Restaurante Teresinha

Fuimos al mercado de Valença y vinimos a este restaurante a comer por recomendación y las buenas valoraciones.

Se encuentra en una zona de fácil aparcamiento y es un local relativamente grande y acogedor, con una pequeña terraza acristalada.

Acudimos a las 13:00 y había cola para coger mesa, pero no tuvimos problema en esperar ya que queríamos probar este sitio.

Después de unos 20-25 minutos, pudimos sentarnos. El local estaba abarrotado y parece que iban justo de personal, ya que tuvimos que esperar unos 20 minutos después de pedir para que nos sirvieran la bebida y otros 20-25 más hasta que vino la comida. Esto es, bajo mi punto de vista, el mayor punto de mejora. El trato del personal fue muy agradable en todo momento.

Pedimos agua, picaña a la brasa para 2 y una tarta de galleta de postre. La picaña venía con una generosa ración de patatas paja caseras y con un bol de arroz blanco y otro de frijoles. Estaba todo realmente bueno, nos fuimos de allí con muy buen sabor de boca (nunca mejor dicho).

En total pagamos 36 €, que considero es un buen precio.

Sin duda, volveremos cuando vayamos a Valença, aunque reservando previamente.