Restaurant La Buixeda — Restaurant in Alp

Todo empezó bien ya que el camarero fue bastante amable al principio la verdad pero el final es de traca… El lugar está bien decorado y el ambiente es correcto (la mayoría de personas de alto nivel económico o eso parecía para que os hagáis una idea). La comida es justita en cuanto a calidad-precio pero lo peor con diferencia fue el ROBO con mayúsculas que sufrimos a la hora del postre. Os explico: cenamos, 3 familias con niños, es decir que dejamos un buen dinero pero ya éramos conscientes de donde cenaríamos. Lo que es de sinvergüenzas es cobrarnos 6,5 euros por una naranja que le pedimos de postre a un niño porque el que entraba en su menú no le gustaba. Alucinamos cuando vimos el precio en la cuenta pero lo más lamentable de todo es que se lo decimos al camarero, quien lo consultó a su encargado y al volver nos confirmó que sí, que la naranja valía 6,5 euros riéndose irónicamente… pues bien la gracia que nos hizo a todos no fue precisamente para reírse, es más nos fuimos con mal sabor de boca sólo por este gesto tan ruín, de manera que, no volveremos a ir y correremos la voz a todos los que pretendan ir y quieran pedirse un postre diferente al que ofrecen...Nos sentimos estafados y encima a conciencia puesto que nos quejamos del precio abusivo de la naranja y como quien oye pajaritos después de dejar una pasta en menús de todos…pero si el menú de un niño valía casi lo mismo que una sola naranja…! En proporción es exagerado, se inventaron el precio al momento y nos tomaron por idiotas. Nos faltaron al respeto y no volveremos ni recomendaremos a nadie este lugar por mucho nombre que se crean tener…es penoso tomar el pelo...

Fuimos a comer mi pareja y yo en una escapada de fin de semana en la Cerdanya, tras elegir entre varios restaurantes y guiados por las buenss reseñas... Sin duda fue una muy buena elección!!! El ambiente del restaurante es muy acogedor y tranquilo, y el entorno donde está ubicado perfecto. Comimos en el comedor con unas vistas muy chulas! Pedimos para compartir una tortilla de botifarra del perol y una tabla de embutidos catalanes. Los embutidos muy ricos y la tortilla muy muy buena, en el punto perfecto, ni muy cuajada ni muy líquida, y de sabor buenisima! Pero lo que nos encantó (aún más) fueron los segundos: canelones "de festa major" y fricandó. En el caso de los canelones, puedo decir casi sin equivocarme que se colocan en el TOP 1 de mejores canelones que he probado en Catalunya. Y en el caso del fricandó, el más tierno que he comido nunca y con un sabor muy muy bueno. Como estábamos bastante llenos, de postre compartimos una espuma de crema catalana con fresones, con un rico toque de canela pero muy suave y con una textura y combinación de sabores muy buena.

La atención del servicio de sala impecable. Atentos, amables y muy profesionales. Antes de marcharnos no pudimos evitar agradecer a la chica que nos atendió (creo que se llama Irene) por su trato, y su infinita paciencia con otros comensales que teniamos en la mesa de detrás y que no pararon de quejarse y "poner al límite" al personal del restaurante sin ninguna razón y con muy mala educación. Ojalá todos los profesionales del sector de la restauracíón fueran así. Si volvemos por la zona volveremos, y sin ninguna duda lo...

Lo peor del restaurante es la atención por parte de la jefa de sala. Uno de los platos que pedimos fue el filete, lo pedimos poco hecho. Me traen un plato con cuatro rodajas de filete bastante finas (nunca había visto un trozo tan pequeño a 30€ el plato) y encima estaba bastante hecho y no valía nada. Por lo que le digo al camarero que el filete está muy pasado (nunca me había quejado antes en ningún restaurante pero viendo la cantidad y calidad me pareció desproporcionado el precio y tener que comerme algo que no daba la talla) y me retiran el plato. Al rato viene la jefa de sala con el plato a decirme que el punto de carne estaba perfecto y que si lo quería menos hecho haberlo pedido de otra forma, montando un numerito en medio del restaurante. Por lo que le dije que ya no lo quería. Encima del precio que te cobran, lo mínimo es que esté a gusto del consumidor.

Cuando pedimos la cuenta, me dice el camarero que “normalmente no lo hacen pero que esta vez no habían cobrado el plato”. Encima de haberlo devuelto a cocina y tras el papelón que hizo la jefa de sala y de decirle que no hacía falta que me trajera otro plato, porque sinceramente se te quitan las ganas de consumir con el mal rato que nos hizo pasar, solo falta que te cobren un plato que no es correcto calidad precio y que no has consumido 😂.

Un restaurante con estos precios y que se supone que es de calidad no puede hacer esto a una pareja que se iba a dejar más de 50€ por cabeza. Venga ánimo y seguid así de simpáticos, que...