A la pregunta: ¿Recomendarías este restaurante? La respuesta es: Sí. Lugar agradable, en el que diseño, ambiente y detalles, ayudan desde el primer instante a sentirse bien. Situado en el centro de Alcoy, en un entorno que invita a caminar y recorrer la ciudad antigua e inevitablemente festera por sus famosas e internacionales Fiestas de Moros y Cristianos. De hecho este restaurante se encuentra a unos metros de dos 'filaes'. El aparcamiento puede ser problemático en varios momentos del año. Aunque hay opciones a escasa distancia. Los domingos se puede aparcar sin ningún problema en las calles que dan a la del restaurante. El trato del personal en L'Amagatall de Tota es correcto pero algo seco, en las presentaciones se echa de menos alguna explicación más o al menos que reciten el contenido de cada plato a todos los comensales de una mesa, cuando esta es de ocho personas, como la nuestra, hay que repetir el mensaje de nuevo a quienes no lo han escuchado aún. Sabemos que puede ser cansino para un profesional repetir lo mismo no varias sino muchas veces, la gracia consiste en hacerlo sin que parezca repetitivo. Y hablando de un restaurante de cocina de autor es obligado cuidar todo hata el extremo. El autor en este caso es Jorge Sanus. A quien pudimos felicitar al final de la comida, y charlar también con él. Felicitación que queda aquí también. Las ocho personas que compartimos mesa, no habíamos visitado nunca este restaurante y a todos nos gustó. Escogimos una degustación que nos llevó del mar a la tierra, nueve trabajos culinarios, incluyendo dos postres, y antes los aperitivos, dos, tres entradas, y dos platos. todo ello servido individualmente. Hay creatividad en la cocina de Jorge Sanus, eso se reconoce enseguida, y el recuerdo que deja la visita a su restaurante es bueno. Pasados varios días lo sigue siendo. Si bien al día siguiente surgen algunas críticas internas, unas algas demasiado saladas, o una base de pasta en una entrads, que tal vez era demasiado dura, son pequeñeces que no enturbian l valoración global. El pescado, jy otras delicias marinas están bien trabajadas, y la carne, y los postres como remate final. Para describir todo esta reseña ae extendería demasiado. Es mejor probarlo. Y para volver Jorge Sanus te puede cambiar todos los platos. Algo que no ofrecen todos los lugares se cocina creativa. Y para beber: Una carta de vinos bien seleccionados. Escogimos vinos valencianos, muy apropiados para la cocina de un autor alcoyano,...
Read moreThe atmosphere is very warm and inviting! Everyone is welcome, from individual tables to families and small babies! Menu is very creative but still using all local and fresh ingredients! Jorge is always very happy to accommodate any needs! From veggies and vegans to kids friendly menus, you will find anything that you desire!
Wines.... I mean the wine list has over 140 entries (do take your time to read it!) Honestly, anything you can think of and for every budget!
If you are in Alcoy, local or passing by, do stop by for lunch or dinner and seriously you will have a great time and delicious food!
Price wise, yes, you can find expensive seafood on the menu (the freshest you can get and still smelling of the sea salt!) but for 23€ you will get an amazing 3 course meal with a coffee and a...
Read moreNo sabíamos si marchar sin terminar el menú, o continuar con la comida para poder tener un juicio real de lo que estaba pasando al ser un restaurante con tanto caché y nombre, donde llevábamos tiempo queriendo ir. Para empezar después de una larga espera sin sentido, pedimos un vino y una cerveza. Nos sirvieron la última copa de vino de una botella que estaba llena de posos, pasado y turbio. Pedimos retirarla porque no se podía beber. El siguiente vino fue muy bueno. Pedimos 2 menús ejecutivos, en los cuales hubo 3 cambios en los platos sin previo aviso (el más importante el cambio en el plato principal). Nada destacable en los aperitivos y los entrantes. Uno de los entrantes era tomate aliñado con anficós, y por mi experiencia como cocinera, esa ensalada estaba ya preparada desde hacía rato sin gusto ninguno ni calidad en la materia prima (el anficós blando y pasado, y el tomate... Los venden mejor hasta en Mercadona). Cuando sirves sólo 2 productos en un plato, con un aliño sencillo, es porque deberían brillar y destacar por su calidad, no por su ausencia. Probamos el jarrete (que nos cambiaron porque no quedaba costilla ibérica), y.... Aceptable. Igual que el postre. Pero siguiendo la línea de "nada destacable". Automáticamente después de varias quejas, preguntamos si Jorge estaba en la cocina. Nos dijeron que estaba de baja. Y es por esto último que decidimos cambiar nuestra opinión de no volver nunca más por tal decepción, a "quizá le demos una oportunidad un día". Por último en la cuenta nos cobraron la bebida que iba incluida en el menú, a parte, y también la tuvimos que reclamar. Una grandísima pena, 50€ de menú tirados a la basura sin un mínimo detalle para contrarrestar esa decepción que además expresamos al camarero claramente cuando...
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