Feudo Real — Restaurant in Grau / Grado

Todo RIQUÍSIMO..... 7 ESTRELLAS Situado en un enclave privilegiado de la ciudad, el restaurante “Feudo Real” es un auténtico templo de la gastronomía asturiana, donde la tradición se fusiona con un toque de elegancia rústica. Desde que entras, te envuelve un ambiente que destila autenticidad: paredes de piedra, vigas de madera expuestas y detalles decorativos que recuerdan a las casas de aldea asturianas. La iluminación tenue y las mesas bien dispuestas crean un entorno acogedor, ideal para una comida en familia, una cita romántica o una celebración con amigos. Es uno de esos lugares que te hacen sentir como en casa, pero con un servicio y una calidad que elevan la experiencia a otro nivel. El corazón de “Feudo Real” es su excepcional oferta de carnes, que se preparan con un mimo y una destreza que reflejan el respeto por la materia prima. El chuletón de buey, cocinado a la parrilla con maestría, es simplemente sublime: jugoso, tierno y con un sabor profundo que se deshace en la boca. Cada bocado es una celebración de la calidad de la carne asturiana, seleccionada con esmero. Otro plato estrella es el cachopo, un clásico que aquí alcanza cotas de perfección. Relleno de jamón ibérico y queso fundido, envuelto en un empanado crujiente, es una explosión de sabores que no deja indiferente. Además, la carta incluye embutidos asturianos de primera, como chorizo y morcilla, perfectos para compartir como entrante. Más allá de las carnes, “Feudo Real” brilla por su fidelidad a la cocina asturiana tradicional. La fabada es un must: elaborada con fabes tiernas, chorizo, morcilla y panceta, es un guiso reconfortante que calienta el alma. También destacan platos como el pote asturiano o el pixín (rape) en salsa, que muestran la versatilidad de la gastronomía de la región. Para quienes prefieren opciones más ligeras, hay ensaladas frescas con productos de temporada y alguna alternativa vegetariana, como verduras a la parrilla o cremas de la huerta. La experiencia no estaría completa sin la sidra asturiana, servida con el tradicional escanciado que añade un toque de espectáculo a la comida. La carta de vinos, aunque no abrumadora, está cuidadosamente seleccionada, con referencias de Rioja, Ribera del Duero y otras denominaciones que complementan los platos. El personal, siempre atento, ofrece recomendaciones acertadas para maridar la comida, lo que demuestra su conocimiento y pasión por lo que hacen. El servicio es uno de los grandes valores de “Feudo Real”. Los camareros son amables, rápidos y están pendientes de cada detalle sin ser invasivos. Incluso en los momentos de mayor afluencia, como los fines de semana, la atención se mantiene impecable, y los platos llegan a la mesa en un tiempo razonable. Este nivel de profesionalidad hace que la experiencia sea aún más placentera. Los postres son el broche de oro. El arroz con leche, cremoso y con un delicado toque de canela, es un clásico ejecutado a la perfección. También destacan los frixuelos rellenos de crema pastelera y la tarta de queso casera, que combina una textura suave con un sabor intenso. Cada postre es una muestra de que en “Feudo Real” no se descuida ningún detalle. En términos de precio, “Feudo Real” ofrece una relación calidad-precio excelente. Una comida completa, con entrante, plato principal, postre y bebida, ronda los 35 euros por persona, un coste más que justificado por la calidad de los ingredientes, la elaboración y el servicio. El único punto a tener en cuenta es que el restaurante tiende a llenarse, especialmente en fines de semana, por lo que es recomendable reservar con antelación. Sin embargo, este pequeño inconveniente no empaña la experiencia, ya que cada visita a “Feudo Real” es un viaje al corazón de Asturias. En conclusión, “Feudo Real” es un restaurante que combina tradición, calidad y hospitalidad en cada detalle. Es el lugar ideal para los amantes de la carne, los platos...

