La Parrilla de Fer — Restaurant in Mexico City

9 de febrero, 2025 El lugar es algo amplio y también hay mesas sobre la acera. Hay música de fondo y televisiones en la que nos tocó la transmisión de fútbol americano. La atención fue amable y rápida, la mesera fue muy atenta pese a mis múltiples peticiones al igual que otro de los meseros. Llegamos a eso de las 5:30 y pedi un mole de olla al cual no le encontré las bolitas de masa, con muy buen sabor pero las verduras cortadas demasiado grandes y para mi gusto les falto un poco más de coser, una buena porción de carne (pedi chambarete aunque también podrías escoger entre otras dos piezas) la verdad estaba muy buena. Dan tortillas hechas a mano aunque no sé si las usan para todo los tacos pues pregunté por una quesabirria y la mesera me dijo que la hacían con tortilla normal de masa pues le pregunté por las que nos trajo y dijo que no eran de esas. Un taco de ribeye muy bueno. El agua "fresca" de Jamaica, horchata y tamarindo no son naturales, la de tamarindo buena, y las aguas "frutales" son hechas al momento, la de guayaba estaba bien preparada. A la mesera le pedí hielos, le hice preguntas sobre ciertos platillos y siempre fue muy amable y nos atendió rápido. Pedí pastel de la casa y un capuchino ambos estaban bastante bien. Por cierto colocan manteles de papel que no tengo problema pero no ponen cubiertos, tuve que pedir cuchillo y tenedor, y las aguas las dan en vasos de plástico o unicel, por lo que ví solo las bebidas y cervezas las dan en vasos de cristal (muy mal). Los baños son reducidos y el lavamanos está fuera enfrente de donde el refrigerador de postres y dónde preparan las bebidas. No están mugrosos pero en general les falta un poco más de limpieza en los pisos. Los precios en algunos platillos los siento que son algo excesivo. Tienes que poner atención porque nosotros pedimos un mole de olla grande y uno chico y nos trajeron ambos grandes, y al pedir la cuenta efectivamente nos cobraron uno chico pero el pastel no lo cobraron como si hubiera sido de los otros y no el de la casa. Hay cosas que mejorar pero en general bastante pasables sobre todo por la amplitud de platillos...

Es un excelente lugar para la zona, es una laguna enmedio del desierto.

Buena relación porcion/precio. Las papitas a la francesa están deliciosas, lo más rico del lugar.

Me costó un poco de trabajo esta reseña, ya que el lugar en general está bonito, pero si lo vez a detalle, tiene sus cosas, así que dividimí mis comentarios en 3: alimentos, servicio y lugar.

Los alimentos tienen buena presentación y son excelentes porciones, ¡pero! El sabor deja mucho qué desear, como que les hace falta un poco de más sazón. Pedí una ensalada y aderezo de fresa que la verdad no me gustó, sabía a boing de fresa y estaba muy muy dulce. Lo más rico fueron las papas a la francesa.

Servicio. Los muchachos muy atentos y amables, todos uniformados y bien presentados, lo único es que me tocó un partido de fútbol y de pronto como que estaban más atentos al partido que a las personas e incluso les ganaba la emoción y hasta gritaban. Algo que les resta puntos, es que el parrillero les gritaba que ya estaba la orden y todos los comenzales podíamos escucharlo.

Sobre el lugar, desde afuera se ve que es algo muy nice para la zona, las luces Led, las mesitas, las velitas en cada mesa, incluso podrías decir que es excelente para una cita, se ve romántico. Pero cuando entras, se ve como que hay 2 conceptos, sí el romántico y sofisticado, pero chocas con lo deportivo, como un bar sport.

Incluso en la comida puedes notar ambos conceptos, una ensalada súper bien presentada y muy gourmet como lo anuncian en la carta y por otro lado, una hamburguesa en un plato genérico y con su plástico, presentada como las hamburguesas del puesto de la esquina.

Una pared es un mural, la pintaron como si fueran barricas de vino, pero la otra pared, tiene lonas de carreras y en la pantalla se miraba un partido de fútbol, son ahí las inconsistencias que sacan de onda, yo no iría para una cita romántica pero a lo mejor sí con amigos.

Tiene muchas detalles por mejorar el lugar pero tiene mucho mérito por ser lo que es en la zona donde está, definitivamente es recomendable ir a vivir la...

Fui porque había pasado varias veces por ahí y parecía un lugar interesante: un restaurante de cortes, meseros con buen uniforme, el fuego y la parrilla. Luego, leí las reseñas en Google y pintaba bien la cosa. Sin embargo, lo que me encontré me decepcionó.

El servicio es malo. Nos tuvieron más de 20 min esperando a darnos mesa cuando había mesas desocupadas, otro tiempo más en lo que nos tomaron la orden; la comida tardó y los meseros tardaron en recoger el servicio cuando terminamos.

La comida es mediocre, para el costo y el concepto, te dan cortes que no son cortes; el chamorro esta seco, el flan era una desgracia, no tenía consistencia ni sabor; el café de olla sobre recalentado. El menú no tiene claridad, ofrece de todo, desde cabrito hasta pozole; aunque en realidad es una taquería disfrazada de aspiración. Abarca mucho, aprieta poco. Gastamos al rededor de $800 para dos personas con sólo bebidas, entradas y dos platos y ninguno con buen sabor. Juzgue usted. Al final, si el.psgo es con tarjeta te harán levantarte a pagar a una terminal porque no tienen el servicio a la mesa.

Por último creo que lo mejor que tiene es el lugar: cuidado, aseado, aunque con muchas entradas de aire, los baños limpios y buen mobiliario. Lo malo es que tienen muy alto el volumen y no se puede platicar. Parece más el ambiente de un bar deportivo que el de un restaurante.

En fin, creo que pudo haber sido una buena experiencia porque es un restaurante que tiene todo para hacer buena comida, pero se conforman con ser una taquería disfrazada...