Bryan's — Restaurant in Mérida

A late lunch, after having driven too many times to count. It has a nice atmosphere, music level allows you to hold a conversation. I had the Short Ribs, the wife had the Fish Special. The ribs were nicely done and tender, good flavor and a good portion size. The fish was deboned, nicely done and good flavor with a good portion size. 10 months later, we stopped in for a bite to eat. I ordered the Fettuccine with Chicken the ordered a Burger. The restuarant was not over crowded, both orders arrived fairly quickly, the Burger was okay. The Fettuccine had problems, most of noodles were stuck together the flavor was a bit off. I was going to just leave it, the wife spoke with the manager, it quickly replaced. The Fettuccine came as should have, the a very fine ground parmasian on top this time. The flavor was better. After few minutes we asked for the check from the hostess. The waiter brought the check and then disappeared. After trying flag people scurrying by, the said go to the car I will wait. On my way told the manager the was waiting for the disappeared waiter. The manager took care of the cash. Service took a...

I went back to Bryans specifically for their steak salad which is delicious. The first time I had it, it was perfect. Today it had way way too much dressing. My friend who had a caesar salad also mentioned that the salad was over dressed and she wished she had asked for dressing on the side.. I would like to suggest that the chef have a standard amount of dressing and ladles are bought for that measurement. Since the first salad that I had at Bryan's was perfection, I did not think to ask for the salad to be lightly dressed. This seems to happen often here in Merida(not just Bryan's) where someone thinks lots of salad dressing pooling in the bowl is better than just lightly coating the lettuce and other ingredients. It basically turns a wonderful concoction into a oily mess

We did not complain at the time as it was not a deal breaker and would have required the kitchen to throw away an otherwise nice salad but it is something to address . In some cases...

El lugar es una belleza, muebles y decoración de primera. Ni hablar. La atención es al estilo moderno, reciente, “New Age”.

La oferta de alimentos es rica en sabor, pero pobre en calidad nutritiva.

Es pobre porque no ofrece NADA que no esté hecho a base de cremas lácteas o quesos, más los pedazos tradicionales de carnes de todo tipo de animales (de tierra o mar). Tal parece que los chefs solo aprenden a hacer que las cosas sepan bien porque tienen abundante crema y queso, con trocitos de carne y algunas mezcla de huevo elegante.

Existe la creencia que ofrecer “clara de huevo” es “saludable”. La realidad es que todo tipo de proteína animal PUEDE (y lo hará con el paso del tiempo) desencadenar enfermedades crónicas que se achacan a la herencia del individuo, cuando en realidad solo surgen cuando se la combinación de proteína animal + tendencia hereditaria.

La proteína —que solo es necesaria nutricionalmente a razón de 8 gramos por cada kilogramo de peso del individuo que está contento con su peso— puede ofrecerse en la forma de legumbres (frijol, lentejas); el tofu puede combinarse con cientos de vegetales. En tanto no se coma grasa y proteína de origen animal, el efecto de los fritos no es de daño (en todo casi, sí provee mucha caloría por gramo).

Por desgracia, en este bello lugar las cosas solo se preparan para quienes no han aprendido o entendido la importancia de la nutrición en la salud del individuo, en la salud del planeta y en la salud mental de quienes deben participar en actos violentos en contra de animales que, finalmente, NO SON necesarios para la alimentación humana, pero sí dañinos.

Ya es hora de que en forma activa estos establecimientos que tienen grandes nombres entre la gente que los visita, ofrezcan platillos sabrosos libres de lácteos, huevos o carnes de mar o tierra. La proteína se toma de frijoles, lenteja, aguacates, nueces de todos tipos; las verduras deben aprenderse a cocinar y siempre acompañarse de aguacate o cremas de cacahuate. Los chefs deben aprender, obligadamente, a cocinar platillos sabrosos para todos, sin requerir cremas o quesos, huevo o carnes.

Lo pueden hacer y la oferta que logren se convertirá en mayor salud para quienes los visiten. Algunas personas insistirán en comer según las costumbres vulgares establecidas; no se trata de “educar”, sino de OFRECER las alternativas para quienes ya entienden la diferencia y han aceptado que es MEJOR para todos la opción de comer a base solamente lo que se origina...