Buenas tardes, Hoy hemos llegado a Grado, después de una larga caminata (camino primitivo)!!! Nos recomendaron el restaurante Feudo Real!!! Tuvimos que esperar poco tiempo para obtener una mesa de tanta gente que había, el encargado muy amablemente nos indica el tiempo de espera es entre 15' o 20' minutos , dijimos sin problema esperamos en la barra hasta entonces. Una vez en nuestra mesa , pedimos 2 menús uno para cada uno evidentemente; al traernos el camarero el primer plato , la cantidad del arroz con mariscos me parece mucho y le pido porfavor que pueda traer otro plato hondo y una cuchara, y me salta respondiendo chulamente que no se comparten los menùs; pasado esto me he servido un plato de arroz mientras mi marido se comía su ensalada ,una vez terminado el plato de arroz que me había servido, comparto la otra parte del arroz con mi marido!!! Y le faltó tiempo al camarero en llevarse la fuente del arroz donde quedaba para servirse otro plato más de arroz; mi reacción fue inmediatamente decirle que no había terminado de comer y chulamente me vuelve a decir que no se comparten los menús y sin más le respondo que estoy pagando por dos menús y que lo compartiré como me parezca conveniente ( a todo esto no hay ningún cartel en el restaurante que prohíba el compartir los menús) Inmediatamente me dirijo al encargado explicandole la situación y me dice que no hay ningún problema que entre nosotros compartamos nuestros menús, evidentemente se disculpa pero el malestar ocasionado ya no se podía remediar nos ofrece más cosas para comer; le indico que nos sirvan el 2°plato para marcharnos. Y por consiguiente le pido la hoja de reclamaciones porque a parte de la poca profesionalidad del camarero me parece totalmente desciminatorio el comportamiento del camarero, curiosamente poco después llega el dueño del restaurante pidiéndonos disculpas por lo ocurrido ( según nos dice que es un personal nuevo que tienen está temporada, y las normas de la empresa no son esas , en ningún momento se le puede negar al cliente que compartan sus menús)! Y nos comenta que el día anterio lo había hecho el mismo camarero con otro matrimonio que iba con sus hijos, al parecer ese camarero tiene por costumbre hacerlo....... Por lo cual terminamos aceptándole sus disculpas: pero el mundo es un pañuelo, decidimos tomar el café en un bar y nos encontramos a una de las personas que nos recomendó el restaurante y nos pregunta que tal hemos comido y le comento lo ocurrido!!! Y nos dice que el personal que tiene el restaurante Feudo Real es el mismo de todo del año; es decir que en nuestra cara nos mintió el dueño... Nos hemos sentido totalmente desconcertados, por lo que he decidido poner esta publicación, las mentiras tienen las patas delgaditas, ahora nos ha tocado a nosotros y mañana te puede tocar a tí...

La llegada estupenda , hay un buen cartel anunciado el menú , afuera , entras y un chico muy amable , de gafas y con vestimenta informal , te pregunta si tienes reservado y la posibilidad de que entres a comer . El bar está lleno de gente [ más bien grupos de chicas , jóvenes ] . El servicio de camareros , fue bueno . Nos decantamos por el menú 22€ por persona , con sorpresa . De primero garbanzos con mejillones y marisco [ estaban sabrosos tenía tropiezos , aunque el pescado tenía un montón de espinas sueltas , las cuales había que tener sumo cuidado ] , Setas a la crema [ más bien champiñones cortados en rodajas , con bastante crema , tenía buen sabor ] , el pan era muy rico , aunque se desmigallaba un poquito . De segundo , solomillo con salsa al oporto [ estaba correoso y la salsa no tenía sabor , más bien estaba rebajada con agua , las patatas fritas tenían sabor y cuando llegó la carne ya estaba fría ] , Entrecot con salsa de Cabrales [ venía crudo , lo hubo que devolver para que lo pasarán , salsa de Cabrales , les tenía que dar vergüenza , era más bien leche y nata , el queso ni por asomo y no tenía nada , las patatas fritas con las que venía acompañado , estaban fritas día veces y negras , ya pasadas de freidora ] , el vino del menú , malo no lo siguiente y la casera , sin apenas burbujas . De postre tarta de charlota [ estaba rica aunque la decoración con espuma de spray no le queda bien la desluce , al igual que la copa de helado , que la decoraron con la misma espuma ] . El café te preguntan cuando te traen el postre y cuando te lo vas a tomar , está frío . El local es bonito , aunque íbamos recomendados , pero se ve que la cocina no va acorde con el establecimiento , yo francamente , no lo recomiendo a nadie , pero lo mejor es que probéis y veréis que está reseña , no está escrita en vano . Relación calidad...