Restaurante el Ricote — Restaurant in Campo de Criptana

Best little café to visit near the windmills at Campo de Criptana. Loads of souvenirs of all types, artisanal things made of ceramic, cork, leather, tee-shirts, socks, you name it, they've got it! The coffee and chocolate filled holadres were great! The terrace area is so nicely decorated and heated (a must in winter months)! There is a lovely "Mirador" which allows you to look out over the city itself or face the opposite direction for a view of the windmills. This place also serves Estrella Galicia beer (my favorite) and must be a great spot at night. The bathrooms were spotless. I highly...

Fue una experiencia bastante nefasta, llamamos con 7 días de antelación nos atendió un chico y nos tomó nota hasta ahí todo bien,pues llega el día de la reserva y llegamos a nuestra hora le decimos q tenemos una reserva a las 21:00 damos el nombre y para nuestra sorpresa q nos dice q no tenemos reserva hecha y nos quiere meter dentro en un hueco que hacia un calor tremendo,hablamos con el dueño se lo comentamos lo q pasa y con mucha chuleria nos dice q esta lleno y q le da igual q le pongamos reseña después de un rato,nos saca fuera a mesa alta una mesa de 40x40 para 4 personas,esas mesas no son para cenar sino para tomar algo sin reserva,pedimos la cena nos atiende bien hasta q llega el cuarto plato q habíamos pedido croquetas de ibéricos y de cocido no la pone el camarero en la mesa y al minuto viene y nos las quita y nos dice q eran para otra mesa sin saber si las hemos tocado se las lleva, bueno pues a los 15 minutos de cansados de esperar las reclamamos y nos dice la camarera q se han acabado las de ibéricos que pidamos otras, pedimos de boletus y nos las traen congeladas por dentro se lo decimos y nos las trae al rato pasadas por el microondas y aplastada las mismas,bueno pues esa es mi experiencia en ricote no volveremos más un pena.(chaval hoy te va bien pero la vida da muchas vueltas espero q con tus tratos no te falle nunca...

Terraza en la misma explanada de los molinos con "balcón" al pueblo y la llanura donde comer algo en plan informal. Precio quizá un pelín elevado, pero está donde está. El servicio de los camareros muy bueno y súper amable, y la comida fue más o menos rápida en salir de la cocina. En nuestro caso pedimos 2 hamburguesas de cordero, y muy buena aunque no es muy grande (135g ponía en la carta), tosta de solomillo que estaba muy tierna pero sabía un poco al cordero supongo que de las hamburguesas que hicieron a la vez, tosta vegetariana (con queso manchego) en este caso muy rica, y unas croquetas buenas sin más (8 croquetas la ración). De postre pedimos la tarta de queso que estaba buena, pero el sirope quizá la hacía demasiado dulce. Esto, 4 cafés y 5 cervezas 90€ aprox. Aunque no será nuestro sitio favorito podríamos darle otra...