Sidrería Pablo Jovino en Posada de Llanes: una experiencia cálida y deliciosa La Sidrería Pablo Jovino, ubicada en Posada de Llanes, Asturias, se ha ganado un lugar especial en nuestras visitas al Principado. Su propietaria y camarera, Noelia, juega un papel fundamental en la experiencia de cada comensal. Comida: Platos tradicionales: La sidrería ofrece una amplia variedad de platos típicos asturianos, elaborados con ingredientes frescos y de temporada. Ademas pizzas y platos combinados
Sidra natural: La sidra es la protagonista de la sidrería, y Pablo Jovino es conocido por servir una sidra de excelente calidad, escanciada de manera tradicional. Ambiente: Acogedor y familiar: La sidrería cuenta con un ambiente cálido y familiar, ideal para disfrutar de una comida en compañía de amigos o familiares.
Atención amable y cercana: Noelia es una anfitriona excepcional, que se preocupa por que cada comensal se sienta a gusto y disfrute de su experiencia en la sidrería. Conocimiento de la gastronomía asturiana: Alegre y servicial: Noelia es una persona alegre y servicial, que siempre tiene una sonrisa en el rostro, si desmerecer la atencion del resto del personal, Pedro y Luis que siempre tiene algo que contar de temas asturianos En resumen: La Sidrería Pablo Jovino es un lugar ideal para disfrutar de la mejor comida asturiana en un ambiente cálido y familiar. La atención de la propietaria y camarera, es uno de los puntos fuertes del local, y hace que cada visita sea una experiencia memorable. Valoración: 5/5 estrellas Recomendaciones: Reservar con antelación, especialmente en fin de semana. Probar la sidra natural, escanciada de manera tradicional. Dejarse aconsejar por Noelia a la hora de elegir los platos. Espero que esta reseña te sea útil a la hora de decidir si visitar Asturias, en especial la...
Read morePedimos para llevar chorizo a la sidra y cachopo de cecina y queso de cabra., El precio fue correcto 25 € el cachopo y el chorizo no recuerdo si 5€ o algo así. El chorizo vimos como lo saco del un recipiente que parecía que era un cubilete con tapa parecido a los de las olivas;,lo corto con unas tijeras y lo metió al microondas, cuando lo comimos no estaba malo pero tampoco es algo que te llevará a pedirlo más veces. El cachopo estaba muy bueno de sabor llevaba cecina y queso de cabra como anunciaba, lo que no llevaba era ternera cuando lo empezamos a comer en el apartamento nos dimos cuenta de que el cachopo que en Asturias esperas comerlo con carne de ternera estaba hecho con carne de cerdo, que no era ni cachopo ni nada era unos filetes de cerdo presumiblemente magro cortado muy fino relleno de cecina y queso de cabra, lo que vienen a ser unos libritos que podemos comprar en la carnicería a precio de cachopo comido en el Puerto de Cudillero ( creo que en Cudillero el cachopo era más grande y me costó 2 € más además que era de ternera).
Ya que me contesta tan categóricamente le diré que no volvimos porque estábamos alojados a varios kilómetros, que no le pongo la reseña para molestarle ni para boicotear su negocio al cual pienso que las reseñas negativas en cuanto al trato no le hacen justicia porque yo me sentí bien tratado no tengo queja de eso. Simplemente me esperaba una cosa y tuve otra, tampoco pienso que me quisieran engañar simplemente igual no disponían de algún producto y sacaron el plato con otro si no tiene constancia de esto hable con cocina y si sigue creyendo que lo que nos pusieron era ternera y no sabe distinguirlo es un problema. Gracias Noelia o...
Read morePésimo servicio y trato de la camarera. Hemos venido a comer a este bar/restaurante que nos venía de pasada. Pedimos menú: De primeros sopa de pollo ( aceptable) , ensalada mixta ( bien) y de segundos tortilla de bonito ( bien) y lomo adobado con patatas ( bien ). Después el postre natillas ( bien ) y dos cafés. Cuando nos sirvieron los cafés nos dio tiempo a darles un par de sorbos( 3 minutos ) y pedir otro café más cuando la camarera vino y nos dijo que nos teníamos que levantar de la mesa e irnos, que nos acabáramos el café en la barra, que las mesas ya solo eran para menú del día ( cosa que nosotros es lo que habíamos pedido). Básicamente nos sentimos muy fuera de lugar con las maneras y gestos que nos dirigió la mujer. 2 minutos nos dejó para tomarnos el café cuando nos hizo levantarnos de la mesa porque ya estorbabamos. No queremos estar sentados haciendo el café 1 hora, pero si 10 minutos para tomarlo. Desde luego no pensamos volver y por supuesto no lo recomendamos. La cosa hubiese sido muy diferente si la camarera se nos acerca y nos comunica si porfavor podemos acabar nuestros cafés recién pedidos en la barra. Educación y empatia por el cliente es lo mínimo, al igual que nosotros lo tenemos cuando nos sentamos en la...
Read more