...) Ha sido la tercera vez que vamos este año. En su momento lo propusimos a familia y amigos de Suiza, Madrid y Barcelona como punto de encuentro pero el año que viene ya no será así, y no por el camping, sino por la mala experienza que me he llevado con el restaurante. Sobretodo, a la actitud de las camareras, concretamente con la chica rubia. Ante una situación de espera de unas 3 horas que ella misma podía haber solventado con un "disculpad, estamos desbordados, vamos retrasados, si queréis buscar otro sitio, os pongo unos cacahuetes" o, no sé, imaginación al poder. Se truncó ya que optó por una contestación más hostil: "pues si se ha acabado el bacalao se ha acabado, tu no has trabajado en hostelería, es lo que hay". Al final parecía que te tenías que sentir culpable por intentar consumir y consiguió eliminar cualquier abismo de empatia por nuestra parte causando justo el efecto contrario (entrar en una discusión absurda y de malas formas, con las consiguientes disculpas del propietario que salió al final del servicio a dar la cara)
Al cabo de unas semanas volvimos pq hacia meses que teníamos reservadas 3 parcelas para 9 días. Al 3er día intentamos ir a comer, era tarde y el dueño estaba molesto pq por lo visto mi primo había puesto una reseña de lo ocurrido en aquella anterior estancia. A su parecer aquello debía de haber quedado ahí, tras sus disculpas. Y en su opinión en aquella reseña habían mentiras (autorreflexion: las reseñas en Internet son lícitas, subjetivas, editables y libres para todos, tanto para el consumidor como para el propietario, y el medio actual de información y defensa de cada una de las partes. Hasta la fecha no he visto comentario al respecto de ninguna de las reseñas...) . La decisión mutua fue no comer ahí y buscamos otro sitio.
La noche del 6° día nos íbamos a cenar fuera pero a última hora me tuve que quedar con una amiga pq mi hija no se encontraba bien, fui a pedir unas pizzas al restaurante para poder cenar, me tomaron nota y al rato salió la camarera rubia para decirme que sabía quien era yo, que tenían derecho de admisión y no me iban a servir. El motivo que alegó fue la reseña que había puesto mi primo... Perpleja no, lo siguiente! Obviamente, me tuve que ir... Y obviamente, tuvieron otra reseña...
El último día fui a pedir la hoja de reclamaciones para denunciar el uso abusivo del derecho de admisión a mi persona por un motivo injustificado. El dueño parecía ajeno a lo que había sucedido aquella noche con la camarera (su hermana)... Él seguia enfrascado y molesto por las opiniones. Para sorpresa, el encuentro volvió a tensarse otra vez gracias a la actitud acusadora de la camarera... En fin, me fui y volví al rato con la hoja de reclamaciones rellenada para que la sellasen y firmase el dueño pero este no estaba, se había ido a descansar. El chico (que supongo que tb era familia) y la camarera me contestaron que tenía que esperarme a que volviera, les dije que no, que me tenía que ir del camping y no iba a esperar, que por favor lo llamasen o buscasen a alguien que pudiese poner el sello y firmase... Negativa de nuevo. De la indignación que llevaba pensé en llamar a los Mossos pero decidí ir a la recepción del camping, al rato tenía el sello y la firma del dueño. Tan difícil era?
He intentado medir mucho mis palabras pq en el fondo me sabe mal por el dueño del restaurante. Se le ve dado a su negocio, cocinar, y he de decir que lo hace bien, (cuando te dan de comer, claro) pero me indigna y me violenta el trato y las formas que he recibido por parte del personal que está cara al público.
Con más humildad y menos prepotencia...
Read morePues nada, parece que encajamos las críticas de manera muy madura... Ahora a mis amigos no les sirven en ese restaurante, ni a los niños, aunque ellos ni estuvieran cuando pasó lo ya comentado. Actualizo ya que tenía reserva en el camping para pasar unos cuantos días en agosto, e iluso de mi pensé que la cosa podía mejorar. Nos quedan unos cuantos días pero el primero han ido mis compañeros de las parcelas adyacentes a comer (pensaba unirme más tarde) y el sorpresón ha sido que no les han querido atender por mi reseña anterior, ya que han reconocido a mi primo. Curioso puesto que todo lo que puse se habló sobre la marcha y lo que quedó a salvo del restaurante fue la actitud del dueño. Bien, me retracto, el dueño ha dejado sin comer a mis amigos con los niños por la soberbia de no aceptar algo que se suponía ya aceptado, el lamentable servicio que se ofreció aquel día. Ahora lamentablemente no puedo poner si ha mejorado en tal sentido sino agregar la supina y enroscada actitud soberbia que me lleva a plantearme incluso la legalidad de sus actos negando dar servicio a mis compañeros por el mero hecho de haber publicado una opinión, dicho sea de paso, absolutamente sincera. Cuarto día, una de las nenas mala y se acercan su madre y ella al restaurante a cenar algo mientras todos los demás vamos al pueblo. Nos acaban de llamar, que tienen derecho de admisión y a ellas no les dan de comer. IMPRESIONANTE. Mañana iremos a por la hoja de reclamaciones y nos informaremos de si es incluso legal el acceso a un servicio tan básico dentro del camping.
Opinión anteror: El camping está bien, restaurante horrible. Camping con lo necesario e instalaciones para estar a gusto. El servicio de animación me gustó mucho, mucha energía y para los niños un buen punto. El único problema, pero eso sí, grande, es el restaurante. Tras reservar a las 14:30h, y tomarnos nota a las 16h (incluso bebidas), nos encontramos con que sirven pasadas las 16:30 y nos dicen que no van a traer algunos,que si lo queremos cambiar por otra cosa... Ni una disculpa, ni unas miserables patatas de bolsa en 2h,pero cuando se nos ocurre la osadía de comentarlo la camarera salta de manera bastante hostil diciendo que no hemos trabajado en hostelería y no sabemos cómo funciona una cocina, que se ha terminado y punto. A la pregunta que que pueden hacer que tarde menos para evitar esperar otra hora (feo decirlo, pero los niños sin comer), la respuesta es mejor... Que tardará lo que tenga que tardar. Elegimos otra cosa y al cabo de otra media hora viene otra camarera para decirnos que no hay de otra de las cosas que se habían pedido (curiosamente yo mismo me quedé sin primero y sin segundo), que que queremos... La actitud aún peor si cabe, increíble. Se nos quito el hambre y uno de nosotros se fue a recepción a poner una reclamación. Tras esto el dueño del restaurante, que parece ser independiente del camping pese a estar dentro, viene y se disculpa por la actitud de las camareras, que parecía tener asumida, y por los errores en el servicio y se ofrece a invitarnos a lo que sea que quisiéramos tomar, incluida la comida anterior que dejamos a medias. Un gesto sin duda que se agradece tras el suplicio que sufrimos. Por lo visto fue una excepción de ese día debido a la cantidad de clientes. La gente de las mesas de al lado nos comentó que era habitual y elogió nuestra paciencia y modales. Al día siguiente, pasando por la terraza a la piscina... Misma escena con otra familia, el dueño con el mismo discurso. Obviamente sustituimos este restaurante por los del pueblo... Sin duda infinitamente mejor, pero eso sí, 30min andando. Una pena, una gran camping con un enorme cáncer desde mi punto de vista. Tipo de viajeFamilia ·...
Read more