Cerveceria Owe — Restaurant in Neuquén

Visitamos a Cerveceria Owe em Neuquén, capital da província de mesmo nome, para conhecermos o brewpub familiar que está fazendo o maior sucesso por lá! – Brewpub são bares que produzem a própria cerveja para consumo no local –

O nome do projeto é derivado de um texto manuscrito na língua Mapuche – a tribo indígena que populava a Patagônia antes da chegada dos espanhóis -. OWE era o som aproximado da palavra utilizada pelos mapuches para referirem-se aos vastos trechos do deserto da Patagônia.

O restaurante apresenta uma ambientação clássica, estilo “casa de campo”, com tijolos expostos e móveis de madeira. Observamos encontros de casais, muitas famílias reunidas e um amplo espaço para festas e confraternizações.

O cardápio foi totalmente pensado para acompanhar as cervejas, são pratos rápidos, tapas e petiscos que contrastam com salsichas alemãs típicas e tábuas de frios.

Assim que nos acomodamos amendoins torrados ainda na casca chegaram à mesa como cortesia. Gostamos da ideia, é uma ótima forma de começar a noite!

Um dos pratos mais pedidos são as famosas batas fritas: Las Papas Fritas de Owe, servidas com queijo cheddar e bacon. Depois de provar é bem fácil entender o sucesso. – AR$ 160,00 (cerca de R$ 30,00 em 10/2017) –

Experimentamos também a Tabla de Ahumados, uma seleção de queijos, embutidos, escabeches e conservas acompanhados de deliciosos pães caseiros. A tábua serve muito bem duas pessoas. – AR$ 400,00 (cerca de R$ 75,00 em 10/2017) –

As cervejas são intensas, aromáticas e com cores vibrantes. Somente é possível testar a produção desta marca nos dois restaurantes da rede. Eles não engarrafam nem vendem diretamente em barril.

As clássicas da OWE são: Trigo, Stout, Kolsh, Scottish, Pilsen e IPA, que custam de acordo com o tamanho: Liso: 250ml AR$ 50,00 (cerca de R$ 10,00) Pinta: 580ml AR$ 80,00 (R$ 15,00) e Pitcher: 1,65 litros AR$ 225,00 (R$ 42,00).

Também são oferecidas cervejas especiais como a Belgian Coryander, Pilsen Sin Filtrar e a Brewmaster que trata-se de uma nova cerveja experimental todos os meses. Estas são vendidas apenas em canecas de 580ml ao custo de AR$ 85,00 (cerca de R$ 17,00).

Para quem deseja degustar vários sabores uma ótima dica é o Sampler, uma amostra de 4 cervejas a sua escolha (incluindo as especiais) cada uma servida em um copo de 250ml por AR$ 200,00 (cerca de R$ 38,00). – Todos os preços e conversões foram verificados em 10/2017 –

Sem dúvidas o “prato principal” que vem fazendo mais sucesso na OWE são as pizzas especiais. O cardápio apresenta apenas 7 sabores. O diferencial são os ingredientes de muita qualidade fornecidos por produtores locais, como humita a la crema (uma seleção de milhos), frutos do mar do Oceano Pacífico, cogumelos selvagens e presuntos da Patagônia. Os preços variam entre AR$ 260,00 (R$ 48,00) e AR$ 290,00 (R$ 55,00).

Estando aqui não perca a oportunidade de conhecer a fábrica que funciona junto ao restaurante, vale muito a pena visitar as etapas de produção e entender melhor como nascem estas cervejas.

Experimentar as delícias do brewpub, degustar cervejas especiais ganhadoras de concursos em vários países e acompanhar o processo de produção, tudo em um mesmo lugar, tornaram a Cerveceria Owe mais do que um restaurante, hoje este é um dos pontos turísticos mais...

Fuí con mi hija y nos atendieron pésimo. La cajera nos dijo que esperáramos afuera aún habiendo varias mesas desocupadas. Por el tema de "Covid", por supuesto que hice caso y nos quedamos esperando. Pero otras personas llegaban e iban ocupando los lugares libres. Cuando "apareció" un mozo le pedí que nos asigne un lugar, ya que estábamos esperando como nos dijeron y al final otras personas no esperaban nada, simplemente se sentaban donde querían. Nos dio una mesa y atendió a otras personas (quienes se sentaron antes pero llegaron después). Ni nos trajo carta ni código QR para carta virtual, simplemente no vino más. Abrí una página de internet que figuraba en la pared y vimos el menú desde ahí. Luego lo llamamos para pedir una pizza, una gaseosa y un agua saborizada. Jamás nos trajeron ni las bebidas. Se iba gente, llegaba otra y a todos los atendían, nosotras ni para tomar teníamos. La mesa totalmente vacía. Hasta que me levanté y le reclamé a la cajera, INCREÍBLE. ¡Encima no le gustó nada! Cuando pedí la cuenta me miró MUY MAL. Me trajeron un "ticket" interno, nada legal. Y tipo como para que deje el dinero ahí, nadie me iba a traer el vuelto, que ni pensaba dejarlo, pero con tal de no esperar más ni que me miren mal, se los dejé y nos fuimos. Un bajón. La pizza estaba muy rica. Pero la experiencia fue tan mala que ni importaba ya. Solo queríamos comer ya que nos hicieron esperar tanto, pero ni disfrutamos, fue horrible. Habían mesas vacías, no es que estaban a tope, ni que esperamos por la cocina... atendían a todos y ni para tomar nos trajeron. Espero no volver, al menos a este local. El de Cipo me gusta mucho más. No recomiendo este lugar...

No Volvería!!! Hice una reserva para 7 personas, la cual se nota que no tenían en cuenta, o no se acordaban porque nos dieron una mesa de madera tipo camping, la cual estaba toda rota, lo que hacía que desgarres los pantalones por los bancos astillados, no pusieron ni un mantel ni individuales lo cual con una mesa en ese estado deja mucho que desear (había mesas de otra clase pero ya ocupadas obviamente). Las mozas no tenían nada de experiencia en atención al público, por lo que le teníamos que marcar que traiga desde servilletas hasta para condimentar una ensalada, ese no sería el problema si se acercan a tu mesa a consultarte si necesitas algo, pero no, para cada cosa teníamos que esperar de 20 a 30 minutos, por lo que comiamos frío, o a destiempo del resto de la mesa, ya que las mozas ni miraban si necesitabas algo. Pero se ponían a limpiar una mesa entre TRES mozas!!! El lugar en que nos ubicaron no tenía luz, por lo que poco podías ver que cenabas. La comida no era de lo mejor y cara. La masa de mis sorrentinos no era buena calidad. El baño de damas, el inodoro no tenía agua, lo cual es un desastre!!!!!!! Cuando pagamos tuvimos que pedirle a la moza que nos trajera el vuelto porque pasaron 20 minutos sin novedades. El problema que noto es falta de organización con el personal y mantenimiento del lugar. Las mozas nuevas no tienen la culpa, no había quien supervise su trabajo y este atento a sí hacia falta algo a los clientes. Como verán esto hace que descarte este lugar para una cena fliar o de...