Tifossi — Restaurant in Municipio de Villa Carlos Paz

Si sos amante de la buena pizza y de los deportes (futbol, básquet, voleibol, hockey, golf, etc) tenés que pasar por acá.

A este comercio no solo lo define su nombre, la calidad de sus productos y la calidez con la que te atiende Darwin (alias Wilson) es el plus que esperamos quienes pasamos por la bella Carlos Paz y queremos sentirnos como en casa.

El local cuenta con planta baja y primer piso, dónde la persona encargada en la puerta distribuye grupos de diez o más personas con una habilidad sorprendente.

La pizza Tifossi es exquisita, viene con salsa de tomate, mozzarella, albahaca picadita, tomate concasé y unas carnosas aceitunas.

La napolitana es tradicional (sin jamón) y la fugazzeta...son simplemente una delicia soñada para el paladar.

Siendo cinco personas, consumimos una limonada de la casa, a la que le pone azúcar a gusto el cliente, cuando la jarra de un litro llega a la mesa...de más está decir que se agradece una vez más la consideración. Sumamos una Stella Artois de litro, dos pizzas grandes (Napo+fugazz) y cuatro porciones de Tifossi.

Acá no hay pizza chica. Atenti, cuando pedis una pizza chica traen 4 porciones de la medida grande (una generosidad).

Aceptan pago con tarjeta de débito o efectivo (no trabaja con transferencias de MP o Banco), gastamos en total 64 mil pesos sin contar la propina que obviamente ganó Wilson por su dedicada y amable atención que incluye la propuesta de su parte de tomar fotos para hacer más memorable el momento.

Los baños se encuentran en...

No me gustó nada. Tuvimos que esperar más de media hora para poder ingresar al local, porque éramos cinco personas y solo tienen un par de mesas para esa capacidad. Una vez adentro, el salón estaba plagado de moscas. No se podía estar tranquilo, ya que a cada segundo las moscas revoloteaban sobre los platos e intentaban posarse en la comida. Muy desagradable y molesto. La atención merece mención aparte. El mozo que nos atendió no entendía bien lo que le decíamos, al nivel de confundir ravioles con tallarines y no conocer la salsa bolognesa, algo sumamente común. Al revés de lo que debería, nos trajo primero la comida, luego la bebida y por último los cubiertos, por lo que, para cuando comenzamos a comer, ya todo estaba frío. Tampoco nos trajo queso rallado, algo súper básico cuando se piden pastas. La comida en sí no estuvo mal, sobre todo las pastas y la milanesa de ternera. Pero la picada que nos pedimos, supuestamente la más abundante de la carta, era sumamente escasa. Además, en la carta figuraba que incluía pan de pizza tibio y nunca nos lo trajeron. El precio no es económico, gastamos $200 menos que en Villapaz, que es muchísimo mejor en atención, limpieza e instalaciones. El salón comedor, muy sucio y descuidado. No lo recomiendo...

Empezamos por el ambiente: las sillas y mesas parecian de un mac, sin mencionar que estaban sucias, manchadas y algunas mesas descascaradas. El piso estaba muy sucio, habia al menos 5 televisores con el volumen activado pasando la misma pelea de boxeo. Demasiado ruido, demasiadas luces, en resumen demasiado contenido audiovisual como para poder comer tranquilo. La comida medio pelo, adecuada al precio. las lamparas eran dignas de un telo y las luces blancas bueno.. que decir. Habia paredes manchadas, con humedad, descascaradas y percudidas. A este lugar le hace falta una buena inversion y lavada de cara. La comida: El relleno de los canelones estaba acido y se notaba recalentado, los ñoquis eran un masacote. La milanesa bien. La limonada un caso aparte. Acida e insulsa. Si le agregaran menta, algun endulzante, jengibre y hasta pepino seria mucho mejor. Los aderezos los sirven en unos descartables poasticos innecesarios, lo mismo el queso rayado. Los cubiertos con mango de plastico restan mucho. En fin, si queres un lugar con buenos precios, no sos muy pretencioso con la comida y no te molestan los ambientes ajetreados y de dudosa higiene,...