Barracruda Coyoacán — Restaurant in Mexico City

Anteriormente habíamos ido y no nos había ido tan mal…

Esta vez fue la última que lo hacemos. Llegamos alrededor de las 6:00pm y no tenían tanta gente como suelen hacerlo a las 2:00… Le pido a la hostess (Itzel) si puede darnos mesa para 2 personas y ella primero terminó de contarle a su compañera el chisme y después atendernos, ella definitivamente no se molestó a saludar o a ayudar, sino fue la otra chica que se encontraba de espaldas las que nos recibió y atendió a la solicitud. Itzel agarra y nos lleva a la mesa más espantosa del lugar, hasta el rincón a lado de los juegos de niños a lo que le dijimos que no queríamos esa mesa, la señorita no sé si no le guste su trabajo pero la forma en cómo literalmente hizo “rolling eyes” me queda claro que odia su trabajo. Le pedimos una mesa de las que estaban abajo y contestó “pero esas son de 6 personas” y evidentemente la gente ya no llegaba a esa hora, al contrario se retiraban, pues ella con su cara nos deja las cartas sobre la mesa y se retira (ella muy indignada porque no le aceptamos la mesa que ella sugería).

Pedimos 2 tacos rosaritos (los que nunca fallan) y nos los llevaron sin frijoles, como mencioné este lugar ya lo habíamos frecuentado y pedimos las opciones seguras y rápidas porque moríamos de hambre. La verdad es que dejamos pasar que no tuvieran frijoles y desafortunadamente si hace TODA la diferencia, pero bueno. Para nuestro plato fuerte pedimos un pulpo al chimichurri que de verdad ha sido el más insípido y cero logrado. Terminé por no comerlo y pedir otra cosa.

El mesero se portó amable una vez se dio cuenta que su bienvenida fue preguntarnos que cuántas personas íbamos a hacer. Cuando le menciono que solo 2, se quedó pensando y pasó a disculparse y a presentarse por su nombre (Daniel) la verdad la compuso bien y estuvo al pendiente de todas las necesidades aunque literalmente cocina falló en todo.

Mi recomendación es que si la chica de recepción te va a tratar así a la llegada, no esperen mucho del lugar. La hostess debería de ser la primera y última impresión del cliente. Y pues me queda claro que aquí el chisme y las compañeras van primero...

⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️ Barracruda Coyoacán . Un lugar donde la excelencia y la calidez se encuentran.

Visitar Barracruda Coyoacán es vivir una experiencia que combina sabor, servicio y armonía en cada detalle. Desde la llegada, la atención de Roberto oliva, Carlos y Liz marca la diferencia: atentos, amables y con una genuina pasión por lo que hacen. Su trato refleja la esencia del lugar ,profesionalismo, hospitalidad y cuidado por el cliente.

La cocina, simplemente excepcional. Cada platillo sorprende por su equilibrio, frescura y presentación impecable. Se nota la calidad de los ingredientes y el esmero del equipo de cocina.

Un detalle que enamora aún más son las adiciones: tostadas, galletas y una canasta con una gran variedad de salsas, entre las cuales 6 son hechas por la casa, todas de sabor excepcional. Cada elemento complementa la comida y demuestra la creatividad y dedicación de la cocina.

El ambiente del restaurante es elegante, relajado y cuidadosamente diseñado. Las pantallas estratégicamente colocadas y la pantalla gigante hacen que sea ideal para convivios o para disfrutar la emoción de algún deporte con amigos y familia. La música jovial acompaña perfectamente, creando un ambiente acogedor que invita a quedarse y disfrutar cada momento.

El lugar es también perfecto para familias, con un espacio dedicado a los niños, y para cualquier ocasión: desde una comida de trabajo hasta una tarde con amigos. Incluso los detalles más pequeños están cuidados con esmero: desde la recepción hasta la limpieza impecable de los baños, el aroma agradable y la disposición de cada elemento reflejan un estándar de calidad sobresaliente.

Mi felicitación especial va al servicio brindado por Roberto Oliva, Carlos y Liz, a la hospitalidad del equipo y a la administradora del lugar, cuyo liderazgo y cuidado se reflejan en la armonía del personal y la excelencia de cada aspecto del servicio.

Barracruda Coyoacán no solo conquista por su gastronomía, sino también por su ambiente, su atención y su capacidad de crear experiencias inolvidables. Un lugar al que uno llega por curiosidad y al que siempre quiere...

Tiene un estilo casual, la comida es bastante rica y variada en cuanto cosas frías y calientes, te reciben con un consomé de camarón muy rico. Las micheladas son deliciosas recomiendo la “Kraken”. Las tostadas son sabrosas aunque comparadas con otros restaurantes de mariscos como el “Campomar” pequeñas, de cocina caliente recomiendo el “Pulpo atropellado” que solo está en la carta digital, a diferencia de el de “Los Arcos” este viene entero y es a la parrilla. En cuanto a la atención del personal es muy variada y depende de la afluencia del restaurante lo cual considero no es correcto ya aunque se entiende que están en una situación depende estrés pero nunca deben de perder la atención y respeto por el cliente independientemente del tiempo en que se puedan tardar, si está muy lleno hay un punto en que no tienes mesero en específico, hubo uno al que le pedí la carta y me preguntó que que íbamos a pedir a lo cual obviamente le dije que no sabíamos pues por eso le pedía la carta ya que aún no la traían después de un buen rato 😒 trajo una, le pedí otra, se molestó se me quedó viendo sin decir nada y se fue lo cual fue muy grosero, creo que no cuentan con muchas cartas pero se puede comunicar, le comenté a otro chico y muy amablemente nos acercó otra carta de inmediato y nos comentó del menú con código. Otra cosa que no me pareció para nada es que al momento de cobrar no preguntaron el porcentaje de propina y se cobraron el 15% a su consideración monto que yo no iba dejar. Por ultimo las chicas de la recepción son súper apáticas parece que te hacen un favor al apuntarte en la lista, se la pasan comiendo las degustaciones que son para los clientes, cuando le hablan al comensal lo hacen súper bajito, tiene cero sentido de servicio y carisma, sus funciones son muy simples y se ven igual de estresadas que...