Restaurante La Curiosa — Restaurant in Málaga

El sábado celebramos nuestra boda allí. No conocíamos el restaurante pero nos hablaron un día de ellos y pasamos a conocerlos. Desde el primer día ya percibimos la amabilidad y entrega de su Jefe de cocina Eduardo, así como de los socios y propietarios del negocio, que hicieron todo para complacernos en nuestras peticiones. Ya el sábado en la celebración de la boda, todo espectacular, quedando el salón precioso. Nos recibieron en la entrada y la recepción de invitados fue todo perfecto, con un jamón buenísimo, queso, y demás entrantes deliciosos, no solo a nuestro gusto, ya que así lo comentó el resto de invitados... Una vez en el salón, que estaba decorado precioso, más de lo mismo, toda la comida y la atención de los camareros de diez. Después de la comida pasamos a la barra-reservado donde lo pasamos genial, con buen ambiente y música puesta por Eduardo, que también es un fantástico DJ, consiguiendo que disfrutáramos unas pocas horas de risas, copas y bailes. Queremos hacer mención otra vez al servicio de camareros-as, que estuvieron atentos a todos los invitados y se portaron como lo que son, unos profesionales, tratando con mucho cariño a toda nuestra familia y amigos. Y por último, queremos dar las gracias al equipo de Dirección, Rafael y Juan, por su colaboración desde el primer minuto y sobre todo y como no podía ser de otra manera, de nuevo gracias a Eduardo, que nos ha hecho sentir como en casa durante cada visita en estos meses y durante el dia de la boda. Muchas, muchas, muchas gracias a todo el equipo de Restaurante La Curiosa. Volveremos a veros, ahora ya como marido y mujer. Bravo!!! Por...

La experiencia mala muy mala. Se había concertado menú para un grupo de 23 personas: los entrantes fueron un triste plato de embutidos, 6 croquetas por plato, un vaso con un dedo de salmorejo y retirando los platos ya servidos para pasárselos a comensales de otras mesas de compañeros, en lugar de servir más u organizar desde el principio mejor la distribución de los mismos.

La bebida escasa, una única jarra de cerveza y de tinto para 6 personas. Pedimos más bebidas durante horas y no se sirvieron en ningún momento. En el plato principal tuvimos la suerte de podernos sentar en mesas, eso sí, pero en la calle, al pleno sol con un toldo, sin poder hacer uso del resto de local bien climatizado, que se le solicitó en la reserva. Eso se reservaba a clientes que a mi corto entender, (se dejarán más DINERO).

Los platos de pescado salieron los primeros, un rato más tarde comenzaron a servir la carne, en total estuvimos esperando más de 45 minutos a que saliera el último plato para poder comer todos juntos. Tuvimos que comer solos, por partes y algunos con la comida fría por esperar al resto. Una auténtica vergüenza. Igual pasó con el postre y con los cafés espera y espera.

Aunque tengo que decir que si que fueron muy eficientes en las copas y consumiciones fuera del menú. Ahí si eran rápidos en servir pero más todavía en cobrar, luego sí había organización para lo que se quería y poca para lo que no interesaba.

Lo único bueno de la velada fueron los invitados del grupo, que a pesar de un servicio nefasto, conseguimos disfrutar y celebrar nuestra compañía.

En definitiva, no lo recomiendo...

Un sitio con muchas posibilidades que no saben aprovechar, con un personal inexperto y un encargado prepotente y maleducado.

Todo penoso desde que llegamos, te dicen que el horario de apertura es a las 13:00h pero realmente no puedes disponer de hamaca y sombrilla hasta las 14:30h. De lo peor de este sitio fue el trato que recibimos por parte del encargado,el cual nos trató de una manera lamentable y chulesca. Aún seguimos sin entender el porqué a nosotros nos exigieron realizar el pago mediante transferencia y por adelantado al hacer la reserva cuando muchos llegaban,decían tener una reserva y pagaban allí mismo. No había ningún tipo de orden en la asignacion de sitios, aun llegando primero te hacen esperar sin un lugar mientras a otros los ubican antes sin ningún sentido. Pedimos que nos cambiaran las hamacas,no nos las cambiaron aún quedándose durante todo el día hasta el final de la tarde hamacas libres. No disponen de suficientes mesas para poner las bebidas, por lo que cuando les parece te la quitan para ponerse la a otro. Además de dar pena en las condiciones en las que están. Respecto a la comida, nachos de bolsa del mercadona con una cucharada de aguacate machacado al que llaman guacamole puesto sobre un plato. La hamburguesa de "ternera" más de lo mismo y el wok unos tallarines con un par de gambas en un plato "decorado" con un manchurrón de...