5 estrellas por la calidad, la cantidad, el trato y el precio. Como entrante pedimos pulpo a la brasa con patatas y pimientos del padrón, de los mejores pulpos que haya podido comer, un 10. Después pasamos al menú de 14 euros, de primero pedimos pote asturiano que estaba espectacular y los niños arroz con pollo y salchichas, muy rico también pero bastante mejor el pote. De segundo pollo a la plancha con ensalada que estaba muy rico y muy tierno y escalopines en salsa de queso, riquísimos también. De postre tarta de queso que estaba increíble y un flan buenísimo también. Se les olvidó traer uno de los segundos platos a uno de los comensales pero como habíamos comido tantísimo porque los platos son muy abundantes dijimos que si no lo habían puesto en marcha que no lo pusieran. Cuando trajeron la cuenta nos dijeron que al comensal que no le trajeron el segundo plato estaba invitado, es decir, el primero, bebida y postre gratis, un pedazo de ejemplo de servicio que nos impresionó porque lo normal habría sido cobrarnos medio menú. Por todos esto van mis 5 estrellas para este lugar