El restaurante tiene unas estupendas vistas al mar, tanto desde el interior como desde la terraza.
Fuimos a comer el día 25 de julio y probablemente no esperaban tantos clientes.
Elegimos este restaurante por las vistas y porque es nuevo y está bien puesto, al final del paseo, una zona tranquila y donde se puede aparcar. Ya había comido en otras ocasiones y ya me había parecido algo lento y caro, con precios equiparables a los de un buen restaurante de Vigo. Hacía tanto viento que no pudimos comer en la terraza pero nos ofrecieron una mesa en el interior y estuvimos cómodos.
Los entrantes, unas aceitunas y unos trocitos de queso, con un buen aceite de oliva, los sirvieron al momento. También una botella de un buen Douro tinto, Dúas Quintas a 22 euros botella. Pedimos un entrante, una ración de un pescado tipo pez espada a la plancha, un sargo, sardinas asadas y un naco de lombo de vitela. Este último por sugerencia de la camarera, el de la carta que costaba unos 22 euros, porque el naco que venía en las sugerencias del día, por unos 16 euros, nos dijo que era de otra parte de la vaca y más duro.
A partir de ahí, con el restaurante con todas las mesas ocupadas, mucho descontrol. Una hora más tarde aún no habían servido ni las sardinas que pedimos como uno de los primeros platos junto con la crema de marisco. Muy poco personal en la cocina y los camareros desbordados pese a no ser un comedor grande.
Al fin trajeron la comida: el sargo, pequeño y muy hecho, no justificaba su precio; el pez espada con patata cocida, una ración razonable; el naco con piña y patatas bastante seco, probablemente por el tiempo que llevaba hecho y tratar de mantenerlo caliente; y de último las sardinas, pese a recordarle de nuevo a otro camarero que era un primer plato a compartir.
Con tanta espera pedimos media botella más del mismo vino, igual de bueno y de caliente, pero que pudimos bajar a 16 o 18 grados, las dos veces, con un enfriador facilitado por la camarera.
El naco seco y el sargo pequeño y demasiado pasado, acabaron con cualquier posibilidad de salvar la comida, aún en un lugar tan agradable y con esas bonitas vistas.
El pudin-flan y el café estaban bien y los disfrutamos, igual que el vino. No se a lo que ascendió la cuenta total, porque invitaron los amigos.
Tuvieron un mal día y había poco personal en cocina, pero creo que necesitan mejorar la atención y servir antes la comida si quieren que la gente repita o queda medianamente satisfecha.
Es posible que vuelva otra vez, pero me...
Read moreAmazing food. Traditional Portuguese dishes that even people not familiar with the cuisine will like.
We have ordered take-away several times when hosting dinner parties at home. You pick up the food and you return the dirty dishes. No need to clean. Amazing service
As for the food, I would very much recommend the Picanha with pineapple. The meat is ALWAYS tender and amazingly seasoned. I come back every time I’m in Moledo
On a last note, the view to the sea...
Read moreO sujeito que se encontra no balcão foi deseducado e discriminativo por me ver a consultar a carta que se encontra exposta no esterior e referiu que não era "um tasco" de forma despresível. Vindo de um sujeito que tem mal aspecto, mostrando logo um fraco cartão de visita do estabelecimento. Senti-me insultada, solicitei o livro de reclamações e recusou-se a me fornecer, sendo um direito que tenho em pedir e um dever que ele tem em me dar, continuando arrogante e mal educado. Saiu a cozinheira e falou para mim no mesmo tom. O livro de reclamaçoes finalmente me foi fornecido porque ameacei que chamaria a policia caso não me apresentacem o mesmo. Recusaram-se a me emprestar uma caneta para escrever, foi um cliente da esplanada que me emprestou uma. A funcionaria mais jovem pediu-me desculpas e educadamente me implorou para não escrever a queixa. É de lamentar toda esta situação que é vergonhosa para o estabelecimento, eu não voltarei aqui nem recomendo a ninguém. Com atitudes destas é mesmo um "tasco". Com certeza que vou fazer...
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