Quiriego Restaurante — Restaurant in Sonora

Terrible experience. We waited a long time to be seated, even overlooked by a party of the same size who got there before us. My partner asked for a complimentary purse hanger that never got there. Drinks took forever to arrive which should’ve been our first clue that the food was going to take even longer! We waited over an hour for our food which was a very uncomplicated order and nothing custom (we had an omelette and a quesabirria, both from the menu). At one point we asked to have our order canceled so we could go elsewhere and the waitstaff came over and said it would be on the house. It did end up being on the house but then we overheard them talking about the fact they comped our meal! Overall a very bad experience, they never checked on us, food took way too long and then to have them talking about us really sealed the deal for us. Would not...

Muy elegante, muy bonito, muy cariñoso $, $$$ Hablan de cocina rústica pero el lugar no tiene nada de rústico ni muchos de sus platos tampoco lo son. 😝 Hicimos reservacion previa, hay valet parking. Los meseros andan vestidos de negro con un mandil de cuero o imitación de cuero tipo de carnicero medieval. Me impresionaron, da personalidad al lugar y te hace pensar que hay mucha carne roja en el menú. Pero no, esta relativamente variado, además de carne roja de res y puerco, hay pollo, pescados y mariscos aunque en menor proporción. Si es cocina rústica, pues esperas arroz y cocidos tradicionales. Pero sólo vi unas cremas. Hay mucho de cocina italiana como pizzas, pastas con carne roja o camarones y calzones, que es como el pan de pizza pero hecho empanada. Pedimos 2 y es muchisimo pan (impresiona el tamaño), poco relleno, sin un gran sabor como para comertelo todo. Como que me quedaron a deber con este platillo... Hay bebidas variadas, algunas muy exóticas al igual que el vaso donde las sirven. Pedí una pasta fetuchini con albóndigas y si estaba muy bien servida y muy rica. También un plato de pollo al grill, que de grill nada tenía, uno espera la marcas del asador en la pieza y no, se veía más bien cocinado y horneado, jugoso. Venía con verduras y una salsa de queso... Mi marido se quejó que todo tenía queso. Le dieron la salsa de queso aparte como aderezo. Las ensaladas bien. Un plato de filete de pescado que se pidió, era solo un centro en el plato, muy poquito. Y era toooodooo, sin verduras, sin puré, solo queso, salsa de queso para todo y todos. Cuando vas a lo rústico de los pueblos te sirven sendas porciones, aquí también deberían servir más, a mi poco o mucho criterio. 🤷🏻‍♀️ Al final, llevamos un pastel ya que celebrabamos un cumpleaños y me dice el mesero discretamente. Que si deseamos partir el pastel, ya sea ellos o nosotros, había un cobro de $500. Queee queeeeeé 😳 ni que fuera descorche de botella! Ya les habíamos consumido más de $3600, pedían otros $500 y aún pediríamos más bebidas como café y sodas. Así que la familia se molestó con este detallito y decidimos ir a partir el pastel a otro lado menos fifi. Nos encantó la remodelacion que hicieron de la casa del Presidente Álvaro Obregón. Les quedó a todo lujo, el hotel y restaurant. De lo histórico no quedó nada. Ni una plaquita que dijera algo de la casa y la familia Obregón. Espero disfruten sus alimentos en el Quiriego. Sigan cuidándose en esta epidemia. Siganme para conocer más lugares juntos. Ya casi llego a los 12 millones de vistas 👼🏻💪🏽...

Tuve oportunidad de desayunar ayer en Quiriego antes de regresar a Cancún.

¡Me encantó! y no solo por que todo estuvo delicioso. Sino porque fue toda una experiencia. Todos fueron muy amables, desde que me baje del uber en cuanto vieron que traía maleta el chico del valet parking me ayudó a llevarla hasta adentro, la hostess muy amable, pedí una mesa para una persona, y, a diferencia de otros lugares eso no influyo en la mesa que me dieron. Le dije a la hostess que quería una mesa bonita en exterior y así fue me dio una mesa con una vista muy linda.

Después llegó Emiliano, quien me atendió de una manera más allá de excelente. Me ayudó con recomendaciones y me explicó los platillos pero todo lo sentí muy natural, porque me ha pasado que cuando pido recomendaciones en otros lugares aprovechan para querer venderte los platos más caros.

Elegí la quesabirria, una excelente recomendación, fue una delicia. No quería irme sin probar un postre, por lo que pedí que me recomendaran uno. Emiliano me animo a ir a ver la vitrina de postres en donde me explicó de qué era cada uno, y además le pidió a Majo la repostera que me ayudará a recomendarme alguno. Estaba decidiendo entre la tarta de plátano, pastel de chocolate y tarta de manzana pero ganó la tarta de plátano con 4 votos. Y cuando la probé entendí porque todos votaron por ella.

Me fui con un gran sabor de boca, cerré con broche de oro visitando este lugar. Gracias Quiriego por la gran...