Debo aclarar que llegamos a las 16.30 a comer pero no puedo dejar de comentar mi experiencia junto a tres amigos y dos de nuestros hijos. Entramos hasta la barra y una moza nos preguntó qué queríamos y le respondimos llevar comida, ella nos dijo que no creía porque ya era la hora del te pero que igualmente iría a ver qué había en la cocina y al rato vino diciéndonos que solo había sandwichs de vacío a lo que le respondimos que queríamos 3, y rápidamente nos pidió que los esperemos afuera sabiendo que hacía un poco de frío porque bajaba el Sol. A los 25 minutos apareció otra moza que nos cobro ahí, nos entregó los sandwiches y nos fuimos. Por un lado opino que los sandwiches tenían bastante vacío y buen pan pero se notaba que eran las 5 pm porque la carne estaba negra y seca por haber estado horas de mas al fuego pero tenían muy rico gusto y además con hambre, se disfrutaron. Ahora bien vamos a lo importante. Yo, hace más de 23 años que voy a Uribe porque parte de mi vida la vivo en ese lugar tan mágico que vimos junto a mi familia, el gran crecimiento que continúa teniendo y parece no tener techo, siendo hoy en día una visita obligada en la provincia de Buenos Aires. Tuve el honor de comer en casi todos los restaurantes que hay y puedo decir que como en todos lados hay para todos los gustos. A Doña Helena fui cuando era una casa de té y quise ver qué ofrecían para comer. Lamentablemente debo remarcar que la moza que nos atendió no fue amable. Parecía como que nos quería sacar de encima. Que éramos un estorbo. No pido que me reciban por una sonrisa y los brazos abiertos pero si con lo esencial..., la amabilidad y la predisposición a ayudarnos. Eso no pasó.... Puedo entender, como local, que la moza no tuvo un buen día, que estaba muy cansada por las hora trabajadas sin parar, que a esa hora ya quería terminar y otras tantas situaciones pero el tema era que mis amigos visitaban Uribe por primera vez y sintieron lo mismo que yo. No se llevaron una buena sensación. Por suerte van a volver porque un amigo vive cerca y los llevaré a comer a algún lugar y a una hora más acorde. Perdón lo largo de mi opinión pero amo #uribelarrea y quiero que los visitantes disfruten y quien visita el pueblo por primera vez, quiera volver todas las veces que pueda. Saludos a todo el equipo de Doña Helena que seguro le pone mucha pasión y especialmente a esa moza que nos recibió, que no se su nombre. Que no es nada contra ella pero que sepa que hay pequeños gestos que acercan alejan al...
Read more5 estrellas son poco la verdad, le pondría 10. Procedo a contar: llegamos tipo 14:30hs con mi novio y con mucha hambre. Hicimos una fila porque había gente esperando pero en 5/10 min ya estábamos adentro. La recepcionista nos ubicó en el quincho pero hacía un poco de frío, yo quería estar adentro, y nos dijo que no había lugar pero que nos prendería la estufita. Había tanta gente que de pronto se olvidaron un poco de nosotros y cuando nos vinieron a tomar el pedido reclamé por la estufita. Nada, pasó un par de minutos y nadie venía a prenderla. Pero de pronto apareció la recepcionista con una manta, me abrigó ella con la misma y nos dijo que se había liberado una mesa adentro, que vayamos ahí. La mesita armada, prolijita y perfecta. Allí nos atendió otra mesera que pidió que le recordáramos el pedido. En menos de 10 minutos ya estábamos con nuestros platos, bebida y pancito con dip de berenjenas en escabeche. A todo esto, soy vegana (si, vegana en una parrilla, porque mi novio no es vegano y bueno, vivimos en sociedad gente, normalicemos esto). Yo no les puedo contar lo rico que estaba la opción vegana: un matambre de seitan (churrasco de proteína de gluten) a la pizza, si, con quesito vegano y todo. Dios mío… espectacular!! Nos fuimos muy contentos con mi novio, que por cierto también disfrutó del sabor que tenía lo que se pidió. Volveremos ❤️ Y mis felicitaciones y agradecimiento a los empleados del lugar, fueron...
Read moreLlegamos a Uribelarrea el domingo de pascua 2023 al mediodía. Paramos a comer en Doña Helena. Nos pareció un lindo lugar ya que era al aire libre. Por suerte no nos equivocamos. Pedimos el costillar al asador, una porción de chinchulines, una ensalada de rucula y parmesano. Para tomar vino de la casa y agua con gas. La costillas es una locura!!!! De verdad que dan ganas de agarrarla con la mano. De hecho lo hice jajajaja y ahí esta la foto. Los chinchus para mi gusto le faltaban un poquito, no me gustan gomosos, estaban cocidos pero no al punto que a mi me agrada. La ensalada bien, parecía rucula recién cortada de la quinta del fondo, hojas grandes y carnosas más una buena porción se parmesano. Buena atención pude la camarera, aunque nos pareció un poquito dispersa comprensible en una fecha de feriado largo. Así que ninguna queja. Leí por ahí algunos comentarios del día sábado que esperaban una hora y media con cola hasta la esquina!!! Y ...si... que esperabas? Es muy sencillo, yo en particular no me gusta esperar para comer, si hay mucha cola me voy a otro lado, si queres esperar una hora y media haciendo cola para comer tenes que saber que además vas a esperar también con la atención porque obviamente el restaurante está colapsado así que no te quejes si esperaste, vos decidiste esperar. Resumiendo. Buena atención, buena comida, lindo lugar (pet friendly) y el costo acorde a todo eso....
Read more