La Caraway — Restaurant in Guayaquil

El día sábado 28-01-23 visitamos el lugar alrededor de las 2 pm. Había mesas disponibles, vamos a lo que vinimos:

En cuanto al AMBIENTE: El lugar es acogedor, tiene buena oxigenación y pese a que es un lugar con cocina parcialmente expuesta, no se pegan los olores en la ropa. Baños ok impecables. Hay parqueo. No obstante, luego de un rato, parecía que había un olor a plátano excesivamente maduro que por ratos se volvía incómodo.

En cuanto a la ATENCIÓN: MUY BUENA! La buena acogida se percibe desde el guardia que te recibe hasta que entras y te ubican en una mesa; las señoritas han sido muy bien capacitadas, conocen el menú, hacen ciertas recomendaciones y son muy solícitas, inclusive hasta para llevar la cuenta.

En cuanto a la COMIDA: Aquí es donde me quedan debiendo en ciertas cosas: los platos en líneas generales se ven grandísimos, enormes, pero la mayor parte de los apanados son en su mayor parte apanadura y poco contenido; el efecto visual es muy bueno, pero voy a comer mariscos, no apanadura y no sé si por eso le resta un poco de sal a la comida que preparan. Sucedió con los camarones apanados, el mix de mariscos y el ceviche; o sea 3 platos con esa constante. De manera adicional: la salsa golf debe ser opcional, no regla sine qua non.

Algo que recalcar y que DEBEN CORREGIR: El personal que entre a cocina o en el área de montado de platos DEBE USAR gorros o cofias para evitar contaminación cruzada. Había un flaco con moño y barba en el área del montado de platos, y casualmente encontré un pelo en mi plato; llamé a la señorita, le hice la observación pero para no hacer más grande el asunto, lo retiré y seguí comiendo. Pero qué me hace pensar que el flaco que estaba ahí se pudo haber rascado la cabeza y salió un cabello que se depositó en mi plato.

Cositas como estas bajan la apreciación que uno pueda tener sobre el restaurante que, en líneas generales, está bien. Hay cositas que...

Hace 2 años fui y los sabores están increíbles además de unos precios justos, esta vez que fui, no sé si fue por la hora (fui martes, 4pm) el lugar estaba vacío, fue un buen indicador para nosotros porque teníamos un poco de apuro por el cierre del local a las 6pm. Pedimos un ceviche manaba, un ceviche guayaco de pescado y camarón, un corviche, cocolón y 2 colas. Ceviche guayaco de pescado y camarón: el camarón estaba sobre cocinado, estaba cauchoso y no tenía mucho sabor, y el pescado sabía muy mariscoso, no sé si fue por la elección del pescado (que nunca supe cuál era pero hay pescados que saben más mariscosos y otros menos) pero personalmente este pescado sabía muy mariscoso, sospecho que estaba guardado o que no era tan fresco, los cortes del pescado eran desiguales por lo que algunos pedazos estaban bien cocinados y otros crudos por completo, en algunos bordes del pescado estaba amarillento por lo que no me acabé el ceviche, había muchísima cebolla picada, y el agua del ceviche no tenía sabor, lo cual hizo que el sabor de la cebolla sea súper fuerte. Corviche: el corviche estuvo rico, se sentía que la fritura no era fresca pero sabía bien. Los chifles recién hechos o calientes, pero estuvieron deliciosos. Para las bebidas solo cuentan con Pepsi y toda la línea de...

Desde que llegué, la mala cara del guardia y los meseros me desanimó totalmente. Esperamos al resto de mi familia, éramos nueve y resulta que adentro estaba lleno y afuera hacía demasiado calor, no eran sillas sino bancos, por lo tanto, no tenían respaldar, les pedí de favor que si se desocupaba algo adentro me avisaran y de mala gana dijeron "bueno". Sin embargo, jamás lo hicieron. Como mi hija moría de calor, yo paseaba con ella adentro y me di cuenta de una mesa desocupada y llamé a mi flia. Tuvimos que decirle a DOS meseros que ya estábamos listos para ordenar para que se acercaran a la mesa, pésimo servicio al cliente. Cuando fui a buscar al mesero para pedirle una cuchara, pues contó mal, le estaba haciendo una trenza a su compañera. De paso como mi bebé no come mariscos le llevé su propia comida con su cuchara pequeñita; pero cuando recogieron las cosas se la llevaron. Lo único bueno que puedo acotar es que sirvieron rápido. Porque mi carajazo de mariscos tenía un sabor medio agrio y los carapachos tenían maduro y muy poco cangrejo, los ceviches de mi hermana y mis primos estaban pasables, pero la harina que cubría lo frito del calamar tenía un aliño demasiado salado y mi esposo le sacó todo eso. Solo la cazuela del esposo de mi prima estaba buena. No volveré, pésima...