FEUER — Restaurant in Rosario

El otro día me pidieron que "vaya saliendo", como si fuera un niño Planet. Esto es lo que pasó conchas:

Me faltaba medio Julepe por tomar nomás, estaba sentado en la barra. Había entrado solo para eso, justo antes del cierre un Domingo.

Me lo sirvieron con un cuelgue de 10 minutos por hacer antes otro trago de cortesía para un sujeto amigo que también estaba sentado en la barra y tenía el privilegio, al parecer, de pedir directo. O sea, no pasó por caja. O sea, era amigo/socio/suscriptor de los bármanes.

Claro, esto generó 10 minutos de clientelismo, que fueron los que faltaron para terminar el Julepe que estaba a medio vaso. ¡Mejoren eso, che!

O si no, no vendan tragos cuando no hay más tiempo para terminarlos como se debe.

Mejor, dejen de practicar amiguismo. No es reclamar 10 minutos. Es reclamar que no fueron adultos, por la nostalgia del "vamos saliendo" del encargado de la puerta, a su posterior sugerencia de pasar el trago a un vaso de plástico. No da tener parado al señor al lado encima, como para que termine el trago pronto.

Finalmente, el sujeto que recibió su trago atropellador, vino a batir un comentario Menemista. Encima! Por lo que pintó careta a la experiencia.

La mùsica...

El lugar en si es lindo, pero el resto deja mucho que desear. Los tragos caros y de mala calidad. Un vodka económico y de mala calidad. Los platos también, muy caros y no los valen. Un sándwich de ternera desmenuzado $1800 y es re chiquito. Tacos de mar son dos tapas de empanadas con 2 langostinos y el resto es paltas $1400. $350 unos 10 gramos de mani, maíz y girasol.. todo junto en una muestra gratis!( Pero te cobran $350) Y muchísima demora con las entregas, tanto de la barra como la comida. Una pena, porque la estructura es poco común pero agradable.. sacando la parte de atrás que lo llaman "boliche" es muy bizarro. lo que divide el restaurante con la parte de atrás deja mucho q desear, tiene conexión con una cochera y pasas por cortinas de las cámaras de frío de las carnicerías ( las cortinas de plástico transparente). En Google y cuenta de instagram vez los platos y decís.. es la bomba!! Pero llegas al lugar y la carta no tiene variedad y todo es en sandwich.. no solo eso! Sino q las fotos q muestran es de la carta vieja!! Es una pena!! Pero la verdad no sé lo recomiendo a nadie. Es tiempo y...

Anoche compartimos con amigos una cena repleta de sabores. Dentro de las opciones de la carta, optamos por una variedad de tapas y platos chicos que prometían bastante, sin dudas. Las elecciones fueron: pinchos de alcaucil y brie, escalivada, falafel, pupusas y el ceviche filipino, para nosotros la estrella de los platos. Todas propuestas entre veggies y veganas, completamente deliciosas, en textura, sabores, condimentos y creatividad. Todo acompañado de un pan esponjoso con semillas de amapola que nos acompañó hasta el final, con la leche de tigre del ceviche. Para tomar, acompañamos con uno de los Malbec de la carta. El diseño, decoración y detalles del local, nos gustó mucho. La música y el volumen, acorde para poder conversar sin mayores inconvenientes. La clave roja de la iluminación y la buena atención del equipo del lugar, también se destacan. Un espacio al cual volver pronto para seguir disfrutando de...