Este mediodía hemos ido, como primera escala en Mendoza, a almorzar con mis amigos y mis sobrinos.
La experiencia ha sido muy satisfactoria. Desde el arribo hemos observado la armonía del edificio con el ambiente circundante, la generosidad de los viñedos y un césped vibrante y cortado para impactar a los sentidos.
El restaurante al aire libre, a la sombra de árboles algo añejos y muy generosos, se destaca por su amplitud, la privacidad que ofrece a cada grupo y una ambientación sin estridencias donde nada faltaba, ni sobraba.
Optamos por la carta y nos dejamos aconsejar por Eugenia, la sommelier del lugar, quien fue precisa en el origen, las cepas y el modo de añejamiento de cada vino lo que nos permitió una elección y secuencia muy satisfactoria.
Comenzamos con unas empanadas de carne mendocinas, en mi opinión, excepcionales. En una primera impresión podrían parecer simples. Pero tienen la simpleza de aquello que deriva de mucho conocimiento para alcanzar ese nivel. También una provoleta muy bien elaborada y mejor servida.
Luego pedimos pescados, pastas y carnes. Un salmón bien preparado y unos ñoquis muy originales y sabrosos.
La entraña era muy buena, bien preparada y muy tierna. También pedimos un ojo de bife con hueso de 1 kg. que, si bien pasó la prueba, claramente podría haber estado mejor. La carne muy buena, pero la cocción fue despareja, pasada un poco del punto y en un extremo estaba sobrecocido. Un oportunidad de mejora, al menos, por el bife que nos sirvieron hoy.
De postre probamos el volcán que venía con helado y estaba muy bien preparado. También una selección de helados artesanales excelentes. Elegimos dulce de leche, chocolate y vainilla. El de ddl es de los mejores que he comido.
Nosotros podemos disfrutar de cada encuentro sin necesidad de otra cosa que la simple presencia de cada uno. Los vínculos mediados por el afecto y las historias de vida no requieren demasiados adornos para expresarse. Y es ahí donde el aporte de Fogón se ha hecho más evidente. Logro aportar al encuentro un ambiente exquisito sin entorpecer o entrometerse en una dinámica por demás consolidada.
Una mención especial para Mayra, quien nos asistió durante las casi 3 horas que pasamos en el restaurante con una calidad en su servicio y una calidez destacables.
También para Eugenia, a quien ya mencioné, por ayudarnos a elegir los vinos con mucha y muy completa información sin querer orientar nuestras preferencias conforme a las suyas.
Una buena experiencia en este restaurante que nos dio la bienvenida a Mendoza y que sube la vara a nuestras expectativas para los sitios que...
Read moreHace poco visité Fogón Cocina de Viñedo con grandes expectativas. Este restaurante, ubicado en Luján de Cuyo dentro de la bodega Lagarde, no solo ostenta una estrella Michelin, sino que también es muy recomendado por guías y sitios especializados. Como amante de la gastronomía y habitué de restaurantes de este calibre, esperaba una experiencia impecable, pero lo que vivimos fue un desastre de principio a fin.
Empecemos por lo más grave: pedí el tartare de trucha, un plato que debería ser una obra maestra de delicadeza y técnica. Sin embargo, al comenzar a degustarlo, encontré una mosca en el plato. Algo inaceptable en cualquier lugar, pero aún más en un restaurante de esta categoría. Llamé al mozo de inmediato, quien me dijo que llevarían el asunto al chef. Hasta ahí, pensé que el incidente sería manejado con profesionalismo. No esperaba menos que una disculpa, algún gesto por parte del personal o, al menos, un reemplazo del plato. Sin embargo, no solo no hubo disculpas, sino que no me dieron ninguna respuesta. El plato quedó sobre la mesa y nadie volvió a mencionarlo, como si nunca hubiese pasado.
Esto marcó el tono de toda la noche. El servicio dejó muchísimo que desear. Si bien los mozos eran atentos en lo básico, la actitud fue distante y poco empática. Lo peor vino al final: éramos ocho personas en la mesa y dejamos una propina de 80 mil pesos, que consideramos más que razonable, especialmente considerando la mala experiencia. Sin embargo, el mozo –quien además era extranjero– nos reclamó que dejáramos más propina. Fue una situación incómoda, fuera de lugar, y terminó de arruinar la noche. Nunca había visto algo así en ningún restaurante, menos en uno con una estrella Michelin.
Al final, pedí hablar con el gerente para comentar tanto el incidente de la mosca como el trato recibido. Su única respuesta fue un escueto “muy bien que avisaron”, sin mostrar preocupación ni ofrecer una solución. Pagamos 140 mil pesos por persona, lo que no es un gasto menor. Por ese precio, uno espera no solo comida de calidad, sino también un servicio excepcional. Lo que obtuvimos fue exactamente lo contrario.
He visitado muchos restaurantes Michelin en Argentina y en el exterior, y siempre destaco el nivel de servicio que acompaña a la propuesta gastronómica. Pero esta vez, me fui sintiendo que nos trataron mal, con desinterés y cero profesionalismo. Una experiencia lamentable, que no...
Read moreThe vibe here is incredible. We arrived and were greeted with a glass of wine. For lunch you are in a back patio eating under the trees next to vines. The food was so good, well thought out, and we had "First Vines" line of wines, all really good. Mayra was our server and she took care of us like a friend, thank you to everone who works at Fogon, we had a wondeful experience.
Here is our entire 4 day itinerary in chronological order in case it helps you pick for your trip. I will also leave reviews in those places: Fogon Lagarde - lunch Azafran - dinner SuperUco - tasting Casa de Uco - Private Asado Abrasado - dinner Susana Balbo - experiencia Crios asado Catena Zapata - blending games tasting and tour Pizza Bigalia - dinner Durigutti - Tasting and...
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