What a great hidden gem here on the outskirts of the city! While the outside looks unassuming, the inside looks like you've stepped into a bakery from a story book! The prices are very fair, especially for the high quality of the food. Fresh squeezed orange juice was delicious; and the croissants were fluffy and delicate. You can order cakes here, as well pick up some fancy chocolates. They also do lunch and dinner specials; these are usually posted outside the shop in the mornings. I definitely would recommend...
Read moreFuimos 3 personas a comer a las 15h a la terraza. Tienen unos ventiladores con vapor de agua que hacen que la temperatura sea muy agradable.
Para esperar la comida nos pusieron unos panes muy ricos con mantequilla trufada (te lo cobran en la cuenta).🍞🧈
Lo que pedimos, que nos llegó a continuación, fue:
🐙Rejos fritos con alioli: Buena cantidad y ricos. Muy recomendable
🍴Croquetas de jamón ibérico, de chipirones y de boletus con trufa: la textura de las de jamón era super cremosa, las de boletus no me hicieron mucha gracia y las de chipirones estaban bien.
🥘Arroz de gambas, sepia, rape y cigalas a la brasa (para 2): lo presentan en paellera. Estaba en su punto y tenía ese socarrat que me encanta. La única pega es que las cigalas y las gambas las vi como muy "blancas", a mi me gusta más cuando tienen más colorcito de cocinarlas, pero eso ya a gusto de cada uno.
-🍰 Tarta de queso: me ha gustado mucho la textura y el sabor. Es de estas que están deshechas y suaves, y con una base de galleta blandita. Muy recomendable. La tomamos con cafés y unas rejas de almendra muy ricas que te ponen. También nos ofrecieron chupitos de licor.
Todo, incluyendo bebidas, nos salió como a 82 €. Nos pusieron para llevar parte que nos sobró del arroz y de los rejos (creo que pedimos de más 😅😋)
Repetiré otra vez y recomiendo ir a probarlo. Además decir que Raquel y Kevin fueron muy simpáticos y nos atendieron...
Read moreSus comienzos en la calle Fermín Caballero 70 fueron a finales de los años setenta, con exactitud el 8 de Septiembre de 1978. Anteriormente se había estado trabajando mucho tiempo en la calle Conde de Peñalver y en la calle Santa Engracia, ambas en Madrid, también se había permanecido durante algún tiempo en Palma de Mallorca, en concreto en Cala-Millor (de ahí su nombre).Así mismo se ampliaron conocimientos en la Escuela Profesional de Pastelería de Barcelona.
El equipo profesional y humano, compuesto por seis personas, a cuyo frente estaba D. Natalio Pérez Jara y su esposa Doña Concepción Nieto Vallejo. Con el paso del tiempo este equipo se va ampliando, hasta componerlo en la actualidad diecisiete profesionales entre elaboración y venta que a día de hoy es dirigida por su hija Carmen y su marido.
En 1995, se inaguró otro establecimiento en Majadahonda (C/ Las Norias, 23) con espacios dedicados a repostería salada y dulce, panadería, bombonería y una barra para degustación, fruto de la expansión del negocio siguiendo la misma línea de calidad, que desde el año 2001 está regentado por su otra hija Concepción...
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