La Piká de los Compadres — Restaurant in Málaga

La Piká de los Compadres: A Seafood Lover's Paradise If you're seeking an authentic Spanish dining experience in Málaga, La Piká de los Compadres is a must-visit. This hidden gem offers a delightful fusion of fresh seafood and traditional tapas, creating a culinary adventure that will leave you wanting more. The dorade fish, in particular, is a masterpiece. Perfectly cooked and seasoned to perfection, it's a testament to the chef's skill and the quality of the ingredients. Every bite is a burst of flavor, with the delicate fish complemented by the subtle nuances of the accompanying sauce. But it's not just the food that makes La Piká de los Compadres so special. The service is impeccable, with the waiters going above and beyond to ensure a memorable dining experience. Their friendly demeanor and knowledgeable recommendations make you feel like a valued guest. Whether you're a seafood enthusiast or simply looking for a delicious meal, La Piká de los Compadres is a must-try. It's one of those places where you'll leave feeling satisfied and...

Todo muy rico, amables al extremo, pero… Los sitios donde no dan la cara ante situaciones incómodas y algo absurdas, me parecen de muy poca seriedad y totalmente exentos de toda profesionalidad. Solemos ir con frecuencia porque la verdad es que es un sitio donde tienes asegurada la buena comida, el servicio rápido y amable. Pero la experiencia de hace unos días fue bastante embarazosa y nos fuimos sin el mayor inconveniente, pero cariacontecidos y sin saber muy bien del porqué lo que pasó, nadie se dignó tan siquiera a dar la cara. Puede parecer un detalle tikismikis, pero cuando vas a un lugar así, con familia de muy lejos, y les dices que dónde vas es un sitio idílico y estupendo, cuando te pasan este tipos de situaciones, te cabrea y mucho. EXPLICO: Después de llevar a dicho familiar y disfrutar de los ricos ágapes que sirven con la ya mencionada magnífica atención; nos dicen los postres, de los cuales, el amable muchacho nos dice que nos lo va a traer con 3 cucharas dado que era para compartir, no íbamos a pedir postre porque habíamos quedado muy saciados, pero ese que nos comentó nos llamó la atención. Esperamos, y al rato (unos 7/8 minutos), nos viene otro de los jóvenes camareros y los dice que ese postre que habíamos pedido hacía tiempo que no lo servían. Nos quedamos un poco impresionados porque el que nos explicó los postres nos expuso que era uno de los postres más ricos, afamados y pedidos del restaurante, pero el que nos dijo que no se hacía ya nos ofreció otro, y ya que nos habíamos hecho a la idea del dulce, lo pedimos… Al rato, así como unos 10 minutos, en la mesa de al lado, eran dos muchachos, uno de ellos pide “el postre que no hacían de hace tiempo” según el segundo camarero, y el que el primer camarero nos dijo que si había pero que después no había… IMAGINAOS NUESTRAS CARAS. Se lo comentamos a un par de camareros para que alguien viniera a explicarnos que había pasado, que si se trataba de una confusión o que es lo que podía haber pasado ante una situación tan incomoda como absurda, y por supuesto discriminatoria, porque que se le niegue un plato a una mesa, porque otra mesa que había llegado mucho después que nosotros y que se encontraban comiendo platos de pescado cuando nosotros pedimos el susodicho postre, es de que al menos el encargado o propietario saliera a dar explicaciones, pero al comentarlos a ambos camareros que nos habían atendido, Nadie hacía nada por darnos un mínimo de explicaciones, y nuestra incredulidad ante el pasotismo de esta incómoda situación fue ridícula. Con lo que decidimos pagar e irnos sin seguir con la situación que Nadie nos había explicado el por qué se había dado. En fin, nuestro cabreo es bastante grande y es más que probable que dejemos de recomendaros y cómo no de ir, con todo nuestro dolor de corazón, pero cosas así son inaceptables que ocurran, y si ocurren, un mínimo de explicación, no indiferencia total. Una verdadera pena porque es un sitiazo, pero este tipo de situaciones no sabes lo que son, hasta que las vives. Cómo no, aquí tenéis mi 1*, porque cosas así tienen que trascender para que no vuelvan a ocurrir, al menos, con ese descaro e...

Vorsicht, Touristenfalle! An einem Donnerstag musste ich auf meinen Ehemann warten, der im Spital in der Notfall-Ambulanz untersucht wurde. Da ich Hunger bekomme habe, habe ich nach einem Lokal gesucht und dieses gefunden. Das erste Alarmsignal welches ich ignorierte, waren die vielen (zu viele) Kellner, welche wie die Wespen um das Nest wimmelten. Ich habe mich hingesetzt und habe versucht das komische Gefühl alleine in einem Lokal zu essen zu unterdrücken. Prompt ist ein Keller zu mir gekommen und fragte nach der Bestellung. Ich fragte nach der Karte. Er zeige mir ein QR Code auf dem Tisch geklebt. Ich fragte nach Wlan, Fehlanzeige. Während ich versucht habe mir im Internet die Speisekarte anzuschauen, kam ein anderer Kellner und fragte nach meiner Bestellung (sind sie im Akkord bezahlt?!?). Ich sagte ich bin gerade dabei mir die Karte im Internet anzuschauen. Er ging und kam sofort wieder mit einer richtigen Karte. Ich hatte keinen so großen Hunger und ich wollte einen Salat. Ich sah gegrillte Paprika und ich wollte die nehmen. Als wieder ein Kellner kam-der dritte- habe ich gesagt ich möchte den Salat und dann schaue ich noch. Der Chef war auch immer wieder da…und dann fragte der Kellner ob ich nicht lieber ein Stück Fisch dazu haben will. Ich war unentschlossen aber der Kellner sagte sie haben sehr guten Tunfisch und er kann mir die gegrillten Paprika bringen als Beilage zu einem Tunfisch Steak. Ich hatte nicht mal die Zeit die ganze Karte anzuschauen, so eilig hatten die Leute meine Bestellung aufzunehmen. In Eile habe ich zugestimmt und habe dann auf mein Essen gewartet. Es kam ziemlich schnell, ein großes Thunfisch Steak, well-done und daneben einigen Streifen gegrillte Paprika (Siehe Foto), dazu etwas Brot. Nach dem Essen, die Kellner haben gefragt ob ich Dessert oder Kaffee möchte, aber ich wollte Kaffee und Kuchen in einer Cafeteria nehmen. Dann kam die Rechnung: 24€ für ein Stück Tunfisch mit etwas Paprika. Wow! Ich war perplex! Ich habe mir die Karte angeschaut, dieses Mal genau und habe gesehen dass mein Gericht absolut das Teuerste war. Ich kenne die Preise in Spanien, das hier war sehr ungewöhnlich. Ich habe mit der Karte bezahlt und bin weggegangen. Mir war klar was passiert war. Also: Hände weg! Die Mentalität ist, nimm Touristen auseinander wie Weihnachtsgänse! Man kann auch bar zahlen. Behindertengerecht. Die Toiletten waren relativ sauber, aber auch als Lager für Bierfässer genützt. Kein Parkplatz, außer auf der Straße. Fairerweise muss ich sagen dass das Steak gut gemacht war. Mein Fazit...