Tall de Conill — Restaurant in Capellades

Nos alojamos allí, porque nos habían hecho una reserva otras personas. La verdad es que era uno de los días mas calurosos de todo el verano. Al entrar hay una salita que da paso a la recepcion que se encuentra entre el bar y el ascensor que es de escasas dimensiones. Nos hicieron la entrada de una forma un poco rara, pero la sorpresa fue al llegar a la habitación : totalmente anticuada, sin aire acondicionada, sucia, con desconchones, y una temperatura de 37 grados porque le empezaba a dar el sol de tarde. Bajamos a tomar un aperitivo y por una ración de calamares malos 22,00€ y por una coca cola 2,25€. Cuando llegamos para ir a dormir, en la habitación había una temperatura de 42 grados y no había ni un ventilador. Descubrimos entonces que el cuarto de baño tenia una ventana con cristales horizontales y abiertos (es decir no cerraba) que daba a una especie de patio interior, y parecía que entraba un poco de fresco, cual fue nuestra sorpresa que allí daban todos los cuartos de baño del hotel y los ruidos que se podían oír eran asquerosos. Pero la mayor de las sorpresas fue a la hora de pagar : 75,00€ por la peor habitación en la que hemos dormido nunca. Por supuesto es imposible recomendarlo porque no...

Nos alojamos allí, porque nos habían hecho una reserva otras personas. La verdad es que era uno de los días mas calurosos de todo el verano. Al entrar hay una salita que da paso a la recepcion que se encuentra entre el bar y el ascensor que es de escasas dimensiones. Nos hicieron la entrada de una forma un poco rara, pero la sorpresa fue al llegar a la habitación : totalmente anticuada, sin aire acondicionada, sucia, con desconchones, y una temperatura de 37 grados porque le empezaba a dar el sol de tarde. Bajamos a tomar un aperitivo y por una ración de calamares malos 22,00€ y por una coca cola 2,25€. Cuando llegamos para ir a dormir, en la habitación había una temperatura de 42 grados y no había ni un ventilador. Descubrimos entonces que el cuarto de baño tenia una ventana con cristales horizontales y abiertos (es decir no cerraba) que daba a una especie de patio interior, y parecía que entraba un poco de fresco, cual fue nuestra sorpresa que allí daban todos los cuartos de baño del hotel y los ruidos que se podían oír eran asquerosos. Pero la mayor de las sorpresas fue a la hora de pagar : 75,00€ por la peor habitación en la que hemos dormido nunca. Por supuesto es imposible recomendarlo porque no...

Reservamos este hotel porque un amigo se casaba en Capellades. Entre todos hemos reservado 6 habitaciones.||Al llegar nos recibieron con gran cortesía, el trato ha sido en todo momento muy bueno y cordial.||Cuando entramos en la habitación..... Lo esencial estaba limpio, suelos, baño, toallas, sábanas, superficie de mesas de noche y mesita limpia.||Otro cantar era el resto, paredes negras LITERALMENTE, cortinas negras de suciedad, muebles viejísimos con desconchones, la cama.... Horrible, las paredes con grietas, la puerta del balcón estaba rota, te quedabas con el tirador en la mano. Los armarios con churretes.||Todas las habitaciones estaban igual, por lo menos las 6 que ocupamos, distribuidas en distintas plantas. A todos nos sorprendió el estado del hotel y la gran suciedad que había.||Puede que hace años este fuera un gran hotel de dos estrellas, desde luego ahora está al nivel de una pensión mala.||Del restaurante no puedo opinar, no hemos comido en el hotel.||En definitiva, 190€ por dos noches en un hotel de dos estrellas en régimen de solo alojamiento. He estado en hoteles de cuatro estrellas en Barcelona por menos dinero e infinita...