La Moderna — Restaurant in la Ràpita

We were staying at our friend's yacht in Sant Carles de la Rapita Spain and they very kindly brought us to la moderna for lunch, along with some of their other friends who live on the Marina also. What a hidden gem this charming little restaurant is. The menu is very very good. We ordered a selection of tapas for the six of us to share, and the nice thing was they had plenty of vegetarian choices for me. The food was so delicious, especially the potatoes bravas and the tomato and mozerlla salad, my husband and other friends really enjoyed the eggs and chips dish, I know it doesn't sound very Spanish..but it was. The premises are spotlessly clean, the decor very lovely and staff helpful attentive and so welcoming to us, very good value for money, including 2 bottles of excellent Rioja it was 35 euro per couple, and that included a tip. Next time I visit San Carles de la Rapita, I will be back to La Moderna, highly...

Si la camarera hubiera tenido un mínimo de educacion y empatía des de la asignación de la mesa, si hubiera fingido mínimamente cuando les pedimos otra mesa, habría obviado las croquetas recalentadas, los chipirones mediocres y nadando en aceite, el proyecto de vermut, y el toque final pretendiendo cobrar en efectivo. En definitiva una mala experiencia para olvidar y un lugar al que no volver si no cambia.

Despues de la respuesta de la propiedad, debo hacer las siguientes observaciones: no es la primera crítica que recibe la camarera que nos atendió, solo hace falta mirar reseñas de otros clientes con experiencias similares. -cuando pedimos, educadamente, el cambio de mesa no es que no hubiera otras mesas libres, que las había, su respuesta fue que tendría que limpiar la mesa y su tono de voz no respondía en absoluto a la empatía que la propiedad reclama a los clientes. Entiendo el esfuerzo que supone llevar un restaurante y sé que no es fácil agradar a todo el mundo. Precisamente por eso escribí la reseña: porque mi experiencia, aunque seguramente no coincida con la de la mayoría, fue negativa desde el primer momento. La atención recibida por parte de la persona que nos atendió no fue ni profesional, ni educada, ni empática. Por tanto difícilmente puede pedir a los clientes, que pagan por ese servicio, un comportamiento empático cuando no lo reciben por su personal. Cuando un cliente pide un cambio con educación, es importante que, aunque no sea posible, al menos sienta que su petición ha sido entendida y atendida. Eso fue lo que eché en falta, y lo que marcó el resto de la experiencia. Por otra parte, no entiendo en que parte de la filosofía empática que defiende la propiedad está pedir a un cliente que quiere pagar con tarjeta que abone la cuenta en metálico, a lo que me negué obviamente, sobre todo porque a todos los clientes a los que se les cobró anteriormente se hizo con tarjeta. No escribo esta respuesta con ánimo destructivo, sino con la esperanza de que pueda servir como un feedback real. Estoy seguro de que si se cuida más la empatía y el trato y no culpabiliza a los clientes del servicio deficiente de su propio personal, la calidad de la cocina y de la casa se verá aún más valorada, ya que el ambiente que se respira en ella es, a pesar de esta experiencia lamentable y reprobable, ...

Es la segunda ocasión en la que me levanto de la mesa y abandono este lugar sin cenar por el mal servicio recibido. Jamás lo he hecho en ningún otro sitio, pero es que así no se trata al cliente. Estamos en fiestas y se perfectamente que todos los restaurantes y bares están desbordados de trabajo, pero en ninguno otro te tratan con esa soberbia y falta de respeto. No volveré

Buenas noches,

Gracias por tu respuesta. Tal como me pides doy las explicaciones oportunas. Esta noche teníamos reserva, según nos habían indicado, en las mesas situadas en la puerta. Hemos llegado a la hora, preguntado por nuestra reserva y nos hemos sentado. Nuestra sorpresa ha sido que nos habéis hecho levantar para acomodarnos en otra mesa, improvisada en medio de la calzada, por donde circulaban los coches (esquivándonos) y justo sobre una alcantarilla. El mal olor era insoportable y hemos pedido otra mesa al camarero que no parecía muy colaborador al respecto, por lo que nos hemos levantado y acercado a la puerta del restaurante justo en el momento que un responsable ha salido diciendo en voz alta que, esto es lo que había y que si no nos gustaba que nos fuéramos. Que es justamente lo que hemos hecho, diciéndole que haría una queja. Porque para mi, las formas han sido muy desagradables y tal como indicas en tu respuesta, no todo se puede permitir. Cuando me siento en un restaurante soy extremadamente respetuosa con el personal a quien doy siempre las gracias, y espero que se me atienda con el mismo respeto. Y a pesar de haber tenido una mala experiencia anterior, hoy he decidido dar a vuestro restaurante una segunda oportunidad. Porque aunque no te lo creas, si existió una primera ocasión en la que éramos dos comensales que esperamos sentados pacientemente, viendo como se atendía a mesas que habían llegado mucho más tarde que nosotros. Después de mas de una hora de esperar, nos levantamos y le dije al camarero que nos íbamos. Gracias por escuchar mis...