Don Elvis Diner — Restaurant in Castelar

Castelar alberga dos secretos. El primero, ubicado sobre la calle San Nicolás y a metros de Arias, se llama "Don Elvis". Un bar inspirado en la estética de los "Dinning Cars" norteamericanos de la posguerra y ambientado con bastante inteligencia con los mejores elementos del estilo "Googies": -Arquitectura con detalles de Dinning Car de 1920. La fachada del local y la carpintería en alumino/acero inoxidable desplegada dentro del bar refuerzan este concepto, fundamentalmente en la barra que, además, tiene un tocadiscos de tragamonedas, un detalle quintaesencial del estilo y que más de un bar temático de este tipo pasa por alto (desconozco si funciona, pero lo tienen y eso es un plus). -El interior del local con su piso "Tablero de ajedrez", la presencia de mesas con cabinas tapizadas, cada una con su respectiva luminaria colgante en forma de globo es un claro homenaje al "Dinner" americano del período comprendido entre 1950 y 1960.

Para quienes gustan de este tipo de arquitectura o de la fotografía. Don Elvis es tan fotogénico como temático. Lamentablemente mis fotos no hacen justicia a lo que el local tiene para ofrecer visualmente.

En lo que respecta a su gastronomía, el menú es variado aunque puede resumirse en los siguientes grupos: -cafetería -picadas -menú al plato -sánguches -Hamurguesas

Para tratar de conectar con la temática que plantea "Don Elvis" opté por probar una hamburguesa. En mi caso ordené la "Jerry Lee Lewis", la más cara ofrecida en el menú ($5000) y que podrán apreciar en las fotos, la acompañé con una pinta de IPA ($800). Lo más destacado de la hamburguesa, más allá del aspecto y la presentación de su emplatado, es el peso que transmite al tomarla con la mano. No recuerdo, en todas mis experiencias con hamburgueserías artesanales, haber pedido una hamburgesa triple y experimentar esta sensación como me ha ocurrido con esta "Jerry Lee Lewis". Es, sin lugar a dudas, la hamburguesa artesanal con los medallones de carne más contundentes que haya probado hasta la fecha. A quienes gusten de los retos que suponen las hamburgesas grandes, en este menú encontrarán una buena prueba.

"Don Elvis" acepta medios de pago electrónicos, más precisamente tarjetas de débito y mercadopago. Quienes vayan con efectivo disfrutarán de un 10% en el total de la cuenta. También trabajan con Aplicaciones de Delivery.

Con un salón grande y espacioso, ubicado en una zona tranquila de Castelar, mi impresión durante mi visita a este lugar es que se trata de un ambiente ameno y familiar. Una experiencia recomendable.

Si ha leído hasta aquí, seguramente se esté preguntando por el segundo secreto que esconde Castelar. Puedo decirle que está oculto dentro de "Don Elvis". No se preocupe, una vez que ingrese al bar no tardará en descubrirlo, bastará con una mirada...y no, no me refiero a la trompa del auto que hay en la barra, pero comparte algo en común con el secreto: el color y...

Un lugar mágico en Castelar! Si sos como yo apasionado por la historia aquí vas a encontrar un pedacito de los años 50 y 60 detenido en el tiempo. Un hermoso Bar que te transportará a la época del gran Elvis, el Rock and Rooll y la hermosa Marilyn Monroe. Su exterior me recordó un bagón de tren de esos años, En el interior encontramos una gran barra decorada en el centro con la mitad de la carrosería delantra de un auto de esos años y los típicos bancos de barra con los asientos en una hermosa cuerina verde agua. En la decoración interior predominan tres colores en sus mesa y asientos: el verde agua, el blanco y el rojo. Los asientos rinconeros de cuerina verde agua son lo más. Los pisos y paredes a cuadros blanco y negro son el toque final que nos sumerge en los años 50 y 60. Entrando, hacia la izquierda se comunica con la barbería con riquísima decoración, también y una amplia vitrina con autitos y otros vehículos de colección muy llamativos. En la puerta del baño de chicas te recibe, con su amplia sonrisa, el póster de una bellísima Marilyn del tamaño de la puerta. Ese entorno vintage se completa con buena música acorde al lugar y una amable atención. Este día tomé uno de los café con medialunas más placenteros de los que...

Lugar muy lindo con buena atención, buena música. Fuimos el día de la madre. La comida rica. Las rabas excelentes, tiernas y crocantes por fuera, las papas fritas igual. En general, las frituras, excelente. En cuánto a la hamburguesa James Dean, nos pareció que le faltaba queso provoleta o bien no se sentía el sabor y la cantidad de papas fritas era muy pequeña. Aún así, llenador el plato. Había faltantes de postres (dos de los comensales no pudieron pedir el volcán de chocolate ya que la mesera nos explicó que quedaba uno solo y tampoco había cheesecake). En reemplazo de uno de los postres, se pidió panqueques. Después de un rato de demora, la mesera nos dijo que no había aunque, en compensación, se pudo pedir otro postre, de cualquiera de los disponibles sin cargo por la demora ocasionada. En cuanto a los postres, los helados muy ricos. El volcán no estaba logrado ya que estaba completamente cocido, aunque rico de sabor. El crumble de manzana estaba bueno pero estaba frío, cuando se supone que tiene que servirse tibio para contrastar las temperaturas de éste con el helado. Los domingos si se paga en efectivo tenés 10%...