Mariscos La Anacua — Restaurant in Nuevo León

Por dónde empezar con esta experiencia desagradable, primero que nada lo primero que ves al entrar al establecimiento es que se están peleando porque te sientes en una de las mesas de los meseros , en mi caso la primera vez que vine fue una experiencia no agradable mas no fue razon para dejar de venir , mi familia y yo asistimos hoy en la tarde otra vez , mi padre recordó el servicio destacable del señor franco y una salsa habanera que le fascinó desde la primera vez. Mas no sabíamos que hoy iba a ser todo diferente , mi padre pidió un Clamato el cual llegó con una gran desagradable sorpresa un vidrio de considerable tamaño el cual terminó masticando y escupiendo , cuando le preguntamos al mesero no supo responder y solamente se disculpó. Después de eso nos trajeron el aguachile verde que estaba insípido con sabor a agua de llave y le faltaba limón , los camarones contaban con una textura desagradable , gomosa y aguada se notaba que carecían de frescura y hasta pudiera decir que estaba viejo. El camarón se siente como si hubiera llegado a grados más altos que el ambiente y se congeló otra vez lo que hizo que se estropeara su textura. Después llegaron los platos principales , pedimos dos pastas anacua que sinceramente eran repugnantes , incomibles una mezcla de dos tipos de pasta recocidas y una crema sin sabor que sabía a agua de llave , adentro tenía unos camarones con un sabor asqueroso. El plato venía desbordado de “salsa de crema” venía con tanta salsa que el mesero literalmente venía con su dedo adentro de la pasta. El mesero retiró las dos pastas de la cuenta lo cual se agradece mas creo que no compensa con la desagradable experiencia. De verdad ahórrense venir no vale absolutamente nada la pena y en general esta cadena va en decadencia constante al no constar con gerente y no tener a quien referirse en cuanto a la evaluación de tu experiencia. A los directivos no les interesa su restaurante y se nota en...

Yo no soy una persona que prefiera mariscos al contrario de mi esposa y mis hijos. Habiendo dicho esto, soy un asistente regular a este restaurant donde en lo personal me gusta comer un gran cóctel de camarones con galletas saladas o bien un buen plato de camarones a la diabla o al mojo de ajo. Hay una buena variedad de como se sirven los camarones que fue lo que mi esposa consumió además de un caldo de camarón, mi hijo se fue por un filete de Huachinango bien servido. Ambos platillos acompañados de arroz y guarnición. Todo muy delicioso como siempre. Te reciben con unas tostadas de cortesía a la que le puedes poner salsas para botanear mientras llega la comida. La cerveza bien fría servida en tarros congelados es un plus. El tamaño de las porciones es suficiente para quedar más que satisfecho. La calidad de la comida y el sabor lo hace merecedor de las cinco estrellas y es lo que nos hace volver. La atención del personal muy amable y diligente nunca nos faltó bebida. El precio es adecuado al consumo sin resultar caro. El local muy limpio y espacioso con aire acondicionado. Quizá lo único criticable es el estacionamiento que puede ser un poco insuficiente cuando hay muchos comenzales. Fuimos en sábado por la tarde después...

Una lástima. Se ha deteriorado mucho el servicio y la calidad de la comida. Probablemente por la pandemia. Muy poca gente pero el servicio es lento. La mariscada es muy pequeña, el filete de pescado estaba tan delgado que estaba duro por lo tostado y las papas fritas llegaron frias. La pasta con camarones no es como en otras sucursales: la pasta muy corta (partida de mas) el fetuchini deberia ser largo pero lo sirven en pedacitos. Poco camaron, muchos champiñones y la salsa con muy diluida. De esos platillos que no te acabas. Nos trajeron los platos sin cubiertos, no hay limones si no los pides, nostros mismos tuvimos que limpiar la mesa porque aunque parecía limpia la mesa y sillas estaban pegajosas. Igual las sillas para niños muy sucias que las tuvimos que limpiar antes de usarlas. Parece broma pero el colmo es que despues de todo lo anterior vas al baño a lavarte las manos y el piso esta totalmente encharcado por alguna tuberia en reparación. Y no habia con que secarse las manos. En general una pésima experiencia, incómoda y diferente de lo que esperaba. En otra sucursal la experiencia habia sido muy buena, pero todo lo...