Porter Brewery — Restaurant in San Miguel de Tucumán

Pese a que ya me llevé vaaaarias decepciones de este lugar, le seguía dando oportunidades. Comenzando, bajaron muchísimo la calidad de la comida y las cervezas, las porciones cada vez más minúsculas y cada vez más costosas. Un dato no menor, las papas fritas están hechas en aceite mezcla, por ejemplo. Se les siente en el sabor y el olor (spoiler alert: ni los pochoclos se salvan de este aceite). Tengo una triste anécdota para contar... una tarde vamos con una amiga a aprovechar el happy hour (19hs), comenzaron a atender recién a las 19:20 hasta que terminaron de acomodar las mesas y demás cosas. Tarde tucumana, calor insoportable y el porcentaje de humedad bastante alto (y a punto de llover, para colmo). Le dijimos en tres ocasiones a una de las chicas que nos atendió, si podíamos por lo menos ir al balcón dónde están los ventiladores porque estaba haciendo mucho calor y la respuesta fue la siguiente: "Primero se habilitan las mesas de la vereda, luego las del balcón y al último las del salón". Bien, perfecto hasta ahí. Pedimos unas pintas. A todo esto nosotras viendo cómo se empezaban a sentar las personas en el balcón, le volvemos a preguntar si podíamos cambiarnos para ese lugar y la respuesta fue "no depende de mí esa decisión". Seguía cayendo gente al baile y todos iban a parar al balcón, volvemos a preguntar y su respuesta esta vez fue "a ver, esperen que ya pregunto". Nunca más volvió. Pedimos la cuenta al primer mozo que vimos y nos fuimos. Una desatención tremenda la verdad, me fui bastante enojada. Fui muchas veces a este lugar y nunca me atendieron tan mal. 👎🏻Les juro que...

Tenía muy buena referencia del lugar y fuimos a conocer, como turista quede muy decepcionada, fuimos un grupo grande y nos tuvieron dando vueltas para darnos una mesa de muy mala gana, por lo visto no tenían ganas de atendernos. Cuando tomaron el pedido la mesera tuvo mala actitud, al llevar el pedido de bebidas no llego completo. Al ser un grupo pedimos diferentes platos y llegaron a destiempo, cubiertos nunca nos pusieron pese a que los pedimos, ni hablar de las servilletas que jamas aparecieron, con suerte habían platos. Pedimos jugos para acompañar la comida ya que las otras bebidas no llegaron. En varias ocasiones llamamos a la moza y nos ignoraron. La comida parecía ser recalentada y cocinada con aceite viejo. Los baños estaban asquerosamente sucios, conocí el cerro San Javier y resulta más pequeño que la montaña de papel higiénico que había en los sanitarios. Para terminar la noche, al pedir la cuenta nos cobraron cosas que no pedimos y cuando reclamamos al mozo se llevó el ticket para anularlo, no lo devolvieron ni descontaron el monto erróneo, después ni pudimos quejarnos porque desaparecieron todos los empleados de ese sector. Para nada...

Fui dos sábados seguidos, uno llegué a las 22 el otro a las 23.10, en ninguno tenían pochoclos (ya no les quedaba), semejante cervecería y no tenes con que acompañar una cerveza, así vayas temprano Un sábado no había lugar al llegar y en la entrada me dijeron que si decidía sentarme en la barra aunque se desocupe una mesa ya no podía cambiarme de lugar 😳 Un sábado probé la pizza de ternera, un pedacito en cada porción, esperaba muchísimo más, las papas con pedacitos de hamburguesa un 10 Al siguiente pedí hamburguesa, el pan demasiado tostado lo que la dejo súper seca y las papas no fueron mejores, que desilusión! Y como triste anécdota pedí sal y no tenían saleros así que me trajeron el paquete de Celusal 🤦 El baño no tenía ni jabón ni papel para lavarse las manos y para rematar cuando vas a pagar con QR salía un olor super desagradable de la estructura de hierro donde apoyan los vasos sucios Lo que destacó es la buena onda y atención de los chicos de la barra, todos excelentes pero el resto creo que ya se sienten demasiados confiados y han dejado decaer muchísimo los servicios en gral. No me quedo...