Como siempre se dice, la opinión de los demás está para respetarla, pero cuando la opinión de los demás es una entre 100, estará equivocado ese uno, o los 100? Pues eso.

La comida es increible, nos pusieron unas almejas que casi nos morimos de gusto, una salsita... riquísimas.

No comimos los chopitos porque nos pusimos finos del resto, pero como pone uno por ahí, no se que debió de comer, pero me imagino que otra cosa, porque tenían un aspecto para comérselos crudos y venían de la lonja de esa misma mañana, así que a lo mejor es que el gusto de el que pone esa opinión lo tiene en el ojete. Por el precio que tiene, la ubicación, la decoración y el servicio, me imagino que los que ponen malos comentarios serán los típicos pijeras que no se quedan agusto ni en un restaurante de 3 estrellas Michelín. Para el resto, cuando vayáis allí saldréis hinchados y con la calidad que tiene, por 20 euros por cabeza, no pidáis más, porque para eso deberíais de gastaros por lo menos el doble.