Bar La Carpintera Carne A La Brasa — Restaurant in Alcalá de Guadaíra

Soy de Alcala, pero resido fuera de Andalucia. Tomaba este establecimiento como punto de referencia para comidas con amigos y familia y ya en navidades no me gusto como eran las cosas, comparado con ocasiones anteriores. Temas de cantidad de comida y servicio. Hoy he acudido con unos amigos y me parece vergonzoso que cobren 11 euros por un trozo de secreto que cabria en un sandwich cuando antes se salia del plato, no hay mas que ver las fotos de otros ussiarios aqui publicadas. Y con mucha, mucha sal. Y que tengamos que pedir el pan 5 veces, estubiera duro y la salsa tuviera que levantarme yo a cogerla porque no nos la ponian. La cerveza de grifo no estaba fria y tiramos de botellines. En fin le dimos otra opirtunidad ya que enavidades ya percibimos la disminucion de la racion, pero no tengo claro que vuelva. Ah se me olvidaba, ponen la carta de papel impreso, se supone que se debe imprimer para cada cliente una por el tema del coronavirus, y la carta parecia un...

.Q poca amabilidad, q poco respeto y como no decir q poca vergüenza hacia el cliente, y digo cliente al no ser la primera vez q voy.Que te ofrezcan una galleta y un chupito en la barra a cambio de q te levantes de la mesa y sobretodo haciendo levantarse a una persona mayor no tiene calificativo.Si voy a un bar es porque me lo puedo permitir,no voy pidiendo limosna.Lo q sea q me ofrezcas q sea en la mesa.Si yo he esperado para sentarme el q venga detrás tendrá q hacer lo mismo.Parece ser q interesa más llenar mesas q conservar a un cliente.Este es uno de los motivos por los q grandes comercios cerraron.Sera x bares?,en cada esquina hay uno q quizás te tratan mejor. Hasta nunca,bye bye y por supuesto mis referencias para nada serán...

Tuvimos una mala experiencia. Nos dieron una mesa, le pedí una trona para mi niña, la senté y cuando apoyó los bracitos en la bandeja donde se pone el plato se salió y mi niña dio con la boquita en el pico de la mesa, llorando esmorecida con la boquita chorreandole la sangre, pasa el camarero y me dice que eso es así, que eso se sale! Y sigue sirviendo a las mesas como si nada, tanto el que servía a las mesas como el de la barra, el bar tenía menos de la mitad de las mesas ocupadas y los chillidos de dolor de mi niña se oían en todo el bar y ellos sabiendo lo que habia pasado en ningún momento se acercaron para ver cómo estaba mi niña para darnos algo para ponerle en la boquita, nos fuimos corriendo para el médico, no volveremos a...