Les Barques Can Joan — Restaurant in Alcanar

Extremely disappointing.

Wie visited this place as a group of four, the ambience and looks of the place were lovely. My wife and I wanted to order the lunch menu, but the waitress refused us saying that we could only order this if the entire table chose it, when the menu did not state this. She remained inflexible on this point, so eventually we sent the waitress away to redecide on our order. She looked visibly annoyed.

Eventually we settled on the fish soup and the wait began. While the other two of our group received their dishes the soup was nowhere to be seen. When it finally arrived after over an hour of waiting the chef came by and asked if we were enjoying our food - I had not had one bite yet. After hearing about our experience the chef offered us the lunch menu at this point, but after so much waiting we did not want to wait again.

So finally, the soup arrived. It looked great in presentation, but was way too salty, so I could not eat more than a few spoons. The complementary bread was hard and dried up, it was probably from the day before or older. After that I did not feel like eating anything else.

Our dog was also not offered any water, whether out of...

El restaurante está situado en el centro del pueblo de las Casas d'Alcanar. Un buen lugar para un restaurante de aspecto clásico. La cocina es marinera, según tradición del Delta del Ebro, donde predomina el pescado, marisco y los arroces.

En este caso probamos primero el pescadito frito, un plato con presentación espartana tal como se puede ver en la foto y unas navajas a la plancha, también de presentación anodina. Tanto un plato como el otro de calidad correcta aunque justos en cantidad.

De plato principal pedimos un suquet de pescado de lubina y rape, ellos llaman de pescado variado. El problema principal son las cantidades. El cocinado, sabor y calidad del pescado no hay nada que decir. Un suquet de corte clásico que invita a mojar pan. El problema es la cantidad y el precio, por cada persona había, un corte de lubina, un corte de rap, una almeja, una gamba y tres mejillones, el precio 39 euros. No hace falta ser un genio para ver el exceso de precio absolutamente fuera de lugar. Una vez más hay que ver la foto para comprobarlo. Es una lástima porque, como he dicho, el plato está bien cocinado pero es muy claro que van a la caza del turista, lo que se llama atrapaturistes.

Los postres correctos sin destacar, requesón con miel y nueces, correctos.

La carta de vinos también correcto y adecuada al tipo de cocina. Muy recomendable probar los vinos de la Denominación de origen Terra Alta, sobre todo los vinos hecho con garnacha blanca, perfecto para el pescado y marisco.

Sobre el personal, hay disparidad. Cierto descontrol con las reservas, la nuestra no la tenían controlada y se notaba. Nos atendió un camarero, el que nos sentó a la mesa, realmente con muy poca simpatía y profesionalidad, no sólo con nosotros, viendo la forma de actuar en las otras mesas de al lado, realmente dejaba mucho que desear su actitud Por otra parte , una camarera joven nos sirvió los platos con rapidez, simpatía y ganas.

Conclusiones finales, restaurante poco recomendable si no eres de la zona. Se nota mucho que van a por el turista de fin de semana o de vacaciones. Es una lástima, ya que no sólo se hacen daño ellos mismos sino también a los restaurantes de toda la zona, que los hay muy...

Lamentablemente no les puedo ofrecer mi valoración sobre lo que es habitual en este tipo de local, o sea, calidad del producto, elaboración, servicio en sala, variedad de carta, etc….y es simplemente, porque no he tenido opción a poder degustar sus cocinados, y esto ha sido así por lo que ahora les comento.

Hoy con mi esposa, volvía a casa en Valencia desde L’Escala en Girona, donde hemos pasado unos días muy agradables recorriendo la Costa Brava, y al planificar la vuelta, y ya que viajamos con nuestra mascota, un Yorkshire, llame ayer a este restaurante a las 16:50, y solicite una reserva para hoy en terraza, un amable señor me l dos turnos, 13:30 y 15:00, a lo cual yo respondí que 15:00 horas por ir mas tranquilo. Tras el desplazamiento, llego a Las Casas de Alcanar a las 14:00 horas, y deambulamos por la población una hora,…… con una temperatura agobiante. Al llegar la hora reservada, nos acercamos sl local, y le hacemos saber de nuestra presencia a la persona que gestiona las mismas a lo cual me contesta que no le consta, le muestro mi movil con la llamada efectuada el día de antes, y tras rebuscar en diferentes libretas y consultar con el que parece ser el responsable de sala, me dice que si, que la ha localizado, pero que debo esperar 10-15 minutos, a lo que respondo que no hay problema. 35 minutos después, y viendo sentar a otras mesas que no se si disponen de reserva, pero que han llegado posteriormente a nosotros, en persona mi mujer le cancela la reserva, y le hace saber que no se ha obrado correctamente.

Si quiero hacer una reflexión final, la reserva de mesa debe ser algo Importantísimo y capital tanto para el restaurador como para el cliente, yo como cliente, siempre que he reservado una mesa y no he podido acudir por circunstancias, he anulado la misma, y siempre he recibido las gracias por parte del establecimiento, pues bien, esto debe ser igual a la inversa, si estos señores no me admiten la reserva o me la anulan con tiempo suficiente, mi plan de viaje hubiera sido otro, y no acabar comiendo un tentempié en un area de servicio de la AP-7 a las 17:00, cosa que ademas, le agradezco al establecimiento que me ha atendido.

Sin otro...