Bar-Restaurante Raos — Restaurant in Camargo

Es un local cerca del puerto donde come muchos trabajadores y choferes, también gente de paso como nosotros, desde fuera no es que llame la atención por la zona donde está pero cuando entras se siente muy acogedor . Viajamos con perritos y nos han dejado subirlos al comedor junto con nosotros. La atención a sido estupenda por parte de todas las trabajadoras del local, muy amables, rápidas y atentas. La comida de 10, hemos comido de menú, su precio 11€ , hemos pedido alubias pintas, ensalada de pasta, brochetas de pollo, solomillo en salsa de queso, bonito con tomate y alitas a la barbacoa. Cada uno su primero, su segundo, su postre o café, bebida y pan. De categoría , de hecho el mejor que he probado por ésta zona, calidad, precio y sabor. Cualquier plato que pidas te gustará sin...

Fuimos a comer con mi familia, teníamos una reserva, al llegar las mesas no estaban montadas, tuvimos que esperar y no cupimos todos, éramos 18 personas. La comida para lo que es el menú, está muy bien. La camarera tuvo mucha paciencia con nosotros y se lo agradezco, la única pega es que tardaban en recoger los platos. Además en el momento de marcharnos, unos fueron al baño y otros ya habían salido del local, nos enteramos que nos habían regalo un chupito, agradezco el detalle pero no todos pudimos gozarlo... normalmente el chupito te lo dan nada más terminar....por otro lado el postre de tres leches es mejorable. Espero pueda volver a ir y llevarme una mejor impresión. Te deseo todo lo mejor Rosa!! Que todo esto sirva...

Edito mi buena reseña anterior para bajar de puntuación por su flagrante y continuada, caída de calidad en su comida Desde que estan los nuevos dueños del restaurante había cambiado todo mucho buen trato se comía muy bien y un precio muy asequible para trabajadores Ya en varias ocasiones hemos seguido parando a comer y la calidad de la comida es infinitamente inferior tanto así que algunos días solo te gusta uno de los platos o con la última ocasión este lunes pasado no había quien se comiera ninguno de ellos de lo malo que estaba No creo que volvamos a parar, salvo que de oídas nos digan que...