Atención pésima.

Al pasar por la fachada del local, leímos en la carta que había tres variedades de patatas. Viendo el tipo de establecimiento que era, decidimos preguntar si hacían comida para llevar, a lo que nos contestaron que sí.

Una vez en la barra, una de las tres camareras que nos atendió, nos dijo que no había patatas para llevar, que la carta de fuera estaba mal. Nos enseña otra carta, que es la misma que la del exterior pero en otro formato e incluye las patatas, pedimos 3 de pimientos y una ensalada de burrata, siguiendo su recomendación.

Pedimos y preguntamos si podemos tomar algo en la barra mientras esperamos a lo que otra camarera nos indica que no hay servicio de barra. Esperamos por tanto al lado de la barra cerca de otros dos clientes que esperan su pedido.

Los otros dos clientes reciben su comida en la barra y se van. La camarera les da las gracias y nos indica que tenemos que esperar fuera "eh, que allí no se puede estar". Entendemos que solo puedes esperar en la barra si sales en la tele como nuestros " amigos" que apostaron por la comida para llevar.

Nos vamos a casa y al rato volvemos a recoger nuestras 3 de pimientos y la fantástica ensalada de burrata.

Como truco final aparece la cuenta. 15 euros por la ensalada de burrata de la foto y 0'50 euros por un tupper que lo cobran porque " a nosotros nos cuesta dinero".

Nos hubiese encantado que nos echasen al entrar y ahorrarnos la estafa